Siento mucho la desaparición, pero es que el viernes, sábado, domingo fueron de comida con mi tía para preparar mi fiesta en la cochera que fue el domingo y el lunes fue recalentado. Luego, ayer se fue la luz de mi casa y ya que no podíamos hacer absolutamente nada porque necesitabamos el Internet (mi mamá para atender a sus alumnos y yo para mi tarea) salimos a comprarme un celular nuevo porque el otro ya tenía sus añitos (con las medidas respectivas) y pues aún no me adapto bien a este jejejeje (aunque es de la misma marca).
Sin más aquí les va el capítulo y pueden hacer sus pedidos en mi tabla de conversaciones o por mensajes.
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Caminabas hacia la finca mariposa después de la reunión con el patrón y dar a conocer a los hermanos Kamado. Realmente no te preocupaba adsolutamente nada, pues parecían ser muy buenas personas.
Al entrar a la enfermería viste a dos chicos y los hermanos recostados en sus respectivas camas y muy adoloridos.
La razón por la que Shinobu te llamó era para curarlos con tu don. Sí, habías nacido con una "maldición" según tus padres y te dejaron a la deriva desde que naciste. Un anciano que era ladrón te hayo y te crió como si fueras su propia hija, sin embargo, él murió por un demonio a tus 6 años y de alguna forma terminaste en la sede de cazadores y con el tiempo desarrollaste una respiración propia; respiración de la luna.
Te sentías muy identificada con esa respiración, pues eras: tranquila, serena, amable y eras una persona muy nocturna.
Cuando todos estaban relajados en sus camas decidiste empezar la revisión.
Un brill blanco salió de tus manos y fue pasando uno por uno mientras tú te mantenías con tus ojos cerrados.
Al terminar les miraste y viste sorpresa y un poco de miedo en sus miradas, así que les sonreíste con calma adsoluta para luego empezar a hablar.
-Soy (T/N) Takumi. Soy la pilar de la luna, también tengo el don de curar personas, no tienen nada que no se arregla con un buen descanso y medicina.
Tomaste las medicinas que dejó, probablemente, Shinobu y se las diste. Al terminar, sentiste una mirada y dirijiste tu mirada al del cabeza de jabali.
-Hola... Mmmmmmmm, ¿ cómo te llamas?...
Este te sorprendió porque saltó a ti te caíste del pequeño banco de madera en la que te encontrabas y diste al suelo con él encima de ti. No te dio miedo alguno y le miraste sorprendida.
-Soy Inosuke Hashibira, recuerdalo muy bien, mujer.
Los otros dos hombres rápidamente te lo quitaron de encima y le reprendieron, él no sabía nada de porqué lo estaban regañando pues para él era muy normal.
