Loser's (KookMin) Adaptación propia

Capítulo 1~Porque puedo

Miércolese 18:32h

Mi sudor cae persistente contra el suelo antideslizante, mis nudillos están blancos de la presión que ejercen mis manos por la rabia y mi respiración se contradice de maneras aleatorias. La camiseta de tirantes está completamente pegada a mi cuerpo impidiendo en cierto modo mi movilidad, pero no es suficiente para frenar que descargue mi rabia contra el saco de boxeo.

No puedo creer que ese lamentable fallo me haya llevado a bajar un escalón tan grande. Tan solo he hecho lo que creía correcto. Si escuchas un grito dentro de una casa donde has acudido por posible violencia doméstica debes actuar. Pero mi jefe no piensa lo mismo, ahora ya no tengo derecho a salir de la oficina con lo que me había costado que me pusieran a patrullar las calles y ahora me van a encerrar en cualquier división menos importante. Espero que al menos no sea en la de tráfico, creo que no hay peor división y más aburrida que esa.

La fuerza y los golpes van en aumento hacia el saco que rebota y cuelga desenfrenado hacia un lado y otro. El ruido que ofrece el choque de mis puños vendados al cuero de este es cada vez más rudo y seco. Mi pelo no deja de rebotar sobre mi frente empapado por el sudor, finalmente como es de esperar, mi muñeca derecha cruje y me provoca un rampazo molesto y ascendente por todo mi brazo.

-Así solo vas a conseguir destrozarte los brazos y las manos. -Un resoplido de una sonrisa contenida resuena entre nosotros mientras él aparece tras la figura del saco. Pequeño en altura y físico, podría destrozar a cualquiera en una pelea.

-Solo quería descargarme. -Zarandeo mi mano adolorida en el aire mostrando una ligera mueca de dolor.

- ¿Por qué? ¿Ha pasado algo duro en el trabajo? -YunHo parece interesado, sé que lo está. Pero mis ganas de hablar del tema son tremendamente nulas por lo que qué Suga haya decidido llamarme en este preciso momento resulta la excusa perfecta.

Mi mano le pide disculpas al pequeño rubio ceniza que esperaba una respuesta a mi derecha y me dirijo al banco de madera sin respaldo más cercano para responder la llamada de mi amigo.

- ¿Qué pasa Suga? ¿Has llegado ya a Seúl? ¿Qué tal el vuelo? -Ni pretendo saludarlo, tan solo pregunto directamente.

-Sí, ha ido bien. Tae como siempre ha entrado en pánico a la hora de despegar y de aterrizar, pero es un placer volver a sentir el aire de Corea. -Una breve pausa en la que vuelvo a hacer girar mi muñeca sobre sí misma en círculos. -Acabamos de ducharnos y vamos a ir ya hacia lo de J-Hope. ¿A ti qué te queda?

Miro a mi alrededor sorprendido y decepcionado a la misma vez conmigo mismo, he olvidado por completo la inauguración del bar de juegos de J-Hope. El pobre lleva meses, prácticamente un año, trabajando en ello. Por fin ha cumplido su sueño y está más que contento con el resultado. Miro la hora en mi móvil antes de volver a colocarlo en mi oreja.

-Voy a llegar tarde, me he entretenido en el gimnasio. -Retiro con mi antebrazo parte del sudor de mi frente.

-Ahí dentro uno no es consciente de las horas, te entiendo. -Mi mano ahora busca echar mi pelo hacia atrás, una fuerte punzada golpea en mi muñeca. -Te he echado de menos Kook.

-Yo también. -Le aseguro siendo consciente de los seis meses que hemos estado separados. Al principio uno de los dos hacia viajes en avión para visitarnos, pero con el paso de los años los meses se fueron alargando y las visitas eran más cortas y escasas. Él sigue con su trabajo en la empresa familiar de su padre, por fin se ha sacado abogacía, y el ejército y empezar en comisaria fueron un caos para mí. -Nos vemos en un rato, me daré prisa.