Saltar. -:-Jaeden Martell

Capítulo Siete: "Son Zombies Coronel, Zombies"

—¿Estamos viendo lo mismo? — La voz de Finn salió entrecortada.

Pues claro que si.

—¿que esta pasando? — Jaeden sonaba desesperado.

—¿pues que crees que tenemos que hacer? — La voz de Jack estaba entrecortada.

—Tene-ne-ne-mos que entrar— tartamudear no es de mi, pero, Dios que esta pasando.

—¿Estas loca? ¡Claro que no! — Finn grito a lo alto.

—No sabemos lo que esta pasando, joder — No estaba pensando, no no lo hacía.

No correctamente.

—¡PORQUE RAYOS ESTÁN AQUÍ!

Oh no.

—Hu-hu-go, ¿que estas haciendo aquí compadre? — La voz de Jack sonó rara.

En cual quier otro momento me reiria de el pero...

— No pueden estar aquí, maldita sea—Hugo sonaba realmente desesperado.

—Papá no se fue de viaje, mentiroso—me estaba cargando de furia, me mintió.

—¡Claro que si, no seas tonta y largate dé una buena vez! Y todos ustedes también — nos grito Hugo.

—Hey, mi padre tampoco llegó anoche, no creo que sea mala idea ver que esta pasando — la voz de Jaeden me tranquilizó un poco.

En eso algo explotó e hizo que cayeramos al suelo.

—Tienen que irse, ¡ahora! — Hugo corrió a la puerta.

—¡Vuelve aquí, Hugo! — grite a la vez que me paraba.

— ¡_______! Regresa, no creo que sea prudente — Jack tomo mi brazo.

—¿que?, solo se fue, Jack necesito saber lo que esta ocurriendo — estaba desesperada.

Mientras seguía discutiendo con el me puse a reflexionar...

Mi hermano me mintió y se fue corriendo al laboratorio donde no dejan de escucharse gritos.

Mi padre no se fue de viaje como me dijeron, algo estaba mal y lo presentía.

Solo quiero darle un abrazo a mi papá y decirle que lo amo, mi corazón se encoge por las ganas de decirlo y por un mal presentimiento.

— Chicos, miren — la voz de Jaeden hizo que dejara de discutir con Jack

Luz roja comenzó a sonar por todo el laboratorio y comenzó a cerrar con una gran capa de hierro.

—pensé que solo pasaba en las películas — yo también Finn, yo también.

— Esto no es cierto, solo estamos en un mal sueño y cuando me pellizque despertare e iniciaré mi día como normal... —Jack comenzó a hablar rápidamente

En eso un hombre con ojos negros que parecía que era lo único que tenía salto del último piso antes de que terminará de cerrarce la barrera.

Dimos un brinco por el miedo.

Cayó sobre un auto, en eso militares llegan y nos toman a todos por los hombros.

Recuerdo ver que se levantó y eso era poco probable.

—¡EN QUE ESTABAN PENSANDO! —El que parecía ser el coronel nos grito tan fuerte que di un salto tomando la mano de Jaeden.

Gritos sonaban mientras íbamos en la camioneta blindada.

— Toque de queda a las seis de la tarde no más, patrullas en cada esquina de esta ciudad con armas cargadas, no puedo creer que nos estemos enfrentado a esto. — La voz del coronel fue fuerte y con autoridad.

—¿Armas para que? Disculpe —Jaeden apretó más mi mano.

Tenía miedo de la respuesta.
Todos teníamos miedo.

—Armas para lo que esta por venir, hijo. — La mirada del coronel era fría pero se notaba el miedo en ella.

—Aquí, sargento Alberto — sonó por el radio — Aquí sargento Alberto, cambió.

—Que pasa sargento— contestó el coronel.

Tome la mano de Jack que estaba a mi izquierda, estaba temblando.
Mientras la otra mano estaba tomada de la de Jaeden.

—Coronel, son Zombies — ¿qué?

—¿puede repetirlo sargento? —

— Son Zombies Coronel, Zombies.

Oh.