•