XIII

315 60 36
                                    

Erik observó los cds varias veces. Ese tal Hank McCoy había llegado a su vida, con algo que podía reivindicarlo, de manera tan repentina que casi se sentía como si se tratase de un Deux ex Machina, dentro de una historia bastante mala. Esas cosas no pasaban en la vida real, por lo que se esperaba que fuese un engaño o algo por el estilo. Sin embargo, al parecer, no lo era. En el primer video, se veía claramente a Shaw ingresando a la oficina y avanzando hacia el cubículo de Erik, para darle una carpeta con algunos archivos. Luego de una escueta conversación, Shaw se retira y Erik abre la carpeta, para observar las imágenes de la campaña publicitaria que, supuestamente, había robado. Las imágenes en las que el mismo Charles había estado trabajando, se veían tan nítidamente, que era inevitable que ese video librase a Erik de toda culpa.

El segundo video, mostraba a Erik y a Emma en la fachada del edificio en donde Shaw trabajaba. La mujer mira varias veces a su alrededor, asegurándose que nadie los vea y conversa con Erik. Él recuerda ese momento, en el que ella le decía que esperase media hora antes de entrar. Incluso, le dio las llaves de la oficina y le indicó donde estaba el área de mantenimiento para que se hiciera con algunas ropas. De esta manera, se demostraba, que Erik no estaba solo en este asunto, sin embargo, era probable que Shaw quedase libre de cargos en esta situación. No, así, en la primera.

A Erik no le importaba. Era más que suficiente con el hecho de que su inocencia se salvase hasta un punto más que decente. Por eso, había pedido a su madre que llamase a Charles él, antes de irse, había dejado un numero a Edie para que ella lo contactara por si necesitaba algo. Obviamente, Erik no contaba con ese privilegio.

Cuando Charles entró al departamento de su madre, Edie decidió que era buen momento para dejarlos solos. Ella decía que tenían muchas cosas de que hablar y pidió a Erik que fuese delicado. No era algo fácil de aceptar, que la persona en quien confiabas te engañó para salirse con la suya. Lo que a Edie no le habían contado, era que Charles sabía que Shaw no era del todo sincero con él... aunque, lo que Erik iba a mostrarle era más de lo que se había imaginado.

Charles lo miró disgustado y a la espera de que dijera algo, porque se lo había prometido a Edie. Se movía ansioso de un pie al otro y le observaba con mucha intensidad. Erik, en cambio, pensaba en lo llamativo que era el hecho de que todo lo gris que había sido su vida hasta hacía unos días atrás, pareciera iluminarse y tomar color ante su presencia. De repente, no había tanto dolor en su pecho e incluso, si la situación lo ameritaba, podía llegar a sonreír. Pero no había tiempo para ello, evaluar lo que estaba sintiendo sería algo que realizaría después, cuando Charles le hubiese perdonado o cuando decidiera que aquellas pruebas, en realidad, no eran importantes.

—Hice que mi madre te llamara, porque había algo que quería mostrarte.

Charles lo miró con sus enormes ojos azules, antes de llevarse una mano a la cara para rascarse con gesto distraído la barba de varios días que había permitido crecer. Sus cabellos, incluso, estaban más largos que la última vez y se encontraban bastante despeinados. Podría decirse que había descuidado un poco su imagen, pero no lo suficiente como para verse demasiado desaliñado.

"Um Hashem* willen.... du siehst wunderschön aus" pensó y las palabras picaron en la punta de su lengua por salir, sin embargo, las contuvo (Por el amor de Dios... Te ves hermoso)

—Está bien- dijo, simplemente, y Erik le señaló el sofá para que tomara asiento, antes de encender su laptop y reproducir los videos.

El corazón de Erik latía con tanta fuerza, que creyó que el oxígeno no iba a alcanzarle para cubrir tanto trabajo. Tragó duro un par de veces, descubriendo que su boca estaba pastosa. Las imágenes frente a sus ojos se mostraban con una parsimonia que lo desesperaba, solo cuando estas cesaron, pudo respirar profundo sintiéndose aliviado.

Charles permaneció en silencio por varios segundos en los que no se atrevió a interrumpirle. Luego de eso, simplemente, se puso de pie y se encaminó hacia la puerta. Erik lo miró sin comprender, sintiendo que algo dentro de él parecía haberse derrumbado.

—No sé qué pretendes con esto- dijo con tono sereno, antes de voltearse a verle.

—¿Cómo?

—Con esto solo me has demostrado que eres orgulloso y vengativo.

—¿Qué? –

—El primer video... Está bien, Sebastián robó mi trabajo, no has sido tu. Gracias por la aclaración... pero el segundo, Erik... Eso sucedió hace más de un año y ¿Todavía guardas rencor? - preguntó como si no pudiese creer lo que estaba sucediendo.

—¡Oh! - soltó una risilla irónica, sin poder entender que la conversación hubiese tomado ese extraño rumbo —No me hables de ser rencoroso, justamente tú, que el primer día que estuviste aquí dijiste que no me perdonabas.

—¡No hice nada para vengarme de ti! ¡Jamás te haría daño!

Erik no comprendía porque Charles actuaba así y lo peor de todo era, que la ira fluía dentro de él como si fuese la lava de un volcán a punto de entrar en erupción.

—Ese tipo arruinó mi vida, Charles- respondió sin poder ni querer calmarse.

—¡No te ha hecho nada!... No te llevabas demasiado bien con nadie por lo que, en ese aspecto, nada ha cambiado... y en cuanto al trabajo ¡Tuviste un ascenso! Pobre, Erik, todo lo que sufrió.

—Les mintió a todos... Quería hacerme quedar como un ladrón.

—Y tu quisiste hacerle lo mismo... Muy bien, Erik. Te felicito... Eres mejor que él- contestó con un sarcasmo que resultaba doloroso. —¿Por qué no solo lo dejaste estar?

—No pude, Charles. No iba a quedarme tranquilo después de todo lo que hizo.

—No te ha hecho nada, Erik... Él...

—¡Te alejó de mí! - gritó, sintiendo que se desgarraba por dentro a causa del dolor, la angustia y el enojo que lo atravesaban y parecían dividirlo en partes iguales—¡Sabía lo que yo sentía por ti y te alejó de mí!...

Charles permaneció en silencio mirándole, tan sorprendido, que parecía en estado de shock. Erik avanzó a paso lento para acercarse a él, como si temiera asustarlo.

—Y no solo eso- Calmó su tono de voz y alzó su mano en su dirección tratando, con ese gesto, detener la huida que, probablemente, era inminente —Él te lastimó. Te hizo daño. ¿Cómo quieres que lo perdone?

—El problema, mi amigo... Es que no has tenido en cuenta que yo soy capaz de tomar mis propias decisiones- dijo y sin dar tiempo a responder, salió del departamento y cerró la puerta tras de sí.

Erik permaneció de pie en donde estaba y observó su propia mano alzada, la cual apretó en un fuerte puño.

¿Qué acababa de suceder?...

Se sentía tan estúpido.

Se sentía tan estúpido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

N/A:

Tengo memoria a corto plazo y casi me olvido que tenía que actualizar XD
Espero que les haya gustado ♥
Estoy muy feliz del recibimiento que estan teniendo mis historias ♥
Muchísimas gracias ♥
Para quienes no se han enterado... Empecé otro Cherik, muy cortito, que se llama "Celos"
Porque hacía falta que Charles los sintiera (???

Muchas gracias por leer...
Hasta la próxima actua ♥♥♥

ApathieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora