Mis extraños sentimientos | Tododeku

6. Sospechas

Miércoles:

Eran las 8:30 en el reloj de Todoroki. Se levantó somnoliento por lo cansado que estaba.

No pudo dormir muy bien por no dejar de pensar en la noche anterior y en cómo le iba a hablar al peliverde de ahora en adelante.

Se arregló, se peinó, se puso el uniforme, desayuno antes que todos, y se dirigió al salón a las 11:00. En el cual pensó que no habría nadie.

Apenas al tocar el portón de la puerta, sintió que alguien estaba dentro del salón, por lo cual la abrió lentamente notando que estaban Bakugou y Kirishima, sentados en el puesto del rubio, hablando. 

Todo iba bien hasta que Bakugou noto la llegada del bicolor, lo cual lo hizo enojarse un poco por interrumpir la charla interesante que mantuvo con Kirishima.

El rubio solo le miro mal mientras que el otro se iba a su puesto como si nada, le pareció extraño lo calmado que estaba Bakugou con Kirishima, al parecer él era el único que lo mantenía así.

Unos minutos después, el resto de la clase fue llegando poco a poco mientras que se acomodaban en sus puestos. La clase se notaba cansada, al parecer no durmieron muy bien por terminar el trabajo con sus compañeros.

Casi toda la clase se encontraba ya en el salón, pero el más notorio que aún no llegaba. Era Midoriya, algo que preocupo a la castaña y Todoroki.

El profesor Aizawa entro a la clase junto al peliverde, algo que despreocupo a los dos preocupados.

-Bien, buenos días... En la clase de hoy van a terminar el trabajo que comenzaron ayer, recuerden que mañana es el último examen del año dándole inicio al receso escolar. Este examen no se va a tratar mucho sobre la actividad física, sino más sobre demostrar el razonamiento que pueden aplicar en cada una de ellas. Para eso es la investigación de los profesores con quien les podría tocar pelear- dijo el profesor mirando por un segundo al peliverde. El análisis que le ponía a cada cosa, era uno de los detalles más importantes para una pelea- Así que comiencen-

El salón se quedó perplejo, estaban muy cansados para comenzar una actividad hasta el almuerzo, pues últimamente habían perdido varias clases por el trabajo para el jueves y era algo que preocupaba a la mayoría.

Aizawa-Sensei nunca les había dejado tanto tiempo para un trabajo.

Casi todos los grupos se reunieron, el peliverde no era capaz de acercarse al bicolor por todos los nervios que tenía, hasta que el acto que tomó Todoroki lo sorprendió un poco.

Él se estaba dirigiendo a su puesto, era una de las primeras veces en las que el bicolor tomaba iniciativa.

-Midoriya...-

-Todoroki-Kun...- dijo el peliverde mirando hacia abajo

-Entonces... ¿vamos a continuar investigando a los profesores o vamos a confirmar los movimientos que haremos?-

-Yo... ehm...- Pensaba que iba a hablar más sobre lo que había pasado anoche, pero no le molestaba que tuviera en cuenta primero el trabajo- ¡confirmemos los movimientos!-

Los minutos pasaron y terminaron de planear los movimientos, estaban más preocupados por lo que el otro iba a decir que por el mismo examen. Hasta que la campana sonó anunciando la hora de almuerzo, pero ninguno de los dos se levantó de su lugar, ni se miraban. Era como si el piso tuviera algo mucho más importante que admirar.

El bicolor levanto la cabeza junto al otro, como si estuvieran sincronizados.

De repente, un pequeño escalofrió recorrió el cuerpo de ambos, dándoles una sensación extraña que habían sentido la noche anterior, suponían que tenían frió. Después de todo se acercaba el invierno, pero era diferente, era una sensación mucho mas diferente a un simple escalofrió.

La mayoría del salón se había ido a la cafetería, no querían llegar cuando la fila fuera aún más larga, mientras que el pecoso y bicolor estaban ignorando a las pocas personas que aún se encontraban adentro, no se habían dado cuenta de que todavía permanecían Yaoyorozu y Uraraka.

Otra vez iban a ser interrumpidos.

Los dos estaban muy cerca mutuamente, hasta que un saludo pequeño, pero ruidoso para ellos. Lo arruino todo.

-D-Deku-Kun... Hola-

-Todoroki-San-

Ambas estaban un poco diferentes a otras veces que hablaban con entusiasmo, no hicieron comentarios sobre lo ocurrido y decidieron guardar lo visto.

Ambos se exaltaron al ver que ellas estaban en frente de ellos, los dos hicieron como no hubiera pasado nada y chocaron miradas poniendo una leve sonrisa. Demostrando que ya todo estaba bien y los pequeños problemas que tuvieron, ya estaban resueltos.

-U-Uraraka- San...-Respondió.

-Yo... Deku-Kun, ¿Podemos hablar mientras almorzamos?- Dijo un poco nerviosa, le iba a decir la verdad al peliverde, ella finalmente expresaría sus sentimientos.

-Claro...-

Midoriya se levantó de su lugar mientras miraba al otro con una expresión triste, era probable que hasta nunca pudieran discutir sobre el tema o hablar sobre ello sin que los interrumpieran.

El pecoso tanto como la castaña se fueron mientras Yaoyorozu le picaba el ojo en forma de esperanza hacia la castaña.

-Y tú... Todoroki-San, al igual que Uraraka, debo decirte algo-

El bicolor se quedó mirando al piso un segundo sin dejar de pensar en el hermoso peliverde que no salía de su cabeza, en cada momento pensaba en él que no podía enfocarse tanto como antes.

Definitivamente estaba enamorado.

-Si... Vamos- Respondió cuando se levantó.

--------------

Bien...¡Alerta de momentos dramáticos en los próximos 2 capítulos!

Desde aquí, las cosas se van a poner un poco incomodas cada vez.

Hoy si logré actualizar un sábado .aunque casi no tuve tiempo, estoy feliz por eso.

También estoy alegre de saber que hay varias personas que leen esta historia, la verdad estoy muy agradecida por esto.

Sin mas que decir...me despido.

Hasta el próximo capitulo!!