Fuckboy (Jotakak)

Feeling for you (3)

Noriaki estaba perplejo por la pregunta del pelinegro, no sabía si era viable decirle que si o juzgarlo de supuesto loco.

-Y-yo...- tragó saliva- No se qué es eso.

Jotaro lo miró en silencio, cruzó la calle y tomo un bote de bote de basura, manifestó a Star Platinum y con una velocidad impresionante lo lanzó hacia el pelirrojo.

-¡¿Q-qué mierda...?!- rápidamente Hierophant Green hizo acto de presencia, deteniendo el contenedor de basura.

-Yare yare daze.- acomodó su gorra- Tienes uno.

-¡¿QUÉ CARAJOS TE PASA?!- estaba enojado, no solo porque lo había atacado sino también porque restos de basura calleron sobre su ropa y zapatos.

-¿Qué carajos te pasa a ti?- volvió a un lado del pelirrojo, ayudándolo a quitarse la basura del cabello.

Al sentir aquel leve tacto, el enojo de Noriaki se desvaneció siendo reemplazando por nervios, la delicadeza con la que retiraba los restos era impresionante.

-Vamonos de aquí antes de que...

-¡Oigan ustedes dos! ¡¿Qué carajos hicieron con la basura?! ¡¡Juntenla ahora mismo o llamaré a la policía!!

Al oír aquello ambos chicos miraron al dueño de la casa, después se miraron entre ellos como poniéndose de acuerdo sobre qué hacer.

-L-lo sentimos señor, no era nuestra intención molestar.- respondió Kakyoin- Ahora mismo...

-¡Vámonos, carajo!- después de aquel grito, Kujo tomó la mano de Noriaki para irse corriendo de ahí a toda velocidad.

Al principio no comprendió muy bien, pero al ver que el dueño de aquella casa los comenzaba a seguir, afirmó su agarre a la mano de Jotaro para huir más rápido.

Ya lejos de ahí ambos pararon a tomar un pequeño descanso. Noriaki estaba más agitado que el otro chico y cuando se compuso se mostró molesto.

-Estas mal de la cabeza... Estamos en problemas, ¡Siempre paso por ahí!- sobó el puente de su nariz molesto.

-Hmh, fue divertido.- Jotaro encaró al pelirrojo mirándolo con una cara algo... Provocadora- No lo niegues, Nori~

-No me digas así.- estaba muy nervioso como para poder romper la cercanía, por fortuna el otro lo hizo.

Hasta ese punto ninguno de los dos se había dado cuenta de que seguían tomados de la mano y con pesar Kakyoin soltó la mano de su amigo.

-Aqui doy vuelta y una cuadra más adelante esta mi casa, ¿Tú para dónde vas?- acomodó su gabardina mirando a su acompañante.

-Yo sigo derecho unas tres manzanas...- rió- Eso fue divertido. Espero que se repita.

Jotaro dibujo una pequeña sonrisa, dió media vuelta y se fue. El pelirrojo se quedó ahí, admirando la gran figura de ese hombre y descubrió que de verdad le gustaba. Tessa tenía razón después de todo.

Sentía que su pecho iba a explotar y comenzó a correr hacia la casa de su amiga.

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Estaba frente la puerta, acomodó su cabello, sacudió su ropa y tocó la puerta. Un ruido se escuchó y después de ello la puerta se abrió.

-¡Aah! ¡Noriaki!- era la mamá de su amiga, la cual solía pensar que su hija y el eran pareja- Pasa, Tessa está arriba en su habitación, ¿Quieres un té?

-Hum, no gracias señora. Necesito hablar con su hija. Voy a pasar- Se quitó los zapatos y después de una ligera plática con la madre de su amiga, subió las escaleras llegando al cuarto de la misma.