Descenso al paraíso

Misterio

Komaru decidió retirarse a la cocina a preparar un poco de té caliente... En gran parte para calmarse luego de lo ocurrido, mientras tanto, Touko atendía a la foránea en su sala, cuya mirada parecía más imperturbable que una roca.

Por supuesto, antes de dejarla entrar ya se había presentado: Kyoko Kirigiri, el nombre no se le hacía tan desconocido a la escritora debido a sus... Ciertos problemas con la ley del pasado, si bien no era profesional aún, sabía que se dedicaba a la investigación de crímenes, una detective en pocas palabras, no le agradaba del todo, es decir, en esos momentos no se encontraba haciendo nada malo, sin embargo la sensación de ser investigada no le hacía gracia por ningún motivo.

- Muy bien señorita Fukawa seré directa, no soy mujer de rodeos y probablemente usted tampoco – Con calma, la observó sentarse en su sofá con la delicadeza digna de una bailarina, durante un par de segundos, Touko sintió una envidia indescriptible... Así que en el mundo existían chicas así, huh – Hace un par de meses se presentó un incidente en el domo, bastante caótico, no creo que deba explicar demasiado, fue noticia como por una semana entera – Su voz no denotaba ningún titubeo perceptible, de hecho, a duras penas demostraba emoción alguna – A pesar de nuestras investigaciones, no hemos podido encontrar al responsable principal, no obstante tenemos pistas que nos llevan a algunas personas.

- Vale ¿Y yo tengo qué ver con eso por qué...? – Mierda, en verdad empezaba a sentirse nerviosa ¡Ella no tenía nada que ver con ese incidente! De hecho, Komaru había sido una de las afectadas en esa ocasión, y si ella hizo acto de presencia fue simplemente para rescatarla ¡Nada más! Si esta chica pensaba ella estuvo de algún modo involucrada, pues estaba muy equivocada.

- A eso iba – Aun sin demostrar expresión alguna, la chica llevó uno de sus largos mechones plateados detrás de su oreja, cruzando una pierna mientras continuaba con su relato – Necesitamos su ayuda.

- ¿... Ah? – Ok, aquella conversación no fue al lugar que ella pensaba que iría, lo que la terminó de sacar de su zona de confort.

- Entiendo su confusión, pero vera: las cámaras registraron su presencia en el lugar, tengo las pruebas, todas las capturas del vídeo donde usted aparece se encuentran en mi móvil – Por un demonio, en verdad no se iba con rodeos – Y... Como podrá suponer en este momento, debido a su historial no puede quedar libre de culpa, a menos que coopere con nosotros.

- ¡Espera! No estaba allí ayudando con todo ese caos ¡Estaba allí porque necesitaba ayudar a alguien!

- Cálmese por favor, pese a la que pueda usted creer, la verdad no pienso que esté involucrada, es decir... Esto fue un acto abierto de terrorismo, nada parecido a sus actos anteriores, siendo movida por situaciones pasionales, y pendiendo de un hilo su actual educación, dudo mucho que simplemente se hubiese involucrado en un acto de esa índole - ¿Entonces por qué estaba allí diciéndole todo esto? Obviamente esto iba a un lugar que no le gustaba – Pero mis sentidos no son lo suficiente para convencer a mis superiores, o a mí misma en todo caso, así que tendrá que poner de su parte para resolver esta situación.

- O sea, básicamente me estas obligando a demostrar mi propia inocencia.

- Captas rápido, supongo que puede verse de esa manera.

Mientras el ambiente se tornaba más tenso, de la cocina regresó la figura tranquila de la castaña, cuya presencia parecía ser suficiente para retornar a la calma la creciente ansiedad de Touko, en sus manos reposaba una pequeña bandeja con tres tazas pequeñas y algo humeantes.

- ¡Está listo el té! Tomen con cuidado que está caliente, a ninguna le cae mal la menta ¿Verdad?

- No, gracias – La detective decidió que era seguro probar aquella bebida con más rapidez de la que alguien con un puesto como el que ella ostentaba debería hacerlo, pero por algún motivo, Touko sentía que sabía más que lo que dejaba entrever. Tomando la pequeña taza entre sus manos, analizó a la menor de arriba abajo - ¿Esta ella involucrada en la situación? De lo contrario, no creo que deba escuchar nuestra conversación.