Junto a ti|Emiliaco|Terminada|

Epílogo

¿Cuántas veces puedes encontrar el amor? es muy probable que alguna vez te hayas hecho esta pregunta y la respuesta es muchas, porque existen muchos tipos y formas de amor. Están el amor de familia, el amor de amigos, el amor de pareja, el amor propio. 

¿Cuántas veces puedes sentirte en plena felicidad? demasiadas, no hay un solo momento. Puedes sentirte plenamente feliz al cumplir una meta, al alcanzar un sueño, al estar en familia, al estar con una persona, al estar en soledad, al compartir amor.
¿Cuántas personas pueden darle paz a tu vida con tan sólo una sonrisa? quizá muchas, quizá solo una. 

¿Alguna vez has escuchado eso de "si no es para ti aunque te pongas y si lo es, aunque te quites"? puede parecer una frase muy banal, muy hecha para una sociedad en la que aún hay quienes creen que pueden controlar todo lo que sucede a su alrededor. Pero no, en realidad es una frase muy cierta, hay veces que deseamos algo con tantas ganas, que hacemos de todo para obtenerlo y, sin embargo, nunca llega a pertenecernos; pero hay otras veces en que pensamos que algo no es para nosotros y ni lo intentamos, pero de alguna u otra forma, eso que deseamos, termina en nuestras manos.

Podemos decir que el amor es algo parecido. Cuando estas destinado a estar con alguien, ni porque peleen, ni porque se separen, ni porque intenten alejarlos, por nada del mundo eso cambia. Lo que es para ti, jamás deja de serlo.

Emilio. 

Recuerdo el primer día que vi a Joaquín, tan solo era el chico con el que compartiría un proyecto y pensé que jamás podría llevarme bien con él. Me enojé tanto cuando llegó tarde a nuestro primer ensayo y entonces creí que él y yo nunca podríamos ser amigos. Pero semanas después estaba en su casa robándole un beso. Ese beso que marcó un antes y un después en mi vida.
Aunque pasaron muchas cosas entre nosotros, no cambiaría nada en nuestra historia. Porque eso es lo que nos hizo ser como somos, nos dio experiencia, nos dio valor y nos dio la oportunidad de darnos cuenta de que lo que sentíamos no estaba mal, nos dimos cuenta de que una de las fuerzas más grandes en el mundo, es el amor.
Nos atrevimos a ser valientes, confesamos nuestros sentimientos y nos quedamos juntos.
El día que le pedí que fuese mi novio, fue uno de los días más especial para mí. Los dos solos en aquel parque, con las estrellas de testigo. Esas que nos cobijaban cada noche mientras estábamos lejos. Recuerdo la primera noche que tocamos el cielo juntos, entre las suaves sábanas de mi cama. Ese día me di cuenta de que no deseaba estar nunca en ningún otro lugar que no fuese a su lado, porque simplemente con él lo tenía todo. Apoyo, comprensión, lealtad, sinceridad, risas, pasión, amor.

-¡Besando estrellas de Emilio!

-¿Qué? ¿Yo? ¿Enserio yo?

-Sí amor, ¡ganaste!

Joaquín se puso de pie para ayudarme a levantarme de mi asiento, yo dejé que él me levantara de los brazos, mi cuerpo no me respondía. Es que no lo podía creer, mi álbum "Besando estrellas" había ganado. Yo, Emilio, había ganado el premio a mejor álbum después de cinco años.

-Estoy muy orgulloso de ti, no tienes idea de cuanto- decía Joaquín mientras me abrazaba. Él estaba llorando, podía sentir sus lágrimas en mi hombro- ve amor- se alejó de mí y yo comencé a caminar casi en automático hasta el escenario.

-¡Felicidades Emilio!- la chica que entregaba el premio me dio un corto abrazo, antes de dejarme solo frente al micrófono.

-Hola- saludé- umm... la verdad estoy muy sorprendido por esto y es un gran halago el que mi álbum sea considerado el mejor del año... estoy demasiado feliz y emocionado porque este disco en particular es especial para mí- sonreí- está dedicado a una de las personas más importantes de mi vida, amor, esto- levanté la pequeña pieza dorada- es tan tuyo como mío. Gracias por inspirarme día a día, gracias por estar aquí, gracias por tu amor, tus consejos, por acompañarme en cada paso desde que éramos Emiliaco- la audiencia soltó un pequeño grito ante aquel nombre- gracias por permitirme estar a tu lado. Gracias también al público, a mis fans por haber acogido este álbum como suyo, son la más hermosa familia que siempre tendré.

Cuando culminé mi discurso me despedí de los presentadores y bajé del escenario. Los aplausos no dejaban de escucharse y yo tenía un solo propósito en mente, me lo había prometido desde que salí del departamento esta mañana. Si ganaba lo haría, aunque muy dentro de mí sabía que esa solo era una excusa, un impulso, porque de todos modos terminaría haciéndolo aún si perdía.
Los aplausos se extendieron hasta el momento en que llegué al lugar que ocupaba minutos antes y entonces todos centraron su atención en el escenario, pues el ganador de otra categoría sería revelado, pero a mí eso no me importó. Yo centré mi atención en el chico que me esperaba de pie y con una sonrisa en los labios. Dejé el premio en manos de Joaquín y después comencé a hablar.

-Mi niño de un millón de flores, hace poco más de cinco años te pedí que fueses mi novio ¿te acuerdas? Después te pedí que viviésemos juntos, pero dijiste que era demasiado pronto- él rió bajito- desde hace un par de meses hay algo rondando mi cabeza y no he podido pensar ya en nada más- sonreí nervioso mientras me ponía de rodillas frente a él.

-Em.Emilio ¿qué haces?

Joaquín.

Mi primer encuentro con Emilio no fue para nada lo que hubiese esperado, recuerdo haber llegado tarde aquella mañana a nuestro primer ensayo, él estaba enojado y serio conmigo, pero afortunadamente eso cambió días después. Comenzamos a pasar el rato juntos, a conocernos, a encontrar cosas en común y con el paso del tiempo, encontramos el amor en el otro.
Hemos sabido afrontar las adversidades que la vida nos ha presentado, logramos resolver los pequeños problemas en el camino y supimos superar las situaciones que ponían en peligro nuestra relación, como aquella vez, que después de un año de ser Emiliaco como dueto musical me ofrecieron un personaje en una obra de teatro en el extranjero. Yo estuve a punto de no aceptarlo, porque en México lo tenía todo, mi familia, mi trabajo, mi pareja. Pero Emilio me convenció de ir, él sabía de mi amor por la música pero también conocía mi amor por el teatro, por la actuación. Así que hablamos con su padre y todo quedó arreglado, dejé el dueto, Emilio se convirtió en solista y yo partí a Nueva York.
No voy a mentir, tenía miedo. Miedo de que lo nuestro se arruinara debido a la distancia, pero, de nuevo, Emilio se encargó de disolver mis miedos. Hablábamos cada noche antes de dormir y nos enviábamos mensajes en nuestros tiempos libres durante el día. El día del estreno de la obra él me dio una sorpresa, presentándose en primera fila. No pude ser más feliz. Acudió a visitarme dos veces cada mes y cuando volví decidí que no podía permitirme pasar más tiempo lejos de él.

-¿Te gustaría vivir conmigo?

-¿Hablas de...?

-Sí, mudémonos juntos ¿quieres?

-Claro que sí lindo, te amo.

Un mes después ya nos encontrábamos viviendo juntos en un departamento ubicado en el centro de la ciudad. ¿Nos costó acoplarnos? Claro que sí, nuestras rutinas eran diferentes al igual que nuestras costumbres, pero lo logramos.
Yo continué con mi carrera actoral y él con la música. Siempre echándonos flores en las redes sociales, en entrevistas y en las reuniones familiares. 
Pese a lo que muchos creían de nosotros, los dos estábamos cumpliendo nuestros sueños individuales y planeando muchos otros juntos. Emilio y yo lo estábamos logrando.

-Eres la estrella más grande de mi universo y quiero que brilles por siempre a mi lado ¿me harías el enorme honor de convertirte en mi esposo?

-Emilio- mis lágrimas comenzaban a rodar por mis mejillas- será para mí un honor brillar siempre junto a ti.

Él se levantó para después colocar un lindo anillo de oro adornado por pequeño diamantes que por lo que podía observar, simulaban estrellas. 

-Te amo con todas y cada una de las estrellas del universo Joaco.

-Con todas y cada una de las estrellas del universo, te amo Emilio.

Ambos sonreímos con lágrimas en los ojos antes de unirnos en un beso, un beso que sellaba nuestro compromiso y el inicio de un nuevo capítulo en nuestra vida.

FIN.

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Terminé llorando

¿Saben que los amo mucho a todos? ¿No? Pues ¡los amo con todas y cada una de las estrellas del universo!

¡Gracias!

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-Feliz 25-