16 | Sedado

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CAPITULO 16

"SEDADO"


Sedado. El peor sentimiento de todos.

Después del incidente en mi habitación, los médicos decidieron sedarme. Para ellos, yo estaba desesperado y fuera de control. Para mí, era solo la miseria por tener que separarme de Eleanor.

Eran como las 4 de la mañana cuando me desperté al contacto de una mano fría en mi cara. Abrí los ojos pero estaba oscuro y borroso. Las luces estaban apagadas y no podía ver claramente quién estaba parado a mi lado.

"Lo siento, Louis", dijo una voz suave, "no quise despertarte".

Eleanor. Era su voz. Incluso tan sedado como estaba podía reconocer su voz. O tal vez mi mente me estaba engañando y estaba alucinando.

Parpadeé un par de veces tratando de ver su rostro, pero mi mal estado y la medicación fueron más fuertes. Me sentía mareado y mi cabeza daba vueltas rápidamente.

"Vuelve a dormir, Lou".

Imposible. Si no podía verla, al menos la escucharía. Traté de levantar mi mano para alcanzarla pero no pude. Mi cuerpo se sentía tan pesado como nunca antes. Bueno, al menos la parte de mi cuerpo que podía sentir...

Incapaz de moverme, simplemente negué con la cabeza.

"Está bien, Lou. Me quedaré aquí", me dijo.

Un sentimiento de seguridad me invadió de repente. Asentí y cerré los ojos. Ella se quedaría.

Ahora su mano fría jugaba con mi cabello y la escuché soltar una risita. Sacudí la cabeza y ella entendió que le estaba preguntando implícitamente por qué se había reído.

"Tu cabello es un desastre, ¿sabes?" Lo pensé y me avergoncé de inmediato. Debo haber tenido el peor aspecto, y la chica más hermosa que había conocido estaba a mi lado ahora. Afortunadamente para mí estaba oscuro. Fruncí el ceño y ella se rió de nuevo.

"No te preocupes. Lo arreglaré para ti antes de que los médicos me atrapen aquí."

Entonces Eleanor estaba en mi habitación ilegalmente. Mi corazón saltó dentro de mí y no pude hacer nada más que sentirme halagado. No estoy seguro de si realmente lo hice o si fue mi impresión, pero le sonreí.

"Lo sé, no debería estar aquí, especialmente después de todos los problemas que he causado".

¿Ella pensaba que había causado todo esto? Así que parecía que ambos nos habíamos estado culpando todo este tiempo. Al menos eso teníamos en común.

"Voy a decir esto rápidamente, Lou. Quiero disculparme por lo que hice. No por el desmayo, por supuesto. Ojalá fuera más fuerte para controlar eso". Esas palabras me recordaron el dolor por el que ella estaba pasando. "De todos modos, me sentía un poco mejor ahora, así que quería decirte que siento mucho haberte puesto en una situación tan difícil. Quiero decir, mirarte".

Ahora ella estaba tomando mi mano. El frío de sus dedos contrastaba con el calor de mi mano. Con un gran esfuerzo, presioné su mano contra la mía. Todavía tenía los ojos cerrados, así que imaginé su rostro mirando nuestras manos.

"Nancy me dijo que te caíste de la cama cuando me llevaron. Me sentí tan terrible y culpable que traté de escapar de mi nueva habitación, la cual tengo que decir que es horrible, pero los médicos me dijeron que no lo hiciera".

No podía imaginarla, tan frágil como estaba, tratando de levantarse solo para ver cómo estaba yo.

"No tienes idea de cuánto extraño tu compañía, incluso tus eternos partidos de fútbol en la televisión".

Recordé las tardes anteriores que habíamos compartido juntos y parecía que habían sido hace años.

"Y estoy segura de que extrañas mi forma de hablar de moda y libros, ¿no? Pero no te preocupes, ya les pedí a los médicos que me trajeran de vuelta aquí".

¿Ella había hecho eso? Presioné su mano más fuerte, como si estuviera tratando de retenerla.

"Relájate, Nancy me dijo que pasarán solo unos días antes de que me vuelvas a tener aquí. No tendrás que extrañarme mucho más", se rió y yo volví a sonreír.

"Wow, Louis, esto es tan extraño, solo yo hablando, ¿sabes? Quiero decir, tú eres el más hablador de los dos. Quizás el más hablador de todo el hospital."

Revisé todo el tiempo que habíamos estado juntos en esa habitación. Ella tenía razón; Había pasado la mayor parte del tiempo hablando y ella solo me escuchaba, ocasionalmente respondía algunas de mis preguntas. Si realmente volviera a estar con ella, trataría de ser el que escuchara. Después de todo, no había olvidado lo último que supe sobre Eleanor. Ella no tenía familia o amigos para estar con ella. Ok, entonces tal vez yo podría ocupar ese lugar... esperando ser más que un amigo.

"¡Maldición! El Dr. Frederickson viene." Me sentí tan nervioso cuando dijo eso que mi respiración se agitó. Pero no estaba nervioso porque los doctores encontraran a Eleanor allí. No. Me puse ansioso porque sabía que le pedirían que saliera de la habitación. Que me dejara.

"Tengo que irme ahora, Lou. Por favor, prométeme que no te preocuparás por mí. Prométeme que te cuidarás". Me dijo susurrando mientras se acercaba a mi oído. ¿Quizás para besarme en la mejilla?

Me soltó la mano y el vacío se sintió terrible.

"Adiós, Tomlinson".

Tal vez fue por el miedo a perderla nuevamente que mi cuerpo finalmente reaccionó. Moví mi cabeza ligeramente hacia ella y sentí la sensación más maravillosa.

Sus labios contra los míos.


Quizás estar sedado no era tan malo después de todo.



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Agustina

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