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Ya se podía ver los primeros rayos de luz tocar Konogakure a pesar de que estaba todo claro todavía no había gente por las calles, eso se debía a que apenas eran la seis de la mañana.
Pese a ser tan temprano Naruto se apresuraba a llegar a su oficina, no tenía que más hacer que sumergirse en su trabajo, casi no pudo dormir en la noche pensando en cómo habían cambiado sus amigos con el paso del tiempo: "Sakura dejando a aldea", "ella no es la madre de Sarada" y luego esta "Sasuke como siempre indiferente y creyendo que él puede todo solo sin pedir ayuda y consultar a nadie".
Lo que más le dolía no era que sus amigos mintieran sobre su matrimonio, sino la falta de confianza del teme, a medid que iba divagando ni cuenta se dio que ya llego a su destino y de forma inmediata se adentró en la oficina para comenzó a rellenar los formularios que le faltaban; después de todo muy pronto seria el festival de primavera en Konoha.
Mientras más formularios y trabajo faltante iba realizando, no se percató que ya casi eran las siete hasta alguien entro a su oficina sacándolo de su frustración.
—Hokage-sama, venimos por la misión a la que nos mandaría hoy— dijo Konohamaru mientras inclinaba levemente la cabeza siendo imitado por el equipo que lidera entre los cuales estaba su vástago con quien había discutido o través en la mañana.
—eh si Konohamaru, su misión es ayudar a Madame Chiyo con el cultivo de flores ya que pronto será el festival de la aldea, bueno eso es todo pueden retirarse. Esperen un momento, este Sarada quédate solo serán unos instantes— dijo Naruto con firmeza mientras los otros se retiraban.
Una vez solos, la menor procedió a hablar.
— ¿qué desea Hokage-sama? —dijo ella sería.
Eso sorprendió al hombre ya que siempre era dulce con él.
—este... tu ¿cómo estas con todo lo que está pasando en tu hogar Sara-chan?
— ¿Cómo estoy Séptimo?, bueno no entiendo a qué viene su pregunta—expreso ella todavía con el semblante serio que le hizo sentir que hablaba con Sasuke versión femenina.
"Sin duda es hija del teme".
—bueno ya sabes con lo de tu madre, digo Sakura y con tu padre, vamos yo sé que es difícil de comprender para un niño; pero...
Ni bien iba a comenzar con su explicación fue abruptamente interrumpido por la menor.
—Sakura no es mi madre, en fondo siempre lo supe y aunque usted diga que nos parecemos eso es falso porque no hay nada similar o meramente igual en nosotras, además estos últimos años casi que ni pasaba en casa por lo que ya tenía una leve sospecha y en cuanto a papá, no pasa nada con él ya que ahora pasaremos más tiempo juntos debido a que no aceptara más misiones lejanas— finalizó con una sonrisa que ilumino su rostro.
