Aún Después De Tantos Años... [KookGi]

Capítulo IV

Letra cursiva es pasado.

Las risas en el jardín resonaban por la estancia, las cocineras iban de un lado a otro horneando y sirviendo y entonces detuvo a su Nana quién curiosa le miró.

— ¿Por qué yo no puedo estar con ellos? Es el cumpleaños de JiMin hyung —le dijo con una pequeña vocecita y después de todo tan sólo tenía seis años, los ojos de la beta le sonrieron antes de acomodarse a su altura.

— Porqué son niños grandes, ven, voy a darte más pastel y galletas —y aquello lo hizo sonreír tan grande mientras le subían a una de las sillas en la mesa del comedor.

Y mientras comía pastel miró por la ventana, sus padres jugaban con JiMin, y su hermano abría y abría regalos, siendo rodeado por sus amigos y sus familiares y entonces se preguntó... ¿por qué nunca había tenido algo así?.

Había mirado en la TV qué así se celebraban los cumpleaños pero él nunca había tenido algo así, nunca nadie los recordaba y entonces sólo pudo comenzar a llorar.

A la edad de tan sólo seis años comprendía... Qué todo mundo siempre elegiría a JiMin.

...

Sus pequeños ojos miraron a la multitud, su hermano cumplía quince años y al parecer era motivo de una gran celebración, al menos eso había dicho su madre durante las últimas semanas.

Nuevamente y como pronto comprendió, él no era invitado así que estaba escondido detrás de una columna, el ruido de los comensales haciendo eco en sus oídos.

— Eres el hermano de JiMin, ¿no? —y temblorosamente dió la media vuelta para encontrarse con unos ojos azules que le miraban con curiosidad y una pequeña pizca de... Cariño.

Su madre le había prohibido decir qué era de la familia y no entendía porqué, sin embargo, asintió con timidez, a cambio se ganó una risa tan cálida qué incendio sus mejillas.

— Soy JungKook, es un gusto conocerte, ¿por qué no... —y cualquier palabra que fuera a decirle murió en sus labios cuándo su hermano hizo acto de presencia en la fiesta.

Los ojos azules se encendieron por completo y notó la mirada que su padre le dedicaba a su madre, amor, puramente amor.

Su corazón dió un pequeño quejido que le asustó y de repente tenía unas inmensas ganas de llorar pero tan sólo le tocó ver cómo el alfa se alejó para ir dónde su hermano.

Se sentía cómo sí estuviera mirando algo privado, las manos del castaño sostuvieron a JiMin mientras dejaba besos en sus labios y de pronto sintió humedad en sus mejillas.

Se sentía inmensamente triste de repente y entonces se preguntó, ¿qué era ésa sensación de soledad?.

...

— Lamentó no haberte traído un regalo pero ya sabes qué... —le dedicó una mirada a la señora Sandara quién cálidamente dejaba un beso en su mejilla.

Había cumplido quince años y no había tenido una fiesta cómo su hermano, nadie le había felicitado excepto sus amigas de la cocina, su Nana y los señores Jeon.

La única ocasión en qué le hubieran dado un regalo, sus padres habían pensando qué se lo había robado a JiMin así qué no volvió a recibir nada de los señores Jeon o de sus abuelos.