The truth || Lucaya #2

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Amanezco con nauseas y un gran dolor de cabeza.

El sonido de los carros pasar por la ciudad resuenan haciendo que mi cabeza palpite con más fuerza. Me quiero mover pero todo mi cuerpo pesa, hacer cualquier movimiento me duele y me provoca nauseas.

Es una sensación horrible.

Intento estriarme pero siento un bulto a lado mío. Volteo confusa y me encuentro con la cara de mi mejor amiga dormida.

Me levanto con cuidado, pero cuando miro hacia el suelo veo a Lucas con solo su pantalón puesto.

Lo observo determinadamente mientras el descansa, su pecho desnudo sube y baja lentamente, se ve tan calmado, tan en paz.

Sonrío inconscientemente con ternura.

Bajo con cuidado de la cama, intentando hacer el menor ruido posible, cruzo mi cuarto, abro la puerta con cautela y salgo.

Me dirijo al baño, me miro en el espejo, me veo bastante cansada y mi cara esta hinchada. Abro un poco la llave y hecho agua a mi rostro, al sentir el agua fría recorrer mi cara, los recuerdos de anoche se hacen presentes en mi mente.

Tengo flashbacks muy vagos de mi bailando muy cerca de Lucas, también de Jack, recuerdo el juego y a Riley entrando al armario con Farkle y yo entré al armario con alguien.

Cierro la llave, me dirijo a la cocina, me sirvo un baso con agua y me siento en el comedor.

No logro recordar con quién entre al armario, pero recuerdo un beso, las manos de esa persona recorrer mi piel.

Siento el calor subir por mis mejillas, un nudo de hace en mi estomago.

Después de intentar recordar pero no lo logro, escucho ruidos provenientes de mi habitación, Lucas y Riley salen de la habitación. Lucas se muestra igual de demacrado que yo, mientras que Riley solo se ve cansada.

Riley nos da los buenos días, se sienta en el sofá y pregunta por mi madre, me encojo de hombros y contesto:

—Probablemente este en el trabajo.

Ella asiente dándome la razón.

Les sirvo a mis amigos un vaso con agua, Lucas decide querer hacer el desayuno, no me opongo ante ello porque realmente me siento cansada.

Desayunamos los tres platicando sobre la fiesta, aunque nadie toca el tema de cuando jugamos botella, a lo cual agradezco.

Justo terminado de desayunar el celular de Lucas suena, él contesta y después de una platica leve termina la llamada y nos anuncia que sus padres ya lo quieren en casa, así que agarra rápidamente sus pertenecías y se despide, dejándonos a Riley y a mi solas.

—Fue una noche algo loca, ¿no crees? –habla Riley minutos después de que Lucas se haya ido.

—Sí... –contesto.

—Te pusiste algo ebria.

— ¿Algo? –pregunto con ironía.

Las dos soltamos una risa ligera y negamos con la cabeza.

—Así que en el armario... –empezamos a hablar al mismo tiempo.

Ambas nos callamos y ella me dice que hable primero.

— ¿Qué pasó en el armario con Farkle?

Sus mejillas se pintan rojas, muerde sus labios nerviosa y niega con la cabeza. Yo frunzo el entrecejo al no entender su reacción, y la miro con duda.

—Pasó algo... –suspira– pero fue algo diferente. Quiero decir, solo había besado a Lucas antes y sentía mucho con él y obviamente con Farkle sería diferente porque son dos personas muy distintas, pero no sé siento que hubo algo que no sé cómo explicar.