Loser's (KookMin) Adaptación propia

Capítulo 24~Como si Seonhwa me juzgara

Martes 11:04h

Tras dos largos interrogatorios en las salas contiguas; las conclusiones han sido terriblemente decepcionantes y ambiguas. Mi actitud ha caído de golpe y siento como mi cuerpo es arrastrado con pesadez por el suelo de comisaría con el automático puesto.

Entro en completo silencio a la tercera sala, donde he interrogado hace más de una hora a Daisy inútilmente, para dejarme caer con la penumbra que me acompaña en la silla que hay frente a Sorn y su abogado. Ambos me miran mientras dejo mi tercer café del día sobre la mesa que nos divide.

-Daisy y Nancy dicen que no van a ayudar. -Hablo disperso y con una postura que refleja el cansancio de una noche sin dormir por los nervios, el miedo y la incertidumbre. -Y Nayun dice que no sabe nada más. -Levanto mi vista del juego a darle vueltas al vaso de café sobre la mesa en círculos y la observo con los ojos rojos e hinchados por haber estado llorando; eso podría ser bueno, se encuentra débil y desprotegida. -¿Y tú, Sorn? -Ella mira automáticamente a su abogado quien con una cara inexpresiva le asiente tan solo una vez rudamente.

-Nayun nunca ha hablado con él. -Su voz fina y en tono bajo me obliga a forzarme a inclinarme ligeramente hacia ella. -Yo fui quién se lo encontró por casualidad, a quién le sugirió la idea, le ofreció dinero y le dijo el nombre de la página para que la creara. -Aparto el vaso de café de mi espacio y estiro mis ambas manos unidas por sus palmas como si suplicaran más información hacia ella.

-¿Y cómo contactó con las demás? -Ella mira mis manos mientras responde bajo la atenta mirada de su abogado.

-A Daisy y Nancy ya las conoce, creo. -Frunce su ceño haciendo que sus cejas se junten en el inicio de su nariz. -Había confianza entre ellos, creo que son todos de la misma edad.

-¿Quién es, Sorn? -Cuestiono percibiendo de nuevo la exaltación nacer en la boca de mi estómago. -Te protegeremos si es necesario. -Trato de ofrecerle una mano pues se ha quedado en completo silencio mientras ha comenzado a llorar. -¿Quién quiere que sigáis a Jimin? -Vuelvo a preguntar más rudo y molesto, su silencio me está hiriendo de una manera que solo se siente cuando dañan a alguien que realmente te importa.

-No sé su nombre. -Responde entre sollozos bajos. -Nunca me lo ha dicho.

-¡Joder! -El grito con malicia nace de esa exaltación con furia y se manifiesta con un golpe seco en la mesa haciendo temblar el café y sobresaltando a Sorn y su abogado. Me pongo en pie y mis ambas manos buscan relajar la pesadez de mi cabeza apretando mis mejillas y barbilla con rabia. Sus llantos aumentan produciendo más dolor de cabeza y alimentando mi frustración.

-Él solo me dijo que era IKON. -Susurra de vuelta llenando el silencio e interrumpiendo su lloriqueo.

-¿Qué? -Mis manos caen de golpe a ambos lados de mi cuerpo mientras siento como cada uno de los pequeños músculos de mi rostro se encogen y se retuercen. -¿Cómo era? -Mis pies van directos para colocarme a su lado con la postura superior que represento.

-Rubio con algo de melena y alto, tal vez como tú. -Me mira con miedo, con respeto y con esperanza; una mezcla insólita e incoherente en cualquier otra circunstancia. -Tiene un tatuaje enorme de un lobo aquí. -Su mano izquierda abraza y recorre, señalando así, todo su brazo derecho.

-Perfecto, gracias. -Inevitablemente la sonrisa enmarca mi rostro. Pienso que ya sé por donde puedo seguir, que pistas debo rodear e investigar, pero también me enferma de manera ponzoña e incoherente que tras todos estos años aún haya algún IKON que pretenda vengarse de Jimin por una estúpida pelea que tuvimos cuando teníamos apenas diecisiete años.

Martes 16:05h

Tras comer un bocadillo que JooE me ha preparado con todo su amor, sentado frente a mi ordenador, evitando conversaciones con NamJoon y buscando el expediente del caso que se presentó de denuncia contra Jimin por aquella pelea en la que tan solo entró para salvarme; he vuelto a la sala de interrogatorios con otro café en la mano.