Cartas de amor

Soldier

Los días iban pasando y la relación de nuestro pequeño grupo de seis se hacía cada vez más fuerte, la interacción de Umi y Elliot con el resto de chicas de su aula no había cambiado, seguían siendo perseguidos, observados e interrogados por ellas en cuanto tenían la oportunidad, pero no solo por las jóvenes de sus respectivos grupos, sino que las chicas de grados superiores se habían unido al séquito, pero después de un par de enfrentamientos de sus amigas con las chicas que parecían acosarlos siempre que estaban en su aula o fuera de ella sus interacciones disminuyeron, pero no las miradas sobre ellos

Umi: Ésto se vuelve más tedioso cada día - dijo el peliazul caminando al lado del rubio quien cargaba como él unas cajas mientras iban por el pasillo -

Elliot: Concuerdo contigo - respondió mirando un poco a su alrededor, viendo a las chicas del pasillo mirarlos de arriba a abajo, la razón por la que están en el pasillo únicamente ellos dos es que sus profesores les pidieron ayuda para organizar un almacén, llevando y trayendo cosas, por qué ellos? Bueno, por su buen desempeño y comportamiento fueron elegidos para la tarea, sin poderse negar accedieron, al inicio creyeron que serían solo ellos dos vaya su sorpresa al encontrarse con otro chico, que más bien, chocó con ellos al ir por el pasillo - lo siento no vi por dónde iba - bajo sus cajas para ayudar a recoger las cosas que por el impacto el otro había dejado caer -

Maki: No se preocupe, Ayase-san, yo... Iba muy distraído -

Elliot: Oh! Tu eres Nishikino Maki, no es así? - lo reconoció por el inconfundible cabello rojo que poseía el chico -

Maki: Así es -

Umi: Vaya es una sorpresa que estés por aquí, no es común verte caminando por los pasillos -

Maki: Los profesores me pidieron ayuda para organizar un almacén - comentó terminando de recoger las cosas para ver a los otros dos notando las cajas que llevaban - por lo visto a ustedes les pidieron lo mismo -

Elliot: Sí, también estamos ayudando con el almacén - cogió sus cajas y miro al pelirrojo - mi nombre es Ayase Elliot y él es mi amigo -

Umi: Sonoda Umihiko, un gusto -

Maki: Nishikino Maki, un gusto conocerlo, Ayase-san, Sonoda-san -

Umi: Bueno, hay que apresurarnos a llevar esto, si queremos avanzar algo antes de la hora del almuerzo - con un asentamiento los otros dos caminaron junto a él, estuvieron un buen rato en el lugar acomodando y haciendo un registro de lo que había dentro de la contrucción, no era difícil pero sí algo agitado ordenar todo lo de dentro, pero tenían tiempo, al cabo de una hora escucharon el timbre sonar - 

Elliot: Debe ser hora de almorzar -

Umi: Kotori dice que nos esperan en la cafetería para conseguir una mesa - dijo al revisar el reciente mensaje que había llegado a su celular -

Elliot: Entonces deberíamos apresurarnos - sonrió a su amigo quien le devolvió el gesto - nos acompañas Nishikino-san? - le pregunto al chico, pues éste aún seguía con su labor -

Maki: No creo que sea buena idea, no quisiera ser una molestia para sus amigos -

Umi: No las molestarías, siempre estamos abiertos a nuevas amistades -

Elliot: Vamos, será divertido - aun no convencido del todo accedió, tal vez, porque en el fondo deseaba poder socializar con otros chicos y chicas, nunca lo había hecho aunque el deseo estaba siempre con él, solo, no sabía cómo acercarse a los demás -

