𝐕𝐈𝐈

6.5K 522 71
                                    

𝐕𝐈𝐈 : Carta de Amor
꧁____________________꧂

--Será divertido--insistió Prissy

--No sé si pueda... Tengo que ayudar en casa

--Oh, vamos, pueden cenar en la nuestra a mamá no le molestará--dijo Jane con una sonrisa--además lo de Billy y tu hermana se tiene que hacer oficial

Fruncí el ceño levemente pero lo borré de inmediato, todos se habían enterado de mi hermana y Billy, los únicos que sabían la incomodidad que me producía eran Moody, Charlie y Cole, eran los únicos que me conocían.

--Papá llega tarde después de trabajar

Prissy se miró con su hermana

--Le hemos hablado a papá y... Creemos que puede darle un trabajo a tu padre en la empresa, trabaja menos horas y la paga sería más alta--dijo Prissy con una sonrisa

--¿Es enserio? --pregunté sin creerlo, a pesar de tener 13 años podría apostar a que me interesaba más los negocios de mi padre que a Adelaida, ella seguía viviendo en el mundo de sus sueños

--Claro que sí --dijo Jane--por eso sería bien que viera a casa tu padre y hablarlo

Lo dudé por un segundo pero, no perdía nada con internarlo

• • •

--Padre, por favor, es un oferta demasiado buena...

--Hija, no estoy seguro, que pasa si no me aceptan, no puedo renunciar

--Solo... Asiste a la cena, no te pido que renuncies, sí te convence renuncias... Quiero pasar más tiempo contigo padre

Desde que mamá se fue me di cuenta de que las personas se van de tu vida sin siquiera anunciarlo, aquel día me prometí pasar más tiempo con las personas que quiero

--Hazle caso a la niñita--comentó Adelaida quién tomaba una manzana e iba a su habitación-- sino te lo recordará toda la vida

--Además quieren hablar contigo sobre Billy Andrews

Adelaida paró en seco y volteó a mirarnos

--Alyssa--dijo en forma de regaño

--¿Billy Andrés? --preguntó mi padre desorientado --¿Qué edad tiene?

--No, no, yo no padre... Tiene 15 años al igual que...

--Alyssa--repitió mi hermana

Mi padre no dijo nada solo asintió

--Yo... Hablaré con mi jefe...

Asentí con una sonrisa y subí a mi habitación pero al escuchar la puerta principal cerrarse me dirigí a la de mi hermana.

--Adelaida --llamé a la puerta

--¡¿Qué?!

--¿Puedo entrar?

--No, gracias

Bufé y tocaron la puerta

Bajé las escaleras de dos en dos y abrí la puerta

--Pará usted, señorita--dijo el cartero mientras depositaba una carta en mis manos

Entré a casa y mi corazón se aceleró al ver la legible letra de Gilbert Blythe, hasta que llegué al destinatario

Adelaida Dunn

𝑬𝒍 𝒍𝒂𝒈𝒐 𝒅𝒆 𝒂𝒈𝒖𝒂𝒔 𝒓𝒆𝒍𝒖𝒄𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔 - Gilbert BlytheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora