ETHAN

EPÍLOGO

7 meses después.

- ¿Qué quieres comer? - Pregunté a Ethan desde la cocina.

- Hm, no lo sé. Sorpréndeme - Dice abrazándome por detrás y dándome un beso en su marca en mi cuello.

Esa corriente ya conocida me recorre por todo el cuerpo haciéndome erizar y estremecer.

- Bien - Agarré del refrigerador la carne que guardabamos allí.

La coloqué en la encimera y busqué todos los ingredientes.

- Hermosa, se acabó la sangre; mientras tú haces eso te iré a buscar más - Me da un beso en la sien mientras yo comenzaba a preparar la carne.

- Está bien, pero vuelves rápido que esto estará listo en una hora - Dije.

- Claro -

Lo escuché transformarse y salir de nuestra casa para ir a cazar. El lugar se quedó en silencio y solo escuchaba el correr del agua del río de afuera. Sonreí por la tranquilidad pero le concentré en hacer la comida.

Con Ethan hemos construido una cabaña de doble piso, linda y acogedora, junto al río de nuestro lugar favorito.

En este tiempo que llevamos aquí, pasaron cosas. Ethan me marcó, y sinceramente esa fue la mejor noche de mi vida, pero justo antes me pidió ser su novia. Luego, semanas después, conseguí controlarme completamente cuando huelo o veo sangre. Ahora sí, ser una vampiresa no me molesta en nada.

Puedo correr muy rápido, saltar alto y soy más fuerte que antes. Puedo correr a la par que Ethan cuando se transforma, y solemos hacer unas carreras.

Puse la carne en la sartén y esta comenzó a cocinarse.

Mejoré cocinando, y lo hago para no ser tan inútil en esta casa, Ethan suele cocinar pero yo siempre insisto.

Mientras que esperaba por la carne, puse el fideo en el agua hirviendo de la otra olla.

Ahora, cada vez que Ethan necesita ayuda, hablo de cazadores o rogues, sí lo puedo ayudar, y lo hago. Me encanta poder proteger a Ethan de cualquier manera, y no ser una carga pesada para él.

- Y claro que no lo eres, tú eres la mujer perfecta para cualquiera, es increíble que pueda tenerte sola para mi - Ethan da un pequeño mordisco en mi cuello.

- ¿Ya guardaste la sangre? - Pregunté. Él asiente.

- Eso huele estupendo - Dice mirando la carne.

- Gracias - Levanté la mirada y le di un beso en la mandíbula.

Terminé de hacer la comida y Ethan me ayuda a servirla. Yo agarré un vaso y lo llené de sangre para luego sentarnos juntos en la mesa.

- Ethan - Lo llamé, cuando me mira yo sonreí - ¿Pensaste alguna vez en tener hijos? -

- Si es contigo, claro que lo pensé, y también pensé en cómo los haríamos - Dice guiñándome un ojo. Yo sonreí pero me había sonrojado - ¿Por qué la pregunta? -

- Ah no, por nada... es que... - Miré mi comida.

- Beka... - Ethan se levanta y se me acerca, me gira la silla y se arrodilla frente a mi.

- Es que... estoy embarazada -

Sonreí mientras veía su rostro, estaba completamente paralizado por la noticia y eso me causaba gracia. Entonces se levantó hasta mi rostro y me besó con tanta intensidad que apenas y pude seguirlo.

- ¿Es en serio? Diosa, es increíble, te amo, te amo, te amo -

Me reí un poco pero sonreí mucho más y suspiré.

- Sí, es en serio. Lo supe ayer, cuando fui a visitar a tus padres -

- ¿Ellos ya lo saben? -

- Aha, y tus hermanas también -

- ¿O sea que soy el último en saber? Quería ser el primero si pasaba - Infla las mejillas en un berrinche de niño que nuevamente me hizo reír.

- Cosas que pasan - Mencioné encociéndome de hombros.

Él me abraza y hace que nos levantemos para tener un mejor agarre y poder aferrarse a mi por completo.

- ¿Cómo lo vamos a llamar? - Pregunta.

- Hm... estuvimos pensando en eso con tu familia y nos gustó el nombre de Jay, si es niño; y Tara, si es niña -

- Jay y Tara... Me gustan -

Volvimos a sonreír hasta que Ethan apoya su mano en mi mejilla y me besa, esta vez de una manera más lenta; correspondí al instante pero sus manos recorren mi cuerpo hasta que consigue hacerme saltar y enrollar mis piernas en su cintura.

- Aún podemos hacerlo... ¿Qué te parece celebrar esto? - Dice en mi oído con una voz tan hermosa y que me hizo calentar bastante.

- Suena bien para mi - Respondí.

Comenzó a besar mi cuello y a caminar hasta la habitación en donde Ethan me deja sobre la cama para luego quitarse la camisa y acostarse de nuevos sobre mi besándome.

- Te amo, Beka -

- También te amo Ethan -

Fin

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Quinto libro: "Kia"