Los tres chicos se encaminaron a la cafetería bajo la intensa mirada de las chicas que los rodeaban, hablaron un poco entre ellos para poder distraerse de esas miradas, era extraño, normalmente tardaban más en congeniar con otros, pero ese chico extrañamente los hizo sentirse cómodos en unos minutos, era fácil tratar con él. Cuando llegaron buscaron con la mirada a sus amigas viéndolas no muy lejos, pero no estaban solo ellas, habían unos chicos alrededor de la mesa, a los lados de sus amigas quienes parecían algo incómodas ante la cercanía de los chicos, que pasaban descaradamente sus manos por los hombros de las chicas queriendo bajar más, el trio se molestó por estás acciones, uno de ellos tomaba el mentón de la peliceniza para que lo mirara, susurró algo pues sus labios se movieron y estaba empezando a acercarse, sin embargo, sintió un fuerte apretón en su hombro que lo hizo soltar un pequeño quejido de dolor, alejándose rápidamente de la nerviosa chica para ver quién se había atrevido a tocarlo 

Umi: Hola chicas, lamentamos haber tardado tanto - sonrió a las chicas quienes parecieron respirar con tranquilidad, viendo como los otros dos se ponían atrás de los chicos restantes - necesitaban algo? - se dirijio a los demás, que ante la intensa mirada de Umi se sintieron intimidados -

C1: N-no, en realidad, ya nos íbamos - dio una señal a los demás y rápido se fueron, escapando de las miradas molestas de los 3 recién llegados -

Umi: Tsk! Malditos - susurro apenas para después ver a las chicas, en especial a su amiga de infancia - Están bien chicas? -

Honoka: Sí, estamos bien -

Elliot: Que es lo que querían esos tipos? - la molestia en su voz no pudo ser menos notoria, no se le pasó el echo de que uno de ellos había intentado manosear a Nozomi poco antes de que llegaran, se sintió realmente molesto al ver eso -

Nozomi: Solo importunar, pero, tuvimos suerte de que nuestros leales caballeros llegarán a rescatarnos - bromeó un poco para aligerar el ambiente, no le gustaba que todos estuvieran tensos por un mal rato, luego se dio cuenta de la presencia de alguien extra - parece que tenemos un extra, hola Nishikino-san -

Maki: Oh! H-hola -

Elliot: Es verdad, chicas ustedes ya lo conocen, él es Nishikino Maki, y lo invitamos a almorzar con nosotros -

Kotori: Es un gusto Nishikino-san, mi nombre es Minami Kotori y ellas son mis amigas Toujo Nozomi, Yasawa Nico y Kousaka Honoka -

Nozomi/Honoka/Nico: Hola -

Maki: Hola, lamento llegar sin previo aviso -

Honoka: No te preocupes, siempre es bueno hacer más amigos - para él el ambiente era algo extraño, todos parecían llevarse bastante bien, hablaban entre ellos mientras almorzaban -

Honoka: Y cómo se encontró con nuestros amigos, Nishikino-san? -

Maki: Pueden llamarme solo Maki - los demás solo sonrieron -

Elliot: Recuerdan que los profesores nos pidieron ayuda para limpiar un almacén? - asintieron - pues al parecer a Maki también lo llamaron, así que estuvimos trabajando con él todo el tiempo -

Nozomi: Y avanzaron algo? -

Umi: Sí, entre los tres casi terminamos con todo el trabajo -

Maki: Puede que terminemos en una hora más -

Kotori: Nico-chan, deberías dejar de ver tanto a Maki-kun o se dará cuenta - le susurro a su pequeña amiga pegándole suavemente con su codo, pues desde que los chicos habían llegado que esta no había despegado su vista del pelirrojo -

Nico: Y-yo no lo estoy mirando - trato de negar pero fue inútil, el sonrojo en su rostro la delataba -

Kotori: Ok, ok, Nico-chan - río divertida, era entretenido molestar a la pelinegra, pero, había algo más - pero, sabes Nico-chan, no creo que él te sea indiferente - no era la única que lo notó, sus otras dos amigas también se habían percatado de las fugases miradas que el chico daba a su amiga -