Epílogo~Responso

327 37 20
                                    

Necesito llenar ese hueco, el hueco vacío que han dejado sus dedos entre los míos. Entrelazo mis manos entre sí, pero obviamente no se siente igual, ni una milésima parte de ello. Miro mi arrugada piel magullada con manchas por el paso de los años dejarse caer entre mis piernas ligeramente abiertas.

Noto la presencia de alguien sentarse en la silla de mi derecha y automáticamente por su aroma a vainilla sé que es él. Sus suaves y delicadas manos pequeñas separan la unión de las mías propias y entrelaza su mano izquierda con la mía.

No se siente igual, aún así es lo más cercano que volveré a estar de él.

Me aventuro a observar su rostro; nariz enrojecida por el constante moqueo, ojos rojos e hinchados por las infinitas lágrimas que se deniegan a avandonar su recorrido por sus mejillas húmedas y una sonrisa ladeada por el dolor a pesar de la sinceridad que procesa.

A mi izquierda se coloca una gran sombra femenina y da caricias en círculos a la altura de mis omoplatos en señal de consuelo. La miro ahora a ella; con esa gran altura, ese cuerpo delgado y esa cabellera negra azabache mirándome con una gran expresión seria pero tratando de consolarme.

-Vamos papá. El responso debe comenzar. -Me habla desde la profundidad de su voz rota por los llantos incontrolables que su marido me ha confesado tener durante toda la noche.

Mi pequeña siempre fue valiente y audaz a la par de dura, pero sigue rompiéndose como una niña pequeña cuando se encuentra rodeada de las personas que ama y le aman. Me pongo en pie todavía unido a mi niño de la mano y me acompañan ambos hacia el pequeño atril del tanatorio subiendo unos leves tres escalones.

Domin, quien lleva ese nombre en honor al padre biológico de YoonGi, besa mi mejilla y se marcha siendo arropado por los brazos de su hermana mayor hacia los mismos asientos en primera fila que yo acabo de abandonar.

Mi cuerpo está dormido y algo dentro de mí está reaccionando por inercia, como un hecho estrictamente pulcro y a su vez metódico. Saco del bolsillo interior de mi traje viejo y desgastado varías folios doblados entre sí, los coloco sobre el atril antes de levantar mi vista y hacer contacto visual con los presentes.

La familia que un día fue tan grande y unida se desmorona con el pesar de los años. Inspiro profundamente y bajo mi vista para comenzar a leer las palabras escritas la noche anterior a las cuatro de la madrugada con un viejo bolígrafo que encontré en su escritorio.

-Buenas noches; mi nombre es Kook o como me llamaba mi marido para reírse de mí o reñirme Jeon JungKook. -Los compañeros de trabajo del pasado hospitalario como enfermero de Jimin me sonríen desde su pequeño círculo. Jamás llegaron a conocerme en persona ni yo a ellos, mas sabemos bastante unos de otros por la energía ardiente de mi marido. -Para los que no me conocen más que por el hecho de ser el amor de Jimin me presento diciendo que soy un policía retirado por jubilación. -NamJoon desde su posición asiente orgulloso llevando consigo el típico traje de gala de policía. -Durante mi carrera policial he desocupado varios puestos; cuando apenas me decidí, en los entrenamientos y estudiando para opositar, entrar a la academia tenía claro que quería patrullar. -Un fuerte sonido de resonar su nariz en un pañuelo más que desgastado por parte de TaeHyung me interrumpe, pero de un modo leve dándome unos segundos para volver a tomar aire. -Conducir vigilando nuestra bella ciudad y acudir rápidamente a llamadas de emergencia. Pero al poco tiempo de estar en la comisaría del Este cometí un error que ni los novatos se plantean, y tan solo fue por mi afán de proteger al prójimo. -Mi nuera, una joven policía, me sonríe con complicidad. Desde el primer día en que la conocí conectamos al compartir ese amor por la protección ciudadana. Ambos hijos heterosexuales adoptados y criados por padres homosexuales; se callaron muchas bocas con el paso de los años.

Loser's (KookMin) Adaptación propiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora