Un Show Sobrenatural

17. Trato A Puerta Cerrada

Castiel sabía, de forma algo inconciente, que había echo una de las mejores acciones humanas que había. Y eso sólo era... Estar con Dean, sólo estar. Hablar, bromear un poco, robarse unos cuantos besos, quitarse las camisas y tumbarse en la cama del rubio junto a la ventana.

Castiel quería... ¿Qué quería?

Lo único que Castiel deseaba ahora que Dean y el eran felices, era poderlo ser con más libertad. Poder salir de esa horrible casa rara donde sus vidas pasaban de ser algo serio a un musical de Broadway, en palabras de Bobby Singer.

—Dean— Le llamo Cass—. ¿Tú crees qué...

—¿Que?

—¿Qué no logremos salir de aquí?

—¿Por qué lo preguntas?

Cass se encogió de hombros.

—¿Una idea?

—¿Por qué diablos no dejan de hablar con puro tono de cuestionamiento? ¡Parecen las preguntas de un examen!—. Les grito Gabe

—¿Por qué diablos no te vas de aquí?—. Le ladro Dean, molesto

—¡Están en mitad de sala! ¡Todos podemos estar aquí si queremos!—. Le espetó Lucifer

—¡No le hables así a Dean, Lucifer!—. Le chillo Cass

—This fucking house is a nightmare—. Gritó Michael

—¿Por qué tenemos que vivir peleando?—. Cuestionó Jo

—Eso no es cierto—. Negaron todos los presentes.

En las escaleras, Bobby y Crowley bajaron rodando, golpeandose por un libro.

—¡Robert, suelta el libro!

—¡Dame el estúpido libro, es mío, maldito Idjit!

La pelea desapareció por la cocina. Jo levantó una ceja, interrogante.

—¿Seguros?

La pelea volvió, pero esta vez fue Bobby lanzando el libro por una ventana.

Michael chillo, se agachó casi al mismo tiempo que la ventana se partía.

—¡Animales!

John y Mary bajaron las escaleras, asombrados por el escándalo.

—¡Sois peores que niños!— Los reprendió la mujer—. ¡Uno ya no puede bañarse sin amenaza de que le destrocen la casa entera!

—En nuestra defensa— Interrumpió Balthazar—. Fueron Robert y el demonio

—This fucking house is a nightmare—. Siguió Charlie.

Crowley se tiro en plancha por la ventana rota, haciendo que Michael tuviera que agacharse de nuevo. Minutos después, Crowley apareció con el libro en manos.

—¡Eureka!— Grito con emoción—. ¡Esto es mejor que el estúpido Santo Grial!

—¿Qué es?—. Se interesó Sam

—Un...

—¡No, Crowley!

—¡Es el álbum de fotos de bebito de Bobby!

Bobby enrojecio hasta las orejas, pero los ángeles no entendían bien que era eso.

—¿Para que?—. Le preguntó Cass, descolocado

—¿Cómo que para que, Plumas?

—Si— Lo apoyo Balthazar—. ¿Para qué tener todas esas fotos vergonzosas por el resto de tu vida?

—Si, ¿cuál es el objetivo en esto?—. Pregunto Lucifer

—Ash— Crowley rodó los ojos—. Lentos, esto es una mina de oro para el chantaje. Robert, negociemos a... Puerta cerrada.

Crowley se llevo a Bobby a rastras.

—Hijo de puta—. Murmuró Dean, sorprendido o sólo algo descolocado

—¿Qué es Puerta cerrada?—. Le preguntó Cass, girandose hacia el.

Pensó en mentirle, pero... ¡Bah! Al fin y al cabo ya habían follado, no pasaba nada si le decía lo que eran los negocios a Puerta Cerrada.

—Veras, Cass. Los negocios a Puerta cerrada son...

Lucifer se adelantó, lanzando una profunda mirada de Cállate Idiota a Dean.

—Cass, hermanito, no tienes edad para saber que es un negocio a puerta cerrada

—¿Por qué no? Vamos Dean, dime ya.

El rubio se pasó la mano por el cuello mientras veía a todos los presentes en la sala observarlo atentos, Lucifer le lanzaba una mirada de "Muerete zorra"

—Es como follar pero con un propósito

—¿Cómo lo que hicimos en la ducha?

Charlie y Lucifer que habían estado bebiendo escupieron sus cervezas cuando escucharon esas palabras por parte del ángel.

—¡Winchester no perdió el tiempo eh!— Gritó Balthazar—. Te follaste a Castiel

—Nuestro hermanito—. Prosiguió Michael

—El más chico de la camada—. Dijo Lucifer

—Tal vez Winchester merece un castigo—. Aporto Gabriel

—Pero si tú fuiste quien nos dio la idea Gabe—. Dijo Cass con total inocencia en su rostro

—Mierda—. Murmuró Gabriel cuando sus hermanos lo observaron con ligera tirria en la mirada

—Esto es un drama peor que Maria Isabel—. Susurró Sam.

Justo cuando iban todos a empezar a gritarse como locos un celular sonó.

Desde que estaban ahí las cosas como teléfonos celulares no recibían señal y si intentaban comunicarse al exterior para pedir ayuda no había posibilidad alguna, con excepción de la vez que pidieron pizza.

—¿Es un teléfono?

—¡Alguien llama!

—¡¿De quien es?! ¡Busquenlo ya!

Fue entonces cuando Jo logro encontrar el celular y fue quien contestó.

—¿Hola?

—¿Si? ¿Hola? ¿Están ahí los hermanos Winchester?

—Si si si, deje lo comunico.

Jo comenzó a hacer espavimentos raros para callar a todo mundo y poner la llamada en alta voz.

—Hola muchachos, ¿Se están divirtiendo?

—¿Chuck?— Preguntó Sam—. Humm, ¿Chuck guión Dios?

—Si Sam, Dios. ¿Mi hijo ha comido bien?

—¿Cuál de todos?

—Uh, todos

—Creo que eso no importa ahora, pero si, han comido bien— Dijo Dean—. Ahora, explicanos que pasa

—Si, es una larga historia. ¿Están acomodados? Van a amarla, o a querer asesinarme, que se yo.

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Años pérdida con esta historia pero tengo un motivo, y es que no recordaba la contraseña JAJAJAJAJA perdón en serio gente. Ya la voy a acabar, está vez va en serio.

Besos!!