Fuck Off.

13.

- Terminamos por hoy.

Jin entro en la habitación diciendo eso, en silencio se quitó el saco y la camiseta dejando ver perfectamente sus tatuajes, me preguntaba de que se trataban.
-Dime que quieres, Se que desde que me viste necesitas algo, será mejor que lo sueltes.

-Incluyeme!.-Saque el mismo arma la que le robe de un maletín en la habitación y le apunté otra vez

- No te cansas de apuntarle a la gente en la cabeza?, Apuesto a que no sabes usarla,no juegues que te puedes lastimar.

Quite el seguro y dispare rápidamente a una lámpara, volví a apuntarle pero el no se veía sorprendido.

- Incluyeme. Esta vez lo dije desafiandolo.

- Primero tranquilizate, jamás dije que no te incluiría, pero debes entender una cosa.- dijo dando pasos lentos acercándose a mi, me quito el arma y la arrojó al piso.- jamás vuelvas a apuntarme porque de no ser que me pareces algo útil, sin importar que fueras chica ya estarías muerta.
Este es otro mundo, si tienes lo necesario entras, pero recuerda que cuando lo haces no puedes salir. Aquí no interesan tus miedos ni estúpidas incomodidades, así que debes estar completamente segura, porque lo que vas a encontrarte no es bonito.

- Siempre he seguido las reglas, siempre e Sido buena y estoy harta de eso,además del perfil que ahora conoces de mi, yo te puedo servir incluso para mas.- dije colocando mis manos en su pecho.- tengo una muy buena reputación, puedes usar eso como una ventaja.

- cierto.- me acariciaba el rostro.
- Mis razones son vengativas, necesito que encuentres a unas personas, algunos creo que trabajan ya para ti. Muéstrame los mayores problemas con alto rango de peligro y yo decidiré a quien enviar.

- Humm eres vengativa, es por eso jaja, Bien lo haré. Aunque la verdad tus intenciones no me interesan en lo absoluto, pero si diriges tendrás que venir a mi por aprobación, no dejaré que una novata haga el trabajo y arruine esto. Ahora, como todo tiene un precio deberás pensar bien en mi pago.

- Lo que quieras en tanto cumplas.
- .... De acuerdo.

Comenzó a besarme, ese momento empezó a ser un negocio quizás creí que era lo mejor para llegar a los que me dañaron pero dentro de mi dudaba mucho hacerle algo a Alex.
Cuando Jin me tomó, lo hizo de tal manera en la que empecé a creer que quizás no estaba haciendo lo correcto pero para ser honesta en ese momento solo me invadió la furia y quería ver a todos esos idiotas caer.
Aunque no sentí nada, el me parecía ligeramente atractivo y quise olvidarme de todos esos horribles momentos en los que alguna vez me sentí forzada a que hiciera lo que ahora estaba haciendo y solo me deje llevar, aunque ni siquiera supiera lo que estaba haciendo con exactitud.

Al  día siguiente me levanté con algo de ánimo, con ese sentimiento de que todo iba a ser diferente.
Jin no dijo nada, solo tomo su teléfono y empezó a revisarlo. Recogí la ropa y me vestí, me senté en la cama, junto a el y por el resto del tiempo observé cada uno de sus movimientos.

*********
Durante una semana no supe nada de Jin.
Esa vez dijo que me iría a buscar cuando ya fuese oportuna mi entrada al submundo oficialmente, pero yo ya estaba algo asustada de que el no fuera por mi, mis amigos no habían asistido a clases, supongo porque fueron llamados por el. Antes de irme le di una lista de los nombres que yo  necesitaba, entre ellos estaban: Ryan, Kendell, Jonnhy, Isaac, Alex y uno que otro tipo que se burló de mí.

Al finalizar las clases y llegar a casa me cambié, e iba a salir en busca de comida cuando recibí una llamada de un número desconocido, al contestar fijé que era Jin quien dijo que ya iba un auto por mi y así fue, en unos cuantos minutos un auto negro mate llego, me hicieron entrar. Note ventanas blindadas, los típicos guardaespaldas gigantes en traje, uno de ellos me entrego una maleta bastante pesada.