Primeros días en Titán parte 6

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Ahmed no sabía cómo responder a eso, estaba casi sudando por lo que Carolina le había dicho

-A ver tío, dime algo.

-No se cómo demostrarte eso.

-Dejate llevar.

-Señorita, esa es una propuesta indecente.

-Mire don perfecto, yo que usted aprovechara.

-(Ahmed en su mente) Sabes, no me gustaría empezar mal mi nueva vida acá en Titán, en la guerra el la gran virtud que une es la confianza, la guerra de hoy es contra la desaparición del humano y la ignorancia de nuestro universo, y Alejandra... ¿A quien engaño? ni que estuvieramos comprometidos, hoy por hoy solo es un contrato que ella podría no cumplir...

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-Gracias.

-¿De nada?

-No sabes de que hablo verdad.

-La verdad no, pónmelo más claro tía.

-Ya extrañaba esto.

-Yo también.

-¿Qué?

-Digo, ya extrañaba que una mujer no se apenara de decir tales cosas, en La Tierra sería pecado.

-¿Por qué crees que quise irme de ahí?

-Buen punto.

-Oye, no me has considerado como compañera de viaje ¿verdad?

-Espera, ¿compañera de viaje dijiste?

-Compañera de viaje dije.

-¿Compañera de viaje dijiste?

-Compañera de viaje dije.

-Se me hace que has planteado mal tu pregunta.

-Compañera de viaje dije.

-Tía, por qué me preguntas eso justo después de...

-Una cosa descarta la otra.

-Eres una maldita astuta.

-¿Entonces?

-No he oido nada de tí que me de una ventaja en una misión espacial.

-Que la generación que nazca en el planeta será tan hermosa como yo.

-¿Insinúas que voy a tirar con mis compañeras de viaje?

-Tío, no seas feminazi, obviamente necesitas a tus compañeras de viaje para poblar un planeta.

-No había pensado en eso.

-Sí que te afectó la primera noche.

-Y la segunda también.

-Tío, eso es biología básica, te hacía más inteligente.

-Despistado más bien.

-¿A quien tienes en tu lista para compañeras de viaje?

-Te lo mostraré si tú me muestras la tuya.

-Vale.

Ambos examinan la lista uno del otro.

-¿No pondrás a Alejandra?

-(Ahmed en su mente) esta desgraciada me quiere sacar verdad.

-Tío, ¿No te agradó tu compañía de viaje? ¿Esa que dijiste que ha sido tu única familia?

-Carolina...

-¿Estás colado por Alejandra y no me lo has querido decir?

-Carolina, me agradas bastante como para que nos pongamos a discutir ahora.

-No quiero discutir, solo quiero que me digas ¿Te gusta más Alejandra que yo?

-...

-Contesta por favor.

-No sé.

-Hasta que lo sepas, vete, te agradezco pero no quiero que estés mencionando otro nombre cuando estés conmigo.

-Tía, a ver... nada, olvídalo.

-Saluda a Alejandra de mi parte.

-Ah sí, ella también te había mandado saludos.

Ahmed se encamina otra vez al campamento 15, en el camino muchas cosas pasaban por su mente, desde el propósito de su llegada a Titán, como lo que restaba por hacer en este universo del cual algunas teorías que había oido decían que no es único.

Al llegar al campamento no se molestó en cerciorarse que Alejandra estuviera dormida, se fué directo a su cuarto, y durmió profundamente.

Al siguiente día, se levantó media hora más tarde, lo que lo hizo coincidir con Alejandra para ducharse. Casi habían salido al mismo tiempo.

-Buenos días.

-Buenos días, Ahmed, ¿como la pasaste con Carolina?

-No nos fué muy bien, tuvimos bastantes desacuerdos.

Alejandra ya sospechaba algo, así que siguí teniendo una plática normal, hasta llegar a la ducha.

-Nos vemos al terminar.

-Vale.

Cuando ambos terminaron de bañarse, Alejandra fué a su cuarto a hacer su meditación, luego fué al cuarto de Ahmed.

-¿Cómo amaneciste?

-Relativamente bien.

-Todavía pensando en lo de Carolina.

-Es imposible no pensar en ella.

-¿Por qué te importa tanto no estar de acuerdo con ella?

-No lo sé.

-Ahmed, no mientas, qué pasó ahí.

Ahmed procedió a relatarle con lujo de detalles lo que había pasado en la habitación de Carolina, entonces Alejandra vió que Ahmed no había pasado la "prueba final".

-Por favor, no me vuelvas a hablar hasta que yo te diga que estoy lista.

-Dijiste que no tenía que hacer caso a lo que dijeras.

-Ahora es necesario, por tu bien, por el mío, recuerda que seguimos siendo humanos, superhumanos gracias al cuidado de "La Resistencia", pero seguimos siendo humanos.

Alejandra se marcha y Ahmed camina solo al comedor, ahí, había coincidido con Carolina, quien no se molestó en dirigir su mirada hacia él.

Ahmed se había resignado ya a quedarse soltero.

-Hola, ¿Me puedo sentar?

-No hace falta que lo pidas, siéntate.

-Te miras un poco mal.

-Corrección, estoy mal.

-Te entiendo, yo también.

-Entonces tenemos bastante que hablar Sofía...

No Es SuficienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora