¿Por qué...? [Citrus]

Prólogo.

El día de la graduación ya había llegado. Al fin, después de tanto esfuerzo, consiguió abrirse paso y estar entre las 30 mejores. Pero su camino no acabaría allí. Aún la quedaba mucho por recorrer, y esperaba poder hacerlo a su lado. Fue gracias a ella que decidió que estudiaría psicología en aquella universidad. Realmente fue por ella que empezó a estudiar, nunca se le dió bien y opinaba que una chica sólo necesitaba saber de moda y amistades. Pero conocerla la hizo cambiar de idea.

Habían pasado casi tres años pero recordaba el día en el que ella y su mejor amiga entraron en aquella academia por primera vez como si fuera ayer. La manera en la que chocó con la presidenta del consejo estudiantil y su fiel amiga, la vicepresidenta, pese a las advertencias en los días anteriores de su mejor amiga, Harumi. Fue por Harumi por quien ella entró en aquel instituto, la hermana mayor de esta era la anterior presidenta del consejo y prácticamente las obligó a entrar a aquella academia.

Aunque al principio odiaba el hecho de estar allí, después de... "aquello", empezó a pensar que el destino la llevó hasta allí para ayudarla. Descubrió que aquella chica tan borde, que parecía un alma en pena, alguien sin sentimientos ni empatía ninguna, en realidad era alguien con un corazón frágil que había creado a su alrededor una armadura inescrutable. Indescifrable para todos, excepto para ella. Había algo en ella que la llamaba mucho la atención, por alguna razón quería acercarse a ella, apoyarla, en definitiva ser su amiga. Poco a poco con esfuerzo y unas cuantas excusas lo consiguió. No fue fácil pero ya había decidido que haría todo lo posible.

Y allí estaba, caminando junto a su madre, Ume, hacía el salón de actos del instituto. Se sentía nerviosa, era la última vez que vestía su uniforme, que andaba por aquellos pasillos. Mirando alrededor todo le evocaba recuerdos, muchos buenos y algunos malos.

- ¡Hey, Yuzu, Ume! - Oyó detrás de ellas, girando.

- ¡Buenos días! - Exclamó la madre.

- ¡Hola Matsuri, Nene! - Dijo la rubia.

- ¿Cómo estás?

- Pues algo nerviosa. - Dijo riendo mientras se rascaba la nuca.

- Entonces... ¿lo harás?

- ¡Claro! Para eso estoy aquí, ¿no?

- No creo que me estes entendiendo...

- ¿Eh? - La miró confusa.

- ... - Al ver la cara de la pelirosa se dió cuenta que debía dejarlas a solas. - Chicas, os dejo, voy a buscar sitio para las tres. - Yéndose hacia el salón de actos.

- Me refiero a declararte de una vez.

- ¡HaruYuzu!

- Chicas, ya os dije que entre Harumin y yo no hay nada.

- No me refiero a Taniguchi. - Agarrando por el cuello a Nomura.

- ¡El Harufffffff ef infiffto!

- ¿Entonces a quién te refieres?

- Maldita sea, no puede ser que no te hayas dado cuenta. - Se llevó la mano a la cabeza.

- ¿De qué? - Entrecerró los ojos.

- De que estás---

- ¡Hey M--- Aihara!

- Exa---

- ¡Buenos días a todos! - Dijo acercandose.

- Buenas.

- El acto va a comenzar dentro de poco, por favor vayan a sus respectivos sitios. - Dijo la más alta.

- Esta bien, ¡vamos chicas! - Comenzando a caminar.

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#QuédateEnCasa