Capítulo 4. Muestra

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—No mentiré al decir que me interesa.—Dijo en un tono de voz bajo. No solo eso, estaba asustada de lo mucho que ansiaba el dormí sin despertar con el corazón latiendo desbocado a mitad de la noche a causa de un mal sueño.—Pero no aceptaré la oferta.

—¿Uh?—Arqueó una de sus cejas, levemente decepcionado de la respuesta de la chica.—¿Por qué?

Esta vez fue ella la que arqueó una ceja.

—Para empezar, ¿Hacer un trato aparentemente justo con un demonio? ¿Eso existe?—Se cuestionó mirando al techo.

—¡Hey! Eso es ofensivo. ¿No confiar en alguien solo por ser un demonio? Eso es cruel.—La chica se mantuvo callada, con la misma expresión inexpresiva hacia el rubio.—Son solo estereotipos.

—Si no me equivoco me has estado observando todo el día.—Dijo ella sorprendiendo más al demonio.

Si quería que su plan funcionara, debía de cerrar el trato con ella lo antes posible, antes que termine de descubrir sus intenciones. Tenía que ganarse su confianza, cuanto antes mejor.

—Soy alguien persistente.—Se limitó a decir. La ojiazul permaneció callada, simplemente asintió a su comentario. —Y realmente deseo cerrar este trato.—Se aseguró de mirarla directamente a los ojos cuando dijo esa frase. Sabiendo que aquellas palabras quedarían gravadas en la mente de la chica.

El demonio sonrió para sus adentros al ver a la pelinegra desviar la mirada para después dar un largo suspiro.

—Mi respuesta no va a cambiar.—Y la sonrisa del demonio se esfumó nuevamente.

La chica estaba decidida a no cambiar su parecer, un trato con un ser no humano era algo peligroso, lo sentía en todo su ser, muy a pesar de su bienestar al dormir... Debía de obligar a su mente a recordar todo lo que sabía de demonios, pues estaba segura de que al seguir rechazándolo las cosas se iban a poner complicadas para ella, su vida podría ponerse en riesgo en cualquier momento debido a su negativa.

Esperó a ver su reacción. El rostro del rubio estaba tenso, su entrecejo fruncido y sus labios convertidos en una fina linea, le dijeron que estaba molesto, y al parecer, se estaba conteniendo.

Hasta que finalmente abrió los ojos y sonrió de nuevo, sorprendiéndola.

—No me daré por vencido con nuestro trato.—Tomó el rostro de la chica entre sus manos y depositó un beso en su frente.—Te daré un pequeña muestra, 5 días sin pesadillas, sin nada a cambio... Si no cambias de parecer en ese tiempo desistiré del trato y te dejaré tranquila.

—¿De verdad?

—Tienes mi palabra.—Dijo.—No insistiré pasado ese tiempo, no hay nada que perder... O mis modales, te dije como llamarme pero no pregunté por tu nombre, que maleducado de mi parte.

La chica parpadeó un par de veces, sorprendida.

—Creí que ya lo sabías.—Admitió la ojiazul enarcando una ceja.—Me llamo Nue, Nue Vaughan.

—¿Que te hizo pensar que lo sabía?—Cuestionó el demonio

—Me haz estado siguiendo todo el día.—Se encogió de hombros—Supuse que lo sabrías.

—Tus instintos fallaron esta vez... Pequeña Nuez.—Susurró lo ultimo para sí con una sonrisa burlesca que la chica no llegó a ver.—Nos vemos luego.

Y tras chasquear sus dedos, desapareció, dejando nuevamente sola a la pelinegra y con sus pensamientos enmarañándose en su mente. 

"El poder de mis ojos." Esas palabras resonaban dentro de su cabeza incluso cuando el demonio había desaparecido y ella se encontraba en su cama despierta a altas horas de la noche con la mirada en el techo, meditando todo lo que había ocurrido. "No hay nada de especial en ellos."

Dio un último vistazo a sus lentes ubicados en el mueble al lado de la cama antes de arriesgarse a cerrar sus ojos.

**

"Nue, te vi durmiendo profundamente y no quise despertarte, trabajaré hasta tarde hoy. Así que te tocará comprar la despensa de la semana. Dejé dinero en el lugar de siempre.

Atte. Mamá"

No era nada nuevo, ya no era algo de sorprenderse. 

—Buenos dias.

Al alzar la mirada ahí estaba él, mostrando una genuina sonrisa ladina.

Ella simplemente lo observó antes de arrugar la nota en su mano y lanzarla a un cesto para la basura.


¡Hola! Antes que nada quiero disculparme por estar ausente, llevo dos semanas enferma y no hacía nada mas que dormir :c por lo que no había podido actualizar hasta ahora que me estoy recuperando.

Además... He de confesar que hacer este capitulo fue difícil para mí -.-'no estoy acostumbrada a escribir con tanta "seriedad", siempre quiero darle a mis historias un toque de comedia, por lo que esta historia es un reto para mí.

Aunque claro, eso no significa que no disfruto escribir esta historia que había estado rondando en mi cabeza por semanas o hacer algunos dibujos de la chica que posiblemente les comparta mas adelante, en fin.

Espero que este capitulo les haya gustado y hasta la próxima ;)

Dream's eater ||Actualizaciones Lentas||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora