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005 | Yuppie

Bangtan Sonyeondan
Imagine
V

   Kim Seokjin había amordazado a Oh Seolhee, que se encontraba en una esquina de la habitación todavía llorando. Los chicos ya estaban perdiendo la paciencia. A decir verdad, toda la situación los tenía con los pelos de punta. Añadirle estupideces que pasaran durante la espera no era exactamente lo que les hacía falta a ninguno, pero Kim Seokjin estaba dispuesto a buscar otras alternativas.

Aunque hubiese sabido desde un principio lo que debió haber hecho.

— Ella no fue la única... — Taehyung soltó en dirección a Jimin a pesar de que todos voltearon a mirarlo. — También está embarazada de él. Al parecer no la forzó y tenía intenciones de decírselo hoy. — Jimin se quedó petrificado. Jungkook se sostuvo el puente de la nariz pensando en si eran capaces de seguir metiendo sus narices en donde no hacía falta. — Jimin, ¿de verdad mataste a Kim Baekwoo?

Seolhee se paralizó y encontró la mirada de Seokjin entre todo el embrollo.

— ¡Excelente, Taehyung! — Jungkook ironizó — No hay problema. Puedes seguir soltando más información.

— ¿Qué más da? — remató y paseó su mirada entre los chicos — Es evidente cómo va a terminar. Ni si quiera sé por qué la has traído aquí.

Seolhee intentó volver a encontrar la mirada de su secuestrador más cercano.

— Porque no creo que sea necesario. — Seokjin respondió. Taehyung fue el primero en bufar. — Podríamos considerar otras maneras. No podemos seguir echando a perder el plan con cada mierda que se nos presente en el camino.

— El plan dice que ejecutemos siempre y cuando sea estrictamente necesario y no haya otra opción. — Yoongi soltó — A Jimin le salió de los cojones matar a un niño que, a lo mejor iba por ahí siendo un hijo de puta, pero no era asunto de ninguno de nosotros por más que te hayas encariñado con la mosquita muerta, hermano. Y lo siento — Jimin y Yoongi se intercambiaron un par de sulfuradas miradas —, pero es evidente. Por otro lado, ésta mocosa se ha comunicado con el exterior a través de un puto celular. Seguramente tengamos alrededor de menos de una hora para prepararnos antes de que la policía y el mismísimo gobernador acribillen la puerta principal, pero dices que no es necesario porque podemos encontrar otras maneras. ¿Para qué exactamente si no es para matarla, hyung?

Todos los chicos se adentraron en la tensión que dejó el sermón de Yoongi, mirándose entre sí y deliberando la próxima decisión. Seokjin quiso contradecir a Yoongi. Quiso probar que estaba tan equivocado como lo estuvo Jimin al matar a un adolescente. Que nada de lo que decidieran cambiaría el hecho de que ya estaban por venir por ellos, pero no pudo. No encontró cómo hacerlo. Pensó en que no tenía sentido salvar a una niña que acababa de complicarles el atraco, pero mucho menos lo tenía deshacerse de ella.

   Seolhee lloraba en silencio. No podía creerlo. ¡Eran unos psicópatas! No podía creer cómo pasó de sentirse "a salvo" a escuchar cómo la sentenciaban a muerte. Sin importar cuánto estuviese tratando el señor Kim, no valía una mierda. ¡Estaba igual de desquiciado que los demás y dijeran lo que dijeran, sabía que la iban a matar! ¡Igual que a Kim Baekwoo! ¿Quién iba a imaginarse que alguien fuese capaz de matar al hijo de un senador que estaba más relacionado con la constitución del gobierno que un representante cualquiera? ¡Si lo habían matado a él eran capaces de matar a cualquiera!

Seolhee ya estaba muerta.

Sin embargo, el sonido de un aparato electrónico paralizó a todos en la habitación. Cuando realizaron que no provenía del celular que Seokjin le había encontrado a Seolhee, todas las miradas cayeron en Namjoon, que era el único portador de un celular en la banda.