Los misterios ocultos del pequeño Canterdale (En Pausa)

Capitulo dos: A la luz del sol

Aquella mañana todos los alumnos de la preparatoria de Canterdale asistieron a sus clases normalmente, como solían hacer desde toda la vida. Nada había cambiado de la noche a la mañana, todo era igual que hace 25 años, y seguiría igual hasta dentro de otros 25 años mas.

A excepción de que esta vez se ausentarían de clase cinco alumnos, cinco individuos que nunca llegaron a sus casas luego de aquella fiesta. De los cuales 3 de sus padres asumieron, estarían en clases. 

Y no fue hasta las 11 am. a la hora del almuerzo, que el director Frederik Johnson se percato de la ausencia de hijo; Luke no se encontraba por ningún lado, y nadie lo había visto ingresar a los muros de la institución en toda la mañana.

Por otro lado, Joseph Montgomery recibió una llamada desconocida a las 12.30 pm. mientras tomaba un vuelo hacia Chicago, era la nana desesperada que le comunicaba que su hija había desaparecido. Pero el magnate hizo caso omiso a la noticia, debido a que, no era la primera vez que sucedía algo así.

Mientras, al otro lado del pueblo, la mama de Sam junto a la abuela de Derek, llamaban desesperadas a todos sus conocidos preguntando si habían visto a los chicos. Se suponía que éstos habían salido a dar unas vueltas en la camioneta de Sam, y debían volver antes de las 12 de la noche, por que al otro día debían ir a clases.

Nadie había vuelto a casa.

A las 12.30 del mediodía, todo el pueblo, inclusive el padre de Amy Montgomery, se almorzaron la noticia de que había sido hallado el cuerpo sin vida de la hija del alcalde Murphy y a pocos metros de este, su cabeza.

Para las 14.50, todo el pueblo estaba enterado de la desaparición de los 5 chicos, hecho que los convertía en los principales sospechosos del asesinato de Samanta.

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El profesor Henry Fletcher paseaba plácidamente por el patio de juegos de la primaria Ruiseñor, cuando a las 21.50 pm. encontró detrás de unos arbustos un tumulto tapado con una sabana color lavanda. De esta sobresalían extremidades humanas, lo que lo paralizo y le provoco al instante nauseas, seguidas de vómito.

Con todo el valor del mundo se atrevió a quitar la sabana de encima de esa pila de materia, y quedó aún mas impresionado al ver 5 cuerpos tendidos en el pasto verde de aquel parque.

La imagen era horrorosa, estaban pálidos, parecían muertos; pero Henry no se atrevía a tocarlos, tan solo los observo por lo que parecieron horas, pero en realidad fueron minutos, minutos en los que su mente maquino miles de escenarios posibles que llevaran a esos chicos al estado en el que estaban.

Cuando fue consiente de lo que significaba esa escena, reacciono tomando el móvil del bolsillo de su chaqueta, y marco a la policía. El teléfono sonó una..., dos... 

-Hola, policía de Canterdale ¿Cuál es su emergencia?- respondió una voz de mujer desde el otro lado de la línea.

-Sally- dijo con un dejo de vos- envía rápido una patrulla a la primaria Ruiseñor, ha pasado algo horrible- se oyó como la voz del otro lado del teléfono hablaba, pero para ese entonces Henry ya había cortado la llamada.

Esto era incomodo, pensó Sally luego de que se diera por terminada la llamada, ella y Henry habían estado en pareja hasta el otoño pasado, en donde dieron por finalizada su relación debido que el profesor quería hijos, y ella no estaba preparada para eso. Ni pensaba estarlo nunca.

Luego de una feroz pelea en casa de ésta, el profesor tomo todas sus cosas y se marcho a casa de su madre. En su fuero interno Sally creyó que había sido una pelea igual a tantas que ya habían tenido y dejado en el pasado; pero luego de que no la llamara durante dos semanas dio oficialmente por terminada su relación, y hasta esa llamada llevaban sin hablar 5 meses.