Capítulo 13. Puedes controlarlo Logan

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Cat comenzó a ponerse pálida, se levantó de la cama y paseo inquieta por la habitación.

- Ves por que no debería habértelo dicho - Dijo Logan

- Gracias - Dijo mientras se sentaba de nuevo en la cama junto a él - Gracias por habérmelo contado.

- ¿No me tienes miedo ?

- Estoy segura de que si me  hubieras querido hacer daño me lo habrías hecho ya. - Vale, ¿ Bebes sangre ?

- Ya estamos con las preguntas de siempre - Dijo Logan con tono disgustado.

- Perdón, tenía que preguntarlo

- Si bebo sangre, solo que no todos los días, nosotros podemos beber una sola vez al mes y mantenernos bien, obviamente los que beben todos los días son más fuertes, pero a mi no me gusta.

- ¿ Has matado alguna vez a alguien ?

- No, yo voy al banco de sangre, no sería capaz de matar a nadie.

- Vale, ¿ Como es que la luz no os afecta ?

- Hemos evolucionado.

- Entonces, puedes salir al sol, volverte invisible, eres fuerte, supongo que serás rápido.

- Correcto.

- ¿ Puedes hacer algo más ?

- Si, mira - Logan se acercó a Cat lentamente, colocó su mano derecha en su mejilla, cerró los ojos y cuando los abrió, ya no era él, era igual que Cat

- Alucinante - Dijo Cat dejándose caer sobre la cama.

 Entonces Logan cerró de nuevo los ojos y volvió a ser él.

- ¿Como te convertiste ?

- Uno puede ser convertido de dos maneras, o que te muerda un vampiro o bien que vengas de una extirpe vampirica, si perteneces a una de ellas naces así, yo nací así. Solo que para que yo me convirtiera mis padre tuvo que morir, es decir, soy su primogénito, si matan al padre el primogénito se convierte, lo llevamos en la sangre pero hasta que no se activa...ya sabes, no te conviertes, generalmente los que pertenecen a una extirpe suelen ser más fuertes.

- Vaya, lo siento, lo de tu padre

- Yo también. 

- ¿ Y que significa esa marca ?

- Es el símbolo de la realeza vampirica, significa que esa casa, según lo que me cuentas pertenece al líder de los vampiros.

- Pero esa casa era de mi padre 

Logan la miró con sorpresa.

- Bueno escuchame bien, según creo mañana me despertaré y no recordaré nada de esta noche, cuando llegue a la universidad asegúrate de que no recuerdo nada, y una vez sabiéndolo haz como si tu tampoco supieras nada, déjalo pasar, háblame como siempre, como si nada, en algún momento volveré a la casa y lo recordaré todo, voy a escribirme una carta, para que me llegue dentro de dos meses  más o menos, antes de volver a entrar tengo que saber que provoca la perdida de memoria para que no vuelva a pasar.

- Estas segura de que no quieres saberlo ? - Pregunto Logan paseando por la habitación

- Si, además te he dado mi palabra de que mañana no recordaría nada, no quiero que por culpa de eso perdamos nuestra amistad, prométemelo.

- Te lo prometo

- Gracias por contármelo - Dijo Cat mirándolo fijamente.

- Gracias a ti por no asustarte, además al final te lo habría contado, o me habría alejado de ti si fuera necesario, estar metido en este mundo no es bueno, cuanto más lejos estés de esta realidad mejor será para ti.

- Lo se, pero sea lo que sea que pase mi padre esta metido y lo necesito saber. - Dijo Cat cogiendo a Logan de la mano - Por cierto por que dijiste ayer lo de que preferías que te odiara a ti.

- Prefiero que me odies a que te veas implicada en esto, Cat no lo entiendes, esto no es algo de lo que estar orgulloso , esto es un castigo, con el que tengo que vivir día tras día, no puedo estar con una persona sin pensar como sería probar un poquito de su sangra, nunca podré ser normal, ni tener una vida como la demás gente.

- Lo siento Logan, me encantaría poder ayudarte - Dijo mientras lo abrazaba

Logan se apartó, se levantó y se puso de espaldas a ella, estar tan cerca le había provocado, solo podía pensar en su latido, en su sangre recorriendo todo su cuerpo.

- Logan - Dijo Cat poniendo su mano sobre su hombro.

Él  cogió su mano y se dio la vuelta muy despacio, sus ojos brillaban bajo un tono azul eléctrico, sus labios rojos como el carmesí, tras ellos se ocultaban sus colmillos, que no quería que Cat  viera.

- Déjame verlos, tranquilo - Dijo mientras pasaba su mano por su mejilla derecha, Logan se estremeció ante el contacto y sonrió dejando al descubierto esos blancos y largos colmillos.

- Ves por que no quería que vieras esta parte de mi, no me puedo fiar ni de mi mismo.

- Puedes controlarlo Logan, lo se. - Dijo Cat mientras veía que los ojos de este volvían a su tono habitual y sus colmillos desaparecían

- Tengo que irme - Dijo Logan abriendo la ventana de su habitación

Cat le siguió y depositó un beso en su mejilla.

- Gracias, por esto, por confiar en mi.

- Sería imposible no hacerlo - Fue lo último que dijo antes de desaparecer.

Cat se asomó a la ventana pero no vio nada, se puso el pijama, escribió la carta, y se la reenvió para que le llegara en dos meses. Después se acostó, le pareció como estar viviendo en una novela en la que la chica se enamoraba del vampiro, pero ¿ y si era así ?

Nuestro pequeño secreto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora