Cap 45 Temor

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Géminis

-¿Donde lo tienes? ¡Exijo que lo sueltes! _Dije con los dientes apretados tratado de frenar mi temperamento. - Por favor. _Trate de suavizar las cosas, pues sabía bien que con él no conseguiría nada si actuaba de forma grosera y hostil.

-Es así como me saludas después de que no has venido a verme. _Respondió élfingiendo enojo.

Él padre de mi madre, Zeus él rey de los dioses, luego de descubrir mi origen se esforzó por conocerme, ganarse mi confianza y crear un vínculo conmigo. En un principio me sentí aprehensiva pues aunque ella me trajo al mundo nunca fué una madre para mí. Sin embargo, con el pasar del tiempo me pude dar cuenta que él, su padre en definitiva era honesto y quería hacerme parte de su existencia.

-Abuelo, por favor. _Pedí con voz suave. - Permite que se marche conmigo.

-Géminis sabes bien que detesto que me llames de esa forma. _Dijo con severidad.

-No me culpes, nací entre humanos y ese es el apelativo para el parentesco que nos une.

-Ahora me estas comparando con los humanos, dos ofensas en menos de un minuto, ¿debería acaso encerrarte junto a tú compañero para que reflexiones?

Preguntó él queriendo fingir estar muy ofendido. Sin embargo, Zeus aunque lo tildaban de frío y arrogante conmigo se mostraba de forma muy diferente y eso solo me decía aunque se esforzara en disimularlo, que su forma de tratarme estaba ligada a que él quiso o mejor dicho quería en demasía a su hija renegada, Perséfone.

-Serías capaz de encerrarme, Abuelo. _Dije con toda intensión, pues lo que pretendía era hacerle sentir mi molestia por tener encerrado a mi todo.

-Ya me quedó claro que estas enojada. Sin embargo, deberías preguntar por qué he tenido que encerrar a hermano, padre e hijo. _Dijo él rey de los dioses mientras se acomodaba en su trono.

Después de hacer un gran esfuerzo por escucharlo pude entender que está vez él tenía toda la razón y es que Fénix y Hades estaban totalmente fuera de control después del desafortunado final  de Jade.

-Reconozco que hiciste lo que tenias que hacer, pero por favor deja que venga conmigo yo haré que se calme, iremos en búsqueda de Adara.

Zeus pareció pensarlo, por un segundo pensé que no dejaría que Fénix se fueran conmigo, pero me sorprendió dándome su consentimiento. Lo sentía por Tina, la amiga humana de Jade, pero ahora debía parar la búsqueda de la chica y concentrarme en hacer en entrar en razón a Fénix, luego ir en búsqueda de Adara para que hiciera lo propio con Hades.

***

Tina.

-¡Ay no! Ay no! _Las palabras de Jade no paraban de repetirse en mi cabeza, ese dios era el mismísimo Zeus y yo fui tan tremendamente estúpida, ¿es que como no até cabos? ¿Cómo no pude darme cuenta de lo extraño que era todo?

No pude darme cuenta porque soy una completa idiota, él iba a matame. ¡No! Peor aún, podría, podría, es que no me daba mi pobre cabeza para siquiera imaginarme lo que ese dios vengativo podría hacerme cuando se diera cuenta que lo que más aborrece se coló en su propio palacio y peor aun por poco en su cama.

***

Después de salir del impacto provocado por esta revelación y tratar de mandar al fondo el pánico que me invadió tuve al fin claro que iba hacer y lo primero era no permitir que ese dios averiguara mi verdadera identidad. Primero porque tenía que ayudar a Jade así fuese lo último, segundo porque me hacia pis de miedo por el solo hecho de tratar de imaginar lo que sería mi suerte si él lograba averiguarlo.

Entonces tuvimos el primer encuentro después de haber estado evitando con uñas y garras el  encuentro.

-Quiero pedirte disculpas por no haberme presentado antes. _Dijo al materializarse justo tras de mi, luego posó una de sus manos en mi hombro y aunque luché por fingir serenidad fallé terriblemente al tener que encontrarme con su mirada.

-Estas muy fría ¿te sucede algo?_Indagó alzando una de sus cejas rubias, mirándome con esos ojos tan claros y tan mágicos, mientras que yo trataba a de pasar saliva inexistente para aclarar mi propia voz o mejor dicho convocar palabras que no lograban salir de mis labios.

-No-no es nada. _Logré decir, mientras que ponía un poco de espacio entre los dos.

-Mientes fatal. _Dijo, luego acortó la distancia que débilmente había logrado. Sabía exactamente que seguía, él iba a besarme y yo no tenía la fuerza para evitar lo inevitable.

-Señor, _Escuché una voz grave aclararse muy cerca de nuestra ubicación. Noté la gran molestia de Zeus, pero puso toda su atención en el hombre corpulento que se encontraba a pocos metros.

-Poseidon quiere hablarle y parece que es urgente.

Él rubio se puso un poco tenso, demasiadas actitudes humanas para creerse diferente y aborrecer tanto a la humanidad. Pensé, pues debía reconocer que el que encontrara mi especie tan aborrecible más que miedo, ahora me resultaba muy molesto y ofensivo.

-Otra vez disculpame, te buscaré en la noche y cenaremos juntos. Nadie va a molestarnos te lo prometo.

Asentí y lo vi irse, mientras que mi retardada mente hasta ahora logró procesar lo que él soldado soltó. Poseidon estaba en el Olimpo.

***

La hallé en uno de los muchos jardines del lugar, la había buscado por todos lados, incluso no había bebido no comido absolutamente nada en todo el día, pues me urgía encontrarla. Tenía que dar con ella antes de que el ex psicópata de Jade se enterara que estaba aquí y quisiera callarme, desaparecerme o todas las anteriores.

-Por fin!!!! _Grité con urgencia cuando la diosa rubia reparó en mi precencia.

***

Afrodita.

Una larga existencia me daba la facultad de decir sin temor a equivocarme que ya nada lograría sorprenderme. Sin embargo, que equivocada estaba, que arrogante era al pensar que este Cosmos lleno de misterio no guardaba nada más bajo su manga.

Desde un principio algo en la nueva mascota de Zeus llamó mi atención. Sin embargo, el hecho de que mis hermanos estuvieran jugando a quién la tenía más grande no me permitió que pudiera enfocar mi atención en la chica. Entonces la Ninfa de agua quién en un principio pensé que fué raptada por Zeus me sorprende revelando que en realidad es una chica humana y justo cuando estuve a punto de soltar una gran carcajada por que esto solo podría ser obra de Poseidon ella me deja en Shock al revelar que puede comunicarse con Jade y que ella le ha pedido buscar ayuda.

Tuve que pensar rápido para actuar rápido, tuve que jurarle a la impostora que Zeus no se enteraría de su verdadera identidad. En un principio quise decir lo siento, pero el es mi hermano y mi rey. Sin embargo, el pánico presente en los ojos de la chica me recordó la poca paciencia que mi hermano tiene por la humanidad y supe que ella fué valiente al confiarme sus secretos, además se la estaba jugando por Jade y si todo lo que ella decía resultaba ser cierto tenía en mis manos la forma de parar el conflicto de mis hermanos y mantener el fuerte unido.

Le pedí a Tina que no hablara lo que habló conmigo con nadie, en respuesta ella me miró como si fuese idiota y en ese momento en vez de molestarme la actitud de la chica me gustó, pues admiré su transparencia. Le creí, le creí aunque su historia fuese un poco increíble y por ello ahora me dirigía a la guarida de Tánatos, pues dadas las circunstancias el sería el único que podría ayudar con la situación de Jade dado que su padre y hermano ahora mismo no gozaban de cordura.

***Eh aquí un capítulo nuevo, y baja que hay uno más***

JADEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora