#ㅤ𝐏𝐑𝐎𝐁𝐋𝐄𝐌𝐀 𝐃𝐄 𝐀𝐃𝐎𝐋𝐄𝐒𝐂𝐄𝐍𝐓𝐄𝐒 | K!AU。

Capitulo 2.

Alexby.

Los pasos cada vez se hacían más cercanos, los podía escuchar perfectamente a través de aquella puerta que lo separaba del hombre que venía persiguiéndole desde hacía rato. Había logrado huir, pero sabía que no iría muy lejos si no encontraba ayuda pronto.

Notó los empujones contra la puerta, tratando de que se abriesen. Con todas sus fuerzas la mantuvo quieta, pero la otra persona era mucho más fuerte que él.

Terminó abriéndose, golpeando la pared que tenía al lado de forma bruta. El hombre lo miró con una gran sonrisa en su rostro y levantó la mano que mantenía un cuchillo bien afilado. Cerró sus ojos con fuerza mientras se agachaba y se abrazaba a si mismo, chillando aterrorizado al sentir la filosa punta traspasar su delicada piel.

Desperté con la respiración agitada, con mis ojos abiertos como platos mientras trataba de recuperar mi respiración habitual. Mi corazón iba acelerado por el miedo que había pasado en esa horrible pesadilla. ¿ Por qué siempre me pasaban esas cosas a mí ? Llevaba una racha de pesadillas que nadie se podía imaginar, y aunque lo contase seguramente no me creerían.

Llevé mi mano derecha a mis cabellos, tirándolos suavemente mientras soltaba un quejido por lo bajo. Tras ello miré la hora, eran las cinco y media de la noche. ¿ Cuánto dormí ? ¿ Dos, tres horas ? Me volví a acostar tarde por estar estudiando, y ahora me despertaba temprano, muy temprano.

No me quedaba de otra, sabía que si volvía a dormirme volvería a tener esa pesadilla. Lo más gracioso era que siempre era la misma. Un hombre con un cuchillo persiguiéndome hasta matarme. ¿ Acaso esto era una advertencia ? Porque si era así, quería acabar ya con ese sufrimiento.

Di media vuelta, dejando que mis piernas colgaran de la cama. Miré al chico que dormía al otro lado en su propia cama, se veía tan tranquilo a diferencia de mí. Recuerdo que una vez tuve que pedirle dormir a su lado porque había tenido tres pesadillas seguidas, y bien que logré descansar cuando me abrazó.

Suspiré, jamás sentiría otro tipo de cariño por ese chico más que el de un hermano, pero admito que fue muy tierno aquel día conmigo. A veces pensaba que yo le agradaba de otra forma, más que hermanos, pero cuando lo veo junto a cierta persona se me quitan esas ideas de la cabeza.

Y no, no esperes que diga quien es. Son asuntos privados de Fargan y yo no voy a hablar de ellos.

Me levanté de la cama con un pequeño salto, caminando con cuidado hacia mi escritorio. Aún tenía el libro de biología en la mesa, así que solo lo abrí y me dispuse a repasar desde la primera hoja hasta la última del temario.

Pasaron las horas, seis menos cuarto, seis en punto, seis y cuarto . . . Eran aproximadamente las siete menos cuarto cuando sentí que alguien me lanzaba algo. Con el ceño levemente fruncido me giré sobre mi silla con ruedas y miré al culpable de ello.

ㅤㅤ─────¿ Qué es lo que haces ? ─────Le pregunté algo molesto. No me gustaba que me molestasen mientras estudiaba.

ㅤㅤ─────¿ Qué haces tan temprano estudiando ? ─────Me preguntó él, sonriendo divertido. Estaba tumbado sobre la cama de una forma algo graciosa. Sus piernas estaban apoyadas en la pared y la cabeza colgaba del borde de la cama.

ㅤㅤ─────Tuve una pesadilla y decidí ponerme a repasar ─────Le conté la verdad, tampoco era nada del otro mundo y como bien había dicho, él ya conocía sobre mis sueños tan bonitos. Que a pesar de eso, a veces sí que soñaba cosas agradables, como el día de ayer.

ㅤㅤ─────¿ Y por qué no viniste conmigo ? ─────Hizo un leve puchero, a lo que yo simplemente sonreí enternecido.

ㅤㅤ─────No quería despertarte, te veías muy tierno durmiendo ─────Lo admití, no me daba vergüenza hacerlo.