Capitulo 41 (Se Confiesa Todo)

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Llego la mañana, era realmente fresca, la lluvia había dejado su marca en la tierra y escaleras de ese santuario, el sol apenas salía para clarear el lugar, aunque durante esa temporada del año, pronto el frio llegaría.

Un caballero despertaba de su bello sueño, moviéndose un poco en su cama, abriendo con algo de pesadez sus ojos, parpadeando varias veces para acostumbrarse a la claridad matinal, con su mano derecha buscaba a alguien que no se encontraba junto con él.

Cuando se dio cuenta de que estaba solo en esa habitación, abrió con mayor facilidad sus ojos, encontrándose que realmente no había nadie, estando boca abajo, cubierto con una sábana blanca en la parte inferior de su cuerpo, suspiro con algo de tristeza.

-¿Fue un sueño?- Se giró, para quedar boca arriba, pero al hacerlo, sintió una leve molestia en su parte posterior y en sus caderas.

-Pero... Esto se siente muy real- Se percató que la puerta de su habitación se abría con cuidado, quedándose atónito al ver quien era y confirmando que aquello no había sido un sueño.

-Qué bueno que despertaste Borreguito- Decía un rubio, llevando con un tazón de fruta picada.

-Shaka...- Suspiro con alivio y una sonrisa llena de ilusión se posó en sus labios.

Virgo se acercó hacia donde estaba el, sentándose a su lado, ofreciéndole aquella comida.

-Me gusta cómo suena mi nombre en tus labios- Y rápidamente le da el beso de buenos días.

-Gracias- Sosteniendo aquella fruta en sus manos.

-Es lo menos que puedo hacer por quien amo- Toma un trozo de fruta y se lo da en la boca, al pelilila, que lo recibió feliz.

Ríe suavemente, después de pasar el bocado –Me vas a malacostumbrar- Imitando la misma acción que su novio.

-Bueno... Eso quiero- Dijo aquello con esa voz tan firme y seria que Mu le encantaba.

Depuse de ese pequeño desayuno, en la cama que ambos compartieron tan felices, hubo que darse un baño, y aun que ambos deseaban que fuera juntos, sabían que no podían darse ese lujo, el entrenamiento matinal empezaría pronto, si alguien los encontrara así o más bien, no los viera en el templo del primero listos, habría sospechas.

Así que tomaron turnos aun contra sus deseos, cambiarse rápido, y si Mu tuvo que prestarle algo, pues las ropas aunque fueron tiradas en el piso, no se secaron del todo y no se debía ver tan obvio lo que había ocurrido... Sobre todo, de que ciertos mandamases no debían siquiera sospechar, si no... El noviazgo duraría poco y por el simple hecho de que el rubio podría pasar a mejor vida.

Una mueca de dolor se pudo ver en la cara de Aries, cuando camino un poco hacia la entrada de su templo.

-¿Te duele mucho?- Pregunto algo preocupado Virgo.

-No, no es mucho. Es solo una leve molestia- Dijo con su mejor sonrisa, para no angustiar al otro.

-Lo siento... Debí ser más gentil- Lo abrazo de manera protectora.

Sonrió por ese comportamiento del rubio, cuando quería podía ser de verdad amable y tierno –Lo fuiste, pero es normal que duelo ¿No? Fue la primera vez...- Dijo aquello con un leve rubor en sus mejillas, recordando lo de anoche.

Un beso rápido, fue lo que recibió en respuesta. Tenía que hacerlo no por mantenerlo en secreto, por sus compañeros si no que quería decirles a los padres de Mu, que ahora eran novios de una forma adecuada y no quería que los viera antes de ello, si no Shion posiblemente lo acabaría.

Un Papá Para Kiki (Shaka X Mu) YaoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora