𝑫𝒊𝒂𝒓𝒊𝒐 𝒔𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕𝒐. (𝕊𝕥𝕒𝕣𝕜𝕖𝕣)

XV

Final.

Llego el día que Tony eligió para vernos, realmente no podía con los nervios, me sentía tan ridículo, parecía que mi corazón saldría de mi pecho en cualquier momento y tan solo estaba caminando para encontrarme con él, esto solo comprobaba lo jodido que estaba, pero es que yo quería, quiero estar jodido, pero solo por él.

Me cito en un lugar en que ya habíamos estado antes, pero no sé si fue por lo que paso o simplemente el lugar lucio más bonito que antes.

Al llegar no vi a Tony, supuse que se le había hecho un poco tarde, decidí sentarme debajo de un árbol, y observar a las personas que pasaban para distraerme un poco y no estar tan nervioso, por andar pensando de más no me había dado cuenta que estaba sentado debajo del árbol donde estuve con Tony en una de las primeras veces pasábamos el día juntos, es un árbol especial.

Tony no tardó mucho en llegar, lo vi caminando hacia mí, de nuevo los nervios se apoderaron de mí, es que Tony se veía tan bien, o sea siempre se ve bien, hoy lo veía aún más atractivo, y no es para menos, llevaba unos jeans que se ajustaban a sus tan bien formadas piernas, una camisa negra y una chaqueta de cuero, se me hizo agua la boca tan solo verlo.

Cuando lo tuve frente a mí fue peor, estaba muy nervioso, trate ocultarlo, pero no resulto muy bien, él dijo que cerrara la boca que ya sabía que era irresistible pero que aún no era momento, bueno era solo él, siendo él.

Tomo su lugar a mi lado, dijo que seguro yo tenía muchas preguntas y que me debía una explicación. La verdad es que no sabía que preguntar, solo deje que hablara y dijera lo que tenía que decir.

Primero se disculpó por como actuó cuando le confesé mis sentimientos, dijo que se sentía confundido que no supo que decir, y por eso cuando pensó bien las cosas decidió que se quería arriesgar por mí.

Que las salidas en realidad no eran planeadas, todo era muy espontaneo, pero que se la pasaba muy bien, le gusta mi compañía y se empezó a dar cuenta que cuando no me veía me extrañaba bastante. Mi corazón ya estaba latiendo muy rápido. Lo que si fue planeado fueron todos los regalos que me dejaba cuando era mi admirador, en cada salida ponía total atención, para captar lo más que podía, porque quería verme sonreír, y lo lograba cada mañana, en ese momento por fin pude hablar, le dije que me llenaba el corazón cada vez que veía algo, porque sabía que en el mundo exterior existía alguien dispuesto amarme.

Se levantó y me ofreció su mano para hacer lo mismo, cuando estuvimos de pie se posó frente a mí, me tomo de las manos mirándome directamente a los ojos y dijo —Peter, me gustas mucho, de verdad, me gustas—.
Podía morir por la explosión de sensaciones que viví en ese momento, espere tanto tiempo, tanto tiempo para sentir un amor diferente, yo tenía amor, mucho amor, tenía amigos, familia, pero jamás había visto tanto amor en los ojos de alguien más, podía morir ahí mismo, moriría siendo feliz.

Nos quedamos mirando fijamente, una sonrisa se me escapo, no podía pedir nada más en este día que ya era perfecto.

Tony tomo mis mejillas entre sus manos, pego su frente con la mía para terminar en un beso, un beso tan dulce, casto, sus labios son tan suaves, parecían encajar perfectamente con los míos, definitivamente era un gran día, un día que se quedaría en mis recuerdos para siempre, no necesitamos decir nada más, todo estaba claro, todo ya había sido expuesto.

Cuando rompimos el beso una pequeña gota cayó sobre mi frente, el día había estado muy soleado, no se esperaba una lluvia.

Nos volvimos a mirar y sonreír, cuando la lluvia cayó más fuerte sobre nosotros, tome su mano para salir corriendo, mientras nos reíamos como dos locos, totalmente empapados nos besamos una vez más.

Una vez leí que cuando estas con tu alma gemela, tu destinado, ocurrían cosas extrañas, como la caída de una hoja sobre ellos, el inicio de una lluvia inesperada. Me gusta creer que fue eso y que nosotros siempre nos íbamos a terminar encontrando.