—Kattia, ya levántate — escucho que me llaman y me esfuerzo para abrir los ojos.
Jared está sentado en otro extremo de la cama mirando en mi dirección. Me siento y por primera vez en los varios días que llevo despertando en la misma cama que Jared noto su cabello despeinado y sus ojos cansados.—Te ves mal — le digo y él se ríe.
—Mírate en un espejo Blackwell — me dice burlón y se levanta en dirección al baño, yo me voy al armario para sacar la ropa de hoy y después entro al baño para cepillarme junto a Jared quien lo hace pausadamente mirándose al espejo.
—Nuevo día de tortura — dice Jared en un balbuceo a causa del cepillo y de la crema en su boca.
—No es una tortura para ti, tu no debes aguantar un interrogatorio de tus amigas — digo y pongo el cepillo en mi boca.
Jared escupe — Eso es porque tú no das excusas razonables, mantienes a tus amigas en suspenso acerca de tu vida — dice y me encojo de hombros porque sé que lo que dice es cierto y no voy a discutir. —Báñate y voy a ordenar mis cosas — dice Jared.
Él sale del baño por lo que yo me quedo dando una agradable ducha de agua fría a mi cuerpo para estar relajada al entrar a clases, salgo del baño y Jared entra, tomo mi ropa y rápidamente me cuelgo un jean, una blusa, unas zapatillas, me ordeno un poco el cabello y recojo el desorden de nuestro cuarto en lo que Jared sale vestido del baño. Ridículamente lleva puesto una camisa que combina perfecto con mi blusa, pero me da mucha, demasiada flojera cambiarme, salimos del cuarto y nos vamos en busca del desayuno.
La madre de Jared ya tuvo que salir s cuidar a mamá porque en lo que nosotros bajamos aparece el padre de Jared quien entra sonriente. —Buenos días, chicos — nos saluda.
—Hola papá
—Hola Enzo — saludamos a la vez y nos alimentamos sin cruzar mucha palabra entre nosotros, volvemos al cuarto para cepillarnos de nuevo y cada uno poder salir.
—Oye ¿Eres consciente que nos queda un año haciendo está locura? — le digo a Jared justo antes de que él sacase su auto.
—Aún no es definitivo si solo será un año pero si, lo he estado contemplando y soy consciente de que es mucho lo que nos espera a los dos — dice y me sonríe para después abrir la puerta — No te olvides de guardar bien ese anillo — me recuerda y cierra la puerta, enciende su auto y sale del lugar, entro en el mío y le sigo fuera de la casa pero después me desvío para tomar la vía larga hasta el instituto.
Una vez llego miro mi mano y me deshago del anillo guardándolo en una caja y en la guantera, me bajo del auto, siento que alguien me levanta del suelo y me abraza muy fuerte, no le reconozco muy bien hasta que noto que es Bruce quien se aferra a mi cintura.
—¿Qué te pasa Bruce? — le cuestiono y él me baja, pero aún me abraza.
—No vuelvas a hacer eso mujer, llegué a creer que te habías suicidado, no lo hagas nunca más — dice rápidamente apachurrándome.
—¿Hacer qué? ¿Por qué me suicidaría?
—Pues desaparecerte así, toda una semana sin rastro, tus cosas desaparecieron de tu apartamento — dice y yo ruedo los ojos.
—¿Entras te de nuevo a mi apartamento? — le reprocho.
—Claro que sí, estaba muy preocupado — dice
—¡Bruce, te pedí que no lo hicieras más! — le recrimino y él me mira en forma de disculpa.
—Entonces no dejes la llave en el mismo lugar — dice y suelto un gruñido molesta. — Me cuentas luego porque viene Patty y por favor averigua pronto lo que sucedió porque ya no voy a soportar más — dice me da un beso en la frente y se va corriendo.
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Give Me Faith © | Novela Cristiana
Teen FictionYo quería una historia feliz., una jodida historia feliz. Él no estaba de acuerdo con ello. Quería a mi mamá con vida, no un novio. Quería ser exitosa en lo que decidiera estudiar, soy inteligente, bonita, adinerada. Tenía todo lo que quería. Pero...