"¡El cine nacional está bueno!" espeté bastante enojado. "Lo que no está bueno es que hayan boludas como vos que piensen que lo nacional es solo una peli de Suar, eso es una poronga."
"¿Entonces por qué no vi ninguna peli buena?" cuestionó prepotente mi acompañante.
"Si vos no sabés buscar, no es mi culpa Wawa..." respondí aún molesto. "¿Estás segura de que queres venir conmigo al cine?, mira que soy complicado." advertí.
"Los chicos dijeron que, conociéndome, no va a ser tan terrible... además, nunca vinimos juntos, va a estar bueno." respondió entusiasmada, creo que no tenía ni idea de cómo era en el cine.
"Saqué las entradas por internet, esta es la tuya." comenté sacándolas de la billetera. "Si vas a comprar algo, que no sean pochoclos, hacen mucho ruido... y si compras para tomar, procura que no tenga hielo, el sonido es insufrible." la cara de Wawa se transformó radicalmente.
"Ah vos estás piradito, eh." acotó con el ceño fruncido. "¿Qué asiento tenés?"
"Fila 10, asiento 4, vos creo que tenés fila 5, asiento 6"
"¿Por qué tan lejos? Tampoco soy tan molesta." murmuró enojada.
"Ay Wawa... yo voy al cine así, si no te gusta devuelvo la entrada y se acabó." ahora el molesto era yo.
Era un insufrible, pero todos lo sabían, así que no entiendo de qué se quejaban.
Los ojos de Wawa me tiraron abajo de un colectivo imaginario, y me arrollaron ocho veces.
"Bueh, me voy a la sala." musitó con bronca, provocando que rodara los ojos.
Me dirigí a mi asiento, con la esperanza de que no se apareciera alguien molesto a mi lado, como en las últimas funciones a las que vine.
"Fua Zozo, estás re pesada boluda." espetó una voz desde el pasillo. "Ahora sentate sola, por densa de mierda."
Sentí el asiento de mi lado hundirse de un amargo golpe, y cuando volteé a ver quién era, noté a mi amiga de sala con una gran cara de enojo.
"Hola, amiga de sala." susurré, no quería molestarla... o no tanto. "¿Todo bien? Tanto tiempo."
Me miró y no respondió, se quedó observándome por aproximadamente seis segundos, hasta que habló.
"Hola, amigo de sala." dijo con una sonrisa esbozada. "Un mes pasó, creo."
"Te gusta el cine nacional... buenazo eso." largué con un tono bastante boludo, no puedo ser tan malo para hablar con personas.
"Sí, tenemos un cine re lindo, pasa que bueno, existe cada pelotudo..." respondió entre risas, obviando mis escasas habilidades para relacionarme con terceros, cosa que agradecí al cielo.
Contesté con un asentimiento y unas pequeñas risas, hasta que comenzó la película.
"Psst, psst... Valen..." escuché a mi lado. Era Wawa. "Me está re aburriendo la película, y es un embole venir al cine con vos, me voy a casa y te aviso cuando llego." la miré brevemente y asentí un poco indignado, era tremenda película, ella una irrespetuosa que no sabe apreciar el arte.
Volví a dirigir mi mirada hacia la pantalla, aunque me sentía un poco observado, así que decidí mirar de reojo hacia mi costado y, efectivamente, estaba en lo cierto. Zoe me estaba mirando, pero más miraba mi mano. Con cierta timidez sus ojos viajaban de la pantalla, a mi mano, y de mi mano, a mi cara. Lentamente y, sin sacar la vista de la pantalla, apoyé mi mano sobre el apoya brazos que nos dividía para que la tomara, y eso hizo, hasta que la sala se iluminó.
"Gracias Valen... por la mano, como la otra vez." agradeció tímida, pero con un tono risueño.
"No hay problema Zo, cuando quieras." respondí con una sonrisa, igual creo que quedé re gato, ni una bien.
"Es una masa Borges, eh." comentó mientras salíamos de la sala.
"Sí, alta actriz... igual Morán también hace lo suyo, sobretodo en la escena del auto." respondí a medida que bajábamos las escaleras, y así hablamos de la película hasta llegar a la puerta del cine.
"Acá me voy yo..." indicó señalando hacia la izquierda. "Estuvo linda la función de hoy." agregó aún con aquel tono de chiquitina que tenía.
"Es medio tarde ya..." respondí mientras observaba mi celular, eran las 22:37 "¿Te molesta si te acompaño? Me da cosa que te vuelvas sola."
Sus ojos se encontraron con los míos, y en un tanteo de unos segundos, recibí una sonrisa bastante amplia como respuesta.
"¿Qué haces de tu vida?" pregunté al caminar. Nos estaba envolviendo una atmósfera silenciosa bastante incómoda, y por suerte, me destacaba en romperlas. "¿Estudias? ¿Trabajas?"
"Sí..." respondió asintiendo. "Estudio relaciones internacionales, ¿Vos?" preguntó curiosa.
"Escribo, compongo temas y eso... y veo muchas pelis, no sé si cuenta." respondí riendo, provocando que ella también riera. Tenía una risa bastante peculiar, sonaba dulce, pero después de unos segundos se volvía bastante graciosa y contagiosa.
"Eu que lindo, capaz nos cruzamos en algún musical y te pinta el 'La La Land' y te pones a cantar ahí." acotó, aún con esa risa tan llamativa.
"Me tiro más para el rap igual, porque cantando soy bastante malo, ¿Vos no cantas?"
"Es complejo... cantaba de más chica, hice dos años nada más... así que desafino como las mejores." contestó entre tímidas risas. "No sé por qué dejé la verdad... tendría que retomar."
Seguimos caminando unas diez cuadras hasta llegar a un edificio bastante luminoso, tenía una gran puerta de vidrio y por dentro estaba repleto de espejos.
"Acá me quedo, quiero imaginar que no vivís lejos de acá, ¿No?" habló preocupada. "Porque si te tenes que tomar un uber o algo te hago la dos, bastante con que me acompañaste hasta acá."
"Despreocupate Zo, en la esquina de allá me tomo el bondi y ya está." sonreí, buscando así, relajarla un poco. "Fue lindo igual acompañarte, sos bastante graciosa." confesé, provocando que sus cachetes tomaran un color carmesí.
"Gracias Valen, vos también... ¿Estás seguro de que no queres que te espere?" insistió. "Ya veo que te pasa algo y no quiero."
"Deja de joder Zo, anda dale... no pasa nada, gracias igual." sostuve mientras me acercaba a ella, para depositar así, un beso en el cachete, el cual también la sonrojó. "Entra que hace frío, dale."
"Bueno, pero porque quiero, no porque vos quieras." espetó con una molestia fingida. "Y Valen..." me llamó antes de entrar al edificio, provocando que volteara a verla. "No es un embole ir al cine con vos, sos un gran amigo de sala." sonrió para luego entrar, y yo sonreí para luego irme.
Capaz Zoe no era tan ortiva como pensaba.
MÁS DULCE ZOE LOCO TIENE CORAZÓN LO PUEDEN CREEEEEER.
dicho sea de paso, vean la ciénaga, vean la la land.
aguante el cine patrio loko.
