Aún Después De Tantos Años... [KookGi]

Capítulo II

Letra cursiva es pasado.

La mansión era bastante bonita, sus dedos temblaron mientras le seguía el paso a un alfa castaño, se llamaba Kim SeokJin y al parecer era su guardia, al menos así se había presentado.

Notó en el camino algunas miradas desdeñosas de los empleados, dos jóvenes omegas le miraron con repudio y fue inevitable no temblar ante ello.

La habitación principal quedó en segundo plano cuándo lo guiaron a la siguiente puerta, dejando atrás el aroma a café tostado de su esposo.

Una vez la puerta fue abierta pasó y cerró detrás de él, la habitación era sencilla, al parecer habían quitado algunos muebles, sólo tenía una pequeña cama, un ropero algo viejo, y una mesita, notaba las sombras de los muebles anteriores y sin embargo, intento animarse porqué bien sabía que ésa decoración no pertenecía a la mansión Jeon.

— Señor YoonGi —salió de su ensoñación y miró a los ojos almendras qué pedían atención.

» — Me parece qué debieron equivocarse, es imposible qué tan sólo tenga una maleta —y le sonrió con dulzura antes de menear con la cabeza ante su preocupación.

— No, es todo lo qué tengo pero es mío —le comentó con orgullo, bien sabía lo qué había empacado, tan sólo tres mudas de ropa, un cepillo de cabello, dos pares de calcetines al igual que de ropa interior, un suéter y su tesoro más preciado, fotos de sus abuelos y de los señores Jeon... Sus personas más queridas.

— Pero señor YoonGi, es sólo, es el esposo del señor Jeon, debería de tener más cosas y francamente aún no entiendo porqué debe dormir en ésta habitación... —le dedicó una mirada al alfa antes de caminar hasta esté y sujetar su mano, haciéndole caminar hasta el enorme ventanal de la habitación.

Había reconocido los aromas mezclados, café tostado y avena, JungKook y JiMin, ambos estaban en el enorme jardín con algunos amigos de ellos, alfas, omegas y betas de la alta sociedad.

El alfa SeokJin dió un jadeo y entonces se rió suavemente, ocultando el dolor de su lobo.

— JiMin-ah es... en realidad la pareja de JungKook, yo sólo... soy nadie —y lo había sabido toda su vida, el Kim le miró con bastante confusión pero pronto lo entendería.

Porqué aún siendo Jeon YoonGi, no era nadie en la vida de Jeon JungKook.

...

Su primera noche y su corazón dolía tantísimo, miró las prendas en la cama y se decidió por un pantalón de chandal además de una camiseta sencilla, esperaba no verse tan mal.

Sus ojos pesaban de tanto llorar, pero no podía quejarse, era su destino y sin embargo, su mente aún escuchaba los gemidos de su hermano, las palabras susurradas y gritadas, llenas de amor.

Unos pequeños golpes le sacaron de su ensoñación, instantes después la puerta sé abría y miró a SeokJin quién parecía temeroso, probablemente todo mundo sabía los sucesos de la noche anterior.

Le dedicó una sonrisa y entonces se acercó donde esté en espera de qué dijera algo, qué pasará por alto sus ojos hinchados y ojerosos.