Cap 26 La Cosecha Parte 2

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Nos materializamos en el Olimpo, los nervios se apoderaron de mí pues iba a ver a madre, padre y quizás también ha Fénix. Aunque pensándolo bien después del pequeño problema que Fénix tuvo con Zeus dudaba en que se apareciera por aquí.
Había tomado una decisión ya no quería ser tosca con mis padres, ya suficiente tenían con haberme ido del Inframundo y haberles pedido mi espacio.

Tan pronto ingresamos en el Gran salón donde se celebraría la ceremonia de la cosecha en donde los dioses renovarían el juramento de lealtad que eones atrás hicieron a Zeus, también proporcionarían valiosos obsequios al rey de los dioses como muestra de respeto. No me pasó desapercibido mientras íbamos adentrandonos en la sala como todos se quedaron mirándonos cómo si fuéramos una aparición. Lo anterior me incomodó en demasía, ya que esta nueva versión de mí odiaba ser el centro de atención.

-Tranquila, solo sienten envidia por tú belleza y mística, sabes bien que en nuestro mundo abunda la saña.

-No me sueltes. _Pedí sin poder evitarlo y me apoye aún más en su brazo.

-No lo haré. _Sentenció mientras posaba un beso en mí cabeza, me era imposible no derretirme con ese gesto, fué tan espontáneo que incluso escuché el jadeo de sorpresa de algunos invitados.

-Por qué no esperaste a ingresar como mi padre y Zeus cuando ya todos los invitados estuvieran congregados de todos modos eres de la triada.

-Y perderme la cara de Zeus, claro que no. _Dijo sin perder de vista el lugar donde pronto padre y Zeus se materializarian.

-Aveces ustedes pueden ser tan infantiles. _Dije sin poder ocultar la diversión que me proporcionaban sus ocurrencias.

-Puedes imaginar que Tina se pusiera en evidencia, una humana en el Olimpo, sería épico. - Siguió hablando mientras ignoraba mi comentario.

-No lo harás, no permito que la pongas en peligro. _Dije muy seria.

-Aguafiestas. Ya te lo prometí no haré nada. _Respondió, mientras ponía morritos en los labios. Esto era algo de guardar en la memoria, él tosco y burlón dios de los mares haciendo pucheros.

-No sé si pegarte o besarte. _comenté sin poder evitarlo.

-Puedes hacer las dos. _Dijo mientras levantaba las cejas de forma sugestiva.

No pude darle una buena réplica, ya que, él sonido ceremonial avisaba la llegada de los dioses mayores, no pude evitar que mi corazón latiera fuerte, iba a ver a padre después de un buen tiempo, él era el hombre de mi vida le amaba demasiado y sobre todo lo echaba mucho de menos.

Las reuniones en nuestro mundo eran bastante extravagantes, éramos dioses después de todo. La oscuridad dominó la sala, la penumbra y la bruma nos cegó a todos, esto quería decir que el dios del Inframundo había llegado, luego el trueno rompió la oscuridad en dos, un relámpago tan sonoro y sordo que dejó atrás la oscuridad revelando la luz, lo anterior quería decir que Zeus ya estaba presente.

-Es mi turno. _Susurro Poseidon a mi lado.

Claro que si, como se iba a perder la oportunidad de hacer una entrada triunfal, puse los ojos en blanco, ya que hasta ahora se había portado  demasiado bien para que fuera real. Entonces antes de que siquiera pudiera detenerlo, un remolino de agua azul y brillante causó gran conmoción en los asistentes, era algo mágico, magnífico. El agua danzaba por todo el lugar seduciendo a los asistentes interactuaba con los demás sin tocarlos, era casi un hechizo, entonces sin poder evitarlo también me deje llevar por su belleza.

La Triana estaba completa, tal como Poseidon lo había deseado Zeus no pudo disimular su desconcierto y más teniendo en cuenta que la llegada del tercero había dejado a todo el salón impresionado.
Zeus se recompuso momentos después y el protocolo continuó, cada dios y criatura del Cosmos poderosa rindió homenaje al rey de los dioses, aunque para ser honesta el show en efecto se lo había ganado Poseidon quién no borraba de sus labios su sonrisa de superioridad, es que se la estaba pasando en grande y no se esforzaba en ocultarlo.

***

Tina.

¡No era justo!, ¿para qué me trajeron si me iban a dejar por fuera del salón? Los guardias de ese gran palacio no me dejaron siquiera subir los dos peldaños de esos grandes escalones que me separaban de la celebración de los dioses.

Bien, no mentiré, la realidad fué que para no levantar sospechas me enviaron con el grupo de Guerreras Ninfas de agua y demás personas importante de la Corte del reino de Poseidon o como se llamen, para ellos todo era muy normal, ellos nacieron y crecieron entre seres sobrenaturales, pero todo esto era realmente nuevo para mí, así que me distraje por lo magnífico de las estructuras. El Olimpo simulaba ser una gran ciudad llena de vida, elegancia y color. Los edificios parecían ser de cristal o tal vez diamantes, además había follaje, plantas, animales y naturaleza que en mi vida hubiese imaginado siquiera que pudieran existir. Es que esto era subrealista maravilloso. Cómo no me iba a distraer con tanta maravilla.

Cuando quise reunirme de nuevo con el grupo, estos ya no estaban por ningún lado. Entonces oficialmente estaba perdida y los guardas no creyeron que estaba invitada, así que aquí estaba yo muy exhausta después de rogar que me dejaran entrar. Solo rogaba y esperaba que Nina, perdón Jade se diera cuenta de mi ausencia y le pidiera a su muy sexy prometido y todo poderoso dios de los mares que me rescatara, entonces mientras esto ocurría había decidido no perder la oportunidad y dar un paseo por este maravilloso lugar, después de todo no todos los días tienes la oportunidad de decir que estuviste en el reino del Rey de los dioses. ¿Como sería este dios? ¿Sería tan espectacular cómo su hermano menor, o el era el feito de la familia?

**Hay Tina por favor no vayas a cometer una imprudencia!!!! Mis amad@s compañeros de lectura, por aquí les dejo esta segunda actualización, espero muchas reacciones de su parte, confieso que ya me imagino que van a decir.!!!! Estoy emocionada, los y las leo... Abrazos de oso**

JADEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora