Todo comenzó hace tres meses en el Universidad en donde estudiaba Administración de empresas de artes donde era totalmente nuevo.
-Mierda.-Susurré para mi mismo, mientras que miraba el reloj, ya eran las 8:20 y debía haber llegado a las ocho, descanse un poco en frente de la puerta de mi clase cuando mi respiración se regularizó, toque la puerta, humedeciendo mis labios nervioso, me había cambiado de casa hace una semana, no conocía a nadie aquí y eso lo hacia mas difícil todo como; ubicarse, el acento es muy raro, miro hacia atrás y en la ventana se puede ver mi reflejo, la piel clara, los ojos celestes y el cabello totalmente negro y levemente despeinado, una altura de 1.68, esta bien, soy muy pequeño de altura. Habré la puerta un chico mas alto que yo, con piel bronceada, ojos grises y un hermoso cabello color castaño o rubio, bueno, entre medio, lo miro algo confundido.
-¿La contraseña?-Me pregunta acercándose a mi cara para observar mas detalladamente, sus ojos primero se fijaron en los mios, luego a las facciones como boca y nariz, para al final oler mi cuello, solo estaba tieso, vi a una chica detrás de él, su cabello con rulos le llegaba hasta la cintura totalmente de color castaño, ojos grandes y una amplia sonrisa en sus labios, lo aparto de un fuerte empujón.
-Lo siento, es un idiota, le gusta molestar a los nuevos, soy Martina ¿Y tú? -Sonreí, ¡Al fin! Alguien con quien se puede hablar.
-Soy Alexandru pero no me gusta, me pueden decir Alex.-Él chico que estaba en el suelo por el empujón se levanto, se posicionó al lado de la chica.
-Un gusto Alex, soy Nick. -Mire hacia abajo incomodo, bueno, él me había molestado.
-¡Vez! Nick incómodas a todos, por eso nadie te quiere cerca.
La chica le grita casi escupiendo en la cara, luego me mira a mi, pasando de furiosa a amable.
-Lo siento Alex te vez buena onda, pasa, bueno, sentarte con nosotros.
Sin esperar mi respuesta, me tomo del brazo dirigiéndonos a la parte final del salón, al entrar hay varios grupos reunidos hablando animada-mente, muchos me miraban pero solo pocos sonreían, me incomodaba un poco, al llegar al final Martina me presento al grupo estaba; Esteban, este es pelirrojo yo nunca había visto uno, pero para ser pelirrojo era guapo; Maddie, una chica un poco mas pequeña que yo, hermosos ojos verdes acoplaban perfecto a su cara, labios gruesos pintados de rojo fuerte, cabello largo, lacio, negro con las puntas teñidas azules, simplemente perfecta; Paula; Pequeña y maciza, de la mas graciosa que e visto, tenia una melena rubia, y su piel era casi tan blanca como la mía, tiene un pircing en el labio inferior al lado izquierdo. Me hice amigos de ellos fácilmente, hasta me sorprendió lo fácil que fue encajar en un grupo, todos eran bastante buenos y simpáticos, me contaron que Paula y Esteban igual eran nuevos, nos contaron sobre los grupos estaban; Las divas, que eran; Fernanda, la líder; Josefa, la clon; Celia, La secuas. Estaba el grupo de los nerd; Dante; un niño rata, me contaron que su familia era dinerada y por eso era muy creído con el dinero y si le hablas puede ser muy pesado; Brayan, con este si se podía hablar, era muy callado; Jorge, era el mas inteligente de la clase, estaban los matones, me dijeron que no les debía hablar ni mirar, o si no, bueno... No me iría bien, entre ellos estaban; Chris, el líder, estaba saliendo con Fernanda; Y sus seguidores que eran tres, Jaime, Julio y Germán.
La tarde paso rápido, el profesor de la primera hora había faltado, yo no sabia que los profesores podían faltar a sus clases, hasta que vine aquí, en la segunda hora me senté con Maddie, era una chica bastante simpática, aunque al principio se veía seria, cuando uno la conoce bien, llega a saber que era bien graciosa, con una voz bastante baja, pero linda, llego la hora de irse, me despedí de todos con un beso en la mejilla y un: Nos vemos mañana, me fui a mi casa animado, ayer no tuve tiempo de ver a mi compañero de habitación pero me habían dicho que era de mi misma escuela, sentí que alguien me seguía, mire hacia atrás, nadie, tal vez solo eran imaginaciones mías, esa sensación de que me observaban, mire de nuevo hacia atrás, mis ojos se abrieron un poco, era un chico mas alto que yo, obvio, como todos los hombre, cabello negro, un poco crecido, camino hacia a mi, mi cuerpo tembló un poco, unos ojos miel se posaron en los mios, trague saliva, tal vez él solo quería decirme que tenia la mochila abierta, pasa mas de lo que creen, su piel morena, su perfume se notaba aun a mucha distancia, cuando estaba a una distancia bastante corta, mi corazón latía rápido, mi vientre sentía un pequeño hormigueo, tal vez es por que no estoy acostumbrado a que hablen conmigo de la nada, sonrió.
-Hola, te vi en clase pero no tuve tiempo para presentarme, soy Chris, Chris Collins.- "Ten mucho cuidado con los matones." Las palabras de Martina zumbaban en mi cabeza, pero él estaba siendo amable así que...
-Hola soy Alex.-Le dije con una sonrisa en mi rostro, ocultando mi nerviosidad, aunque no lo hacia bien ya que desviaba mi mirada y movía mis manos nervioso.
-Alex... ¿Alex Lawrence? ¿Él que vive en calle patriota #836?
Dijo serio. Esto es raro, mucho mas raro que cuando Nick me pregunto la contraseña.
-S-si.-Intente no tartamudear, pero de todas formas lo hice.
-¿Sabes quien es tu compañero?-Levanto una ceja. Ahora sólo tenia ganas de salir corriendo.
-Lo pensaba conocer en el piso.-Le dije algo confundido, Volvió a sonreír, mejor dicho a reír, ¿que era tan gracioso?
-Eres muy mono.-Dijo entre risas. Mis mejillas se sintieron calientes, y mi corazón latió mas rápido, sabia que era algo bajo, pero mono, era muy vergonzoso, me puse serio, no era gracioso.
-¿Que tiene mi compañero de cuarto?-Me miro a los ojos yo enseguida desvíe mi mirada, sintiéndome algo incómodo.
-Tiene que soy yo.-
-¿Seremos compañeros?-Lo mire sorprendido, el hizo una sonrisa de lado, y me guiño un ojo, algo me decía que nada bueno iba a salir de esto.