La tirana y el inadaptado

Inicia la batalla

Los meses lentos pero constantes, uno por uno, van cumpliéndose desde el inicio del plan para desvelar al conde Monterio, poniendo cada vez mas tensa la mente de las personas que hubieran sabido de la verdad, pero aun así, sin perder tiempo, cada quien intentaba aprovechar lo mas posible el interludio para reforzar sus cartas hasta que la hora prometía llegara, no sino hasta al tercer mes y el ultimo del año.

Durante este tiempo, la joven pareja invirtió su tiempo sabiamente en desarrollar su pueblo y preparar sus tropas.

Con respecto al pueblo, semana después de iniciado el plan, revelaron ante la gente, el lago de agua dulce secreto, logrando con esto, calmar y alegrar a los pobladores inmensamente, mas sin embargo cumpliéndose las predicciones de la pareja, el agua fue envenenada secretamente por los hombre de Monterio, disparando el descontento de la gente, por fortuna Yulio pudo purificar el agua, no sin preparar antes un montaje para ocultar sus dones, pudiendo con esto calmar al pueblo.

En otras cosas, una vez tenido el lago, inmediatamente abrieron canales, para habilitar y comenzar a sembrar alimentos, los cuales con ayuda secreta de Yulio pudieron cosecharse con satisfacción para días antes de la primera nevada, a inicios del ultimo mes del año, logrando con esto terminar de ganarse al pueblo.

Por otro lado de las preparaciones contra Monterio, Katiuscria contenida por su esposo para cuidar su salud, entreno sus tropas y las preparo en los diferentes escenarios posibles que pudieran ocurrir, sin rebelar mucho de los planes.

Yendo al entrenamiento de Yulio, esto se puede describir como brutal, desde la madrugada hasta la noche, casi todos los días, entrenar su don duramente, deberes de señor, entrenar con los soldados, practicar magia y dormir, todo en ese orden, obteniendo como resultado a un Yulio con un cuerpo con una constitución general algo grasienta pero robusta y fuerte producto de la re-conversión de la grasa en musculo casi llegando al ideal de un guerrero, y sus facciones la irse la grasa revelaron una cara bien definida, con una quijada gruesa, labios carnosos, una templanza humilde y una mirada oscura y remarcada adornada con ojeras. Pero no solo su cuerpo cambio si no también su conocimiento y habilidades, gracias a los distintos experimentos y las enseñanzas y dureza de su esposa, pudo cultivar su don a niveles perturbadores y mejorar su magia de tal forma que ahora era útil.

Y por ultimo y no menos importare, el desarrollo de la pareja, la cual durante estos meses, solo ha avanzado a nivel mas que formar confianza a nivel de amistad y socios, pero esto a nivel entre ambos,individualmente fueron otra cosa.

Yulio cada día, su amor por su esposa se nutria y maduraba mientras la iba apreciando y confiando mas en ella conforme iba conociéndola y tratándola en el transcurso de los dias, dejando atrás su infantil amor platónico y superficial.

Katiuscria por su parte, si bien pudo ver a Yulio como alguien de gran confianza, aun no cabía en ella ese sentimiento llamado amor, pero por lo menos, recientemente sus ojos ya empiezan a buscar un ligero deseo en la figura casi escultural y bien formada de su esposo.

Y ahora regresando al tenso presente que previene la tormera, en una día nublado y con la nieve arropando el suelo, Katiuscria se encontraba acariciando y contemplando con la mirada vacía a su abultado vientre a través de su holgado vestido, hasta que la voz de su preocupado esposo quien estaba sentado frente a ella en su ahora mas decorado comedor la saco de su tierno estupor.

—Kati,¿se esta moviendo de nuevo?.

—Ehh, si ,es raro... pero tiern..., ¡Oye!, que no me llames así y por que sigues aquí si parece que ya terminaste anda y ve con los soldados—Respondió apenada Katiuscria mandando a la miseria a su pareja.

—Jeje, no puedo descansar la comida un rato, ten piedad.

—La piedad es de los debilites , ahora ve y vete.

—bien, bien, pero recuerda no esforzarte mucho..

—!Vete¡

Finalmente grito Katiuscria, expulsando con esto a su marido de la habitación dejándola sola contemplando su vientre por un rato mas, para luego ponerse a trabajar en documentos oficiales y practicar su magia de forma sencilla, en su recién formada y humilde oficina en alguna habitación de la planta baja , hasta que luego pasada una hora, de la puerta, entro Yulio seguido de no mas y menos que el ladrón que mando con la importante misión, haciendo que ella se tensara.

—Kati.., Katiuscria aquí traigo al señor Lier, con noticias de la misión—dijo Yulio corrigiendo el apodo de su esposa y desvelando al nombre del ladrón.

—Por fin..., ven, que esperas ladrón, habla.

Ante la orden de su imponente señora, se apresuro hasta estar al frente de su escritorio para empezar a relatar.

—Buenas y malas noticias, la buena, el plan funciono, los Barones Funsei creyeron el mensaje  y luego de varios procesos lograron convencer al rey de las fechorías del ex-conde Monterio, y el rey en consecuencia mando a su ejercito para capturarlo a el y tomar la fortaleza.

Ante la noticia del ladrón ambos se llenaron de felicidad y alivio, pero aun así esperaron a que terminara de hablar.

—Pero ahora viene lo malo, Monterio a pesar de todo logro escapar y actualmente esta desaparecido, se cree que esta de camino hacia aquí, pero el problema es que no se ha hallado rastro de el, pero a pesar de esto el ejercito debería estar aquí para el día de mañana, eso es todo que informar mi señora.

Terminado de informar las noticias, Katiuscria inmediatamente ordeno.

—Yulio ve ha buscar de inmediato al capitán ¡deprisa!

—Ehh?, si entendido—respondió Yulio que al ver la urgencia de su pareja salio del cuarto en busca del capitán.

Minutos mas tarde, Yulio regreso con el nuevo capitán de las tropas , el cual saludo rígidamente diciendo.

—Saludos mi señora, en que puedo servirle.

—Capitán Draus, esto es urgente, ve con el nuevo capitán Lier e inicia los preparativos para la evacuación según lo planeado, depresiva no hay tiempo de explicación.

—¡A sus ordenes!—gritaron los 2 capitanes y enseguida salieron de la habitación a cumplir con su deber.

Una vez quedados solos los 2 Yulio le pregunto.

—Kati, me explicas lo que pasa  y porque Lier de repente salto a capitán.

—Que no me llames así, mira el ladrón cumplió su deber y esta su recompensa,hay un motivo claro esta, desde que apareció, se me ocurrió formar un cuerpo que trabaje en las sombras y no hay nadie mejor que el para el trabajo, ademas creo que ya debe tener experiencia ya que en mi carta lo presentaba como un capitán encubierto.

—Bueno eso explica lo de Lier, pero ¿por que la evacuación?, las columnas aun no se han activado.

—Sigues siendo estúpido Yulio, escucha, Monterio esta desaparecido y su única salida es apresurar su plan, solo estoy previniendo las cosas.

—Ya entiendo, bueno, supongo que debería contribuir en la evacuación ya que estoy algo libre.

—Si esta bien, anda.

—Entonce me despido.

Dicho esto Yulio se voltio para irse de la habitación, dejando sola a Katiuscria con sus pensamiento con la sugerencia siempre dicha de todos sus conocidos de tomarse la situación con calma.

Estas decisiones tomadas rápidamente en esa humilde habitación,no pudieran ser mas efectivas y precisas y el futuro sentarían las bases para glorificar el genio de Katiuscria, puesto que pasadas varias horas hasta el final de la tarde, Katiuscria desde su oficina y Yulio en medio de la ciudad junto con los demás pobladores pudieron ser testigo, de la activación de la 8 columnas cuyo verdusco y tenebroso brillo se podía ver y sentir a la distancia, dando inicio a la que ahora conocida, batalla de  la purificación.