Te reto a enamorarme

Capítulo 6

Multimedia: Como imagino a Sara (Teresa Palmer)  

Capítulo 6 

Sara

Ya nos encontrábamos en la previa del upd. Solo éramos unos pocos, que decidimos juntarnos un rato antes de ir al lugar donde sería la fiesta. No quería estar ahí, pero Emma me terminó convenciendo y no me quedó otra.

Sí, tendría que haber hablado con mi madre hoy, pero la realidad es que con mi amiga nos quedamos dormidas y luego de un rato de despertarnos, decidimos ya ir preparando todo lo necesario para la noche. Así que hablaré con mi madre mañana, cuando vuelva del trabajo.

No tenía trato con nadie de los que estaban aquí, ni siquiera en mis primeros años de secundaria. Así que solo me quedé junto a la mesa donde estaba el alcohol, bebiendo un poco y usando mi celular. De vez en cuando Emma venía a decirme que vaya con ella, pero le decía que no se preocupe. Creo que estaba más preocupada por la cantidad de alcohol que podía llegar a beber, pero creo que pude controlarlo bastante bien. 

Una vez ya en la quinta que habíamos alquilado, vi que era muy espaciosa, en mi opinión perfecta para una fiesta.

Estaba nerviosa y me sentía demasiado incómoda, ya que de seguro todos seguían pensando cosas feas de mí. Mi amiga no me dejó sola, y de a poco me fue integrando con su grupo de amigos de ahora.

Comenzamos a bailar al ritmo de la música y empezaba a sentirme menos incómoda. De repente me agarra sed, así que voy a la barra pensando en tomar un vaso de vodka.

Y de la nada, lo veo.

Mi amor de la infancia. El chico que me gustaba cuando era pequeña, aunque ni entendía lo que era el amor. Mi único otro amigo además de Emma, el cual se alejó de mí cuando mi padre me abandonó.

Ya había tenido en cuenta que lo vería, pero no sabía que iba a decirle. Porque a pesar de que me dolió mucho lo que hizo, debo admitir que en serio lo extrañaba y quería hablar con él. O al menos saludarlo.

Veo que el barman le da su trago y él se gira para irse a bailar, pero queda frente a mí.

Me quedé parada como una idiota con la boca abierta a punto de decir algo, pero las palabras no me salían ¿Por qué me era tan difícil?

Él se queda mirándome, pero reacciona más rápido que yo y comienza a acercarse, tímido.

- Hola Sara – dice pasándose la mano por su cabello. Está cambiado desde la última vez que lo vi, antes de comenzar las vacaciones de verano. Sus brazos están mucho más definidos, su pelo más claro y un poco más largo. Me gusta.

- Hola, David – digo mirándolo fijo.

- Emma me dijo que volvieron a ser amigas.

- Si... - aparto la mirada de sus ojos.

Y ahora me gustaría volver a ser la tuya.

- Sara... - comienza a decir, apenado - lamento no haber escrito ni llamado en todo este tiempo, en serio, yo...

- Descuida – lo interrumpo – luego podemos hablarlo, pero... te extrañé, ¿crees que podríamos intentar volver a estar bien? – una sonrisa se dibuja en su cara.

Pensaba que no valía la pena dejar de disfrutar de esta noche por algo que se puede hablar tranquilamente después. 

- Claro, no lo dudes. Yo también te extrañé, te recompensaré por no haber estado a tu lado.

Le sonrío de oreja a oreja y nos abrazamos. Era extraño hacerlo después de tanto tiempo.

- Ven anda, espérame que pido algo – le digo y nos acercamos a la barra.