Hey! You... (NaruSasu)

Castigo

Era lunes por la mañana, Naruto había llegado temprano a la Facultad. Iba caminado hacia la cafetería cuando vio a cierto doncel dirigirse a su salón.

Como por impulso empezó a seguirle hasta que dio vuelta al final del pasillo, Naruto se apresuró en alcanzarlo en silencio.

Cuando llegó a su salón a simple vista no había nadie, por lo que se extraño, de pronto alguien lo empujo adentro del lugar y volteo de inmediato

Sasuke: así que eras tú quien me seguia- dijo mientras cerraba la puerta a sus espaldas

Naruto: eh?... no, no para nada- se puso nervioso

Sasuke: oh, entonces debió ser mi imaginación - lentamente se acercó al rubio poniéndolo aún más nervioso.

Naruto: Sasuke?... eh bueno, creo que mejor me voy - intento salir, pero ¡no pudo¡ ¿por qué? Estaba cerrado por fuera

Sasuke: acaso te pongo nervioso?- dijo mientras se acercaba nuevamente al rubio

Naruto:...- se quedó callado al escuchar aquellas palabras, pero cuando se dispuso al voltear el azabache lo atrapó en un beso.

El rubio no podía creerlo, ¿acaso Sasuke lo estaba besando? ¿acaso era un sueño? Pensó.

Sasuke: ¿qué sucede Naruto, no te gusta?- dijo mientras paseaba sus manos en el abdomen bien formado del rubio deteniendo en el cinturón.

Naruto:....- sintió un como su cuerpo reaccionaba ante tales caricias- no es bueno que estemos aquí, alguien nos podría ver- trago con dificultad.

Sasuke: aún es temprano- se acercó al cuello del rubio depositando besos.

Naruto: pe...pero alguien pu...puede llegar- menciono soltando uno que otro suspiro para poder tranquilizarse.

Sasuke: no pensaste en eso ayer- empezó a besar al rubio, quien al sentir nuevamente ese labios suaves no soporto más y se dejó llevar.

Lo levantó hacia la mesa que ocupaba el docente, lo sentó y se metió entre las piernas del azabache mientras lo besaba fogozamente, metio su legua en la boquita del azabache y empezo a explorar toooda esa cavidad. El doncel rodeo la cintura del rubio con sus piernas acercandolo más.

Sasuke metió sus manos por debajo de la camisa del rubio paseándose por su espalda amplia, haciendo que el rubio se excitara aún más. Sin pensarlo dos veces subió a la amplia mesa al doncel separándose del beso.

El doncel soltó uno por uno los botones de su camisa dejando al descubierto su torso blanco, se sonrojo aún más por la mirada pervertida del rubio, el cual empezó a besarlo apasionadamente mientras acariciaba sus pezones haciendo que el azabache gimiera entre el beso.

El rubio empezó a besar el cuello del azabache, bajando hacia su pecho donde lamio y succiono el pezón derecho del azabache, mientras con una mano acariciaba el otro y con la otra mano acariciaba y apretaba el trasero del doncel haciendolo gemir de placer.

Luego de mimar los pezones del doncel y dejarlos duros, siguió su camino de besos hacia el abdomen del azabache topandose con un cinturón negro. Naruto levantó la mirada hacia el rostro del azabache quien estaba con sonrojado, lo miraba con deseo con los labios entre abiertos.

Sasuke: adelante- dijo dando permiso al rubio

Naruto: eres jodidamente sexy- terminó de decir para quitar el pantalón del doncel dejándolo solo con el bóxer negro mientras desabrochaba su cinturon abría su cremallera sacando su miembro bien duro por las caricias y besos del doncel.

Sasuke: hazlo de una vez- dijo con una voz excitara

Naruto: tranquilo que aún tenemos tiempo- dijo con una sonrisa pervertida mientras se disponía a quitar la última prenda del doncel

Sasuke: Naruto- dijo serio, el rubio levantó la mirada extrañado- ¡Naruto!- levantó la voz el doncel dejando confundido al rubio

Naruto: ¿qué sucede?- pregunto confundido

Sasuke: ¡¡NARUTO!!- grito

Con susto se despertó abriendo los ojos de golpe sintiendo un dolor en su entrepierna.

Kushina: hasta que por fin despiertas, mira la hora que es - llamo la atención del rubio quien al escuchar la voz de su madre empezó a sentir un dolor insoportable en la cabeza.

Naruto: buenos días mamá- dijo cerrando fuerte los ojos como si con eso lograría calmar el dolor de cabeza.

Kushina: jajaja dirás buenas tardes, hijo. Tu padre y yo te esperamos en el comedor para almorzar- le dijo y se fue de la habitación dejando sorprendido al rubio quien al ver su reloj eran las 12:17 pm luego vio una pastilla y un vaso con agua sobre su mesita de noche.

Naruto: esta bien mamá y gracias- dijo tomándose la pastilla

El rubio se levantó, se metió a la ducha y con agua fría empezó a encargarse de su problemilla que además de su cabeza, también le dolía. De pronto recordó el sueño que tuvo con el azabache, ¿por qué había tenido ese sueño?, y cómo rayos llegó al apartamento. Lo último que recordaba por el momento era que estaba encima de una mesa cantando.

¿qué fue lo sé sucedió después? Se preguntaba mientras terminaba de salir de la ducha con una toalla enrollada en la cintura y otra en su cabeza, se secó, quito el exceso de agua en su cuerpo y de vistió.

Tomo su celular y vio que estaba apagado, conectó su cargador y lo dejó cargando.

Fue al comedor, tomo aire y entro al lugar.

Naruto: buenas tardes papá- se sentó al lado de su padre tímidamente.

Minato: buenas tardes, hijo. Recuerdas a qué hora llegaste ayer- dijo mientras comía.

Naruto:...- intentaba hacer memoria pero no recordaba nada- n-no papá- respondió cabizbajo.

Kushina: Shino, Gaara y un doncel pelinegro te trajeron- le dijo al rubio menor mientras le dejaba un plato de comida, quien intentaba recordar aún y se preguntaba quién era el pelinegro, pero le resto importancia.

Naruto: yo... no lo recuerdo, lo siento- se disculpó en voz baja sin tocar aún su plato de comida.

Minato: sabes lo sorprendido y decepcionado que estamos?- confesó con voz firme- no sé cuál haya sido la razón por la que llegaste en ese estado a casa, nos preocupaste... creí conocer a mi hijo- dijo sin mirarlo

Naruto:....- no sabía que decir, después de todo sus padres siempre le habían dado libertad de hacer lo que quiera pero estaba seguro que eso cambiaría, ó eso pensaba- yo... no puedo excusarme de lo que pasó ayer, tampoco recuerdo mucho... sólo puedo pedirles disculpas y aceptaré el castigo que me den sin oposicion alguna- dijo arrepentido.

Minato: tu castigo será dejar el Conservatorio y regresar a Inglaterra a continuar sólo con tu carrera de Contaduria, y estar bajo la supervisión de tu tío Nagato- dijo secó sin vacilaciones haciendo que el rubio levantara la mirada sorprendido y frustrado...