𝗣𝗮𝗿𝘁𝗲 𝟭: 𝗙𝗹𝗼𝗿 𝗱𝗲 𝗶𝗻𝘃𝗶𝗲𝗿𝗻𝗼

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Tomar la línea 210 a las siete en punto de la mañana era parte de su rutina diaria, al igual que ver a la desconocida sentaba en el penúltimo asiento junto a la ventana.

Ella no recordaba el momento exacto en que comenzó a observar a la chica del libro, pero cuando lo supo, fue igual a enterarse que respiraba. De pequeña no sabía que sus pulmones trabajaban para obtener oxígeno, hasta que alguien se lo dijo.

—¿Qué miras? —Moa se interpuso.

—¿Eh? —movió su cabeza tratando de encontrar otro ángulo para no perder de vista a la chica, pero un par de oficinistas la ocultaron—. Nada —suspiró.

El autobús se detuvo. La chica del libro bajó en su parada, Moa giró para ver a un estudiante que ahora ocupaba el asiento.

—¿Veías a ese chico? —su amiga frunció el ceño.

Ella solo negó con la cabeza.

Escucho hablar de nosotrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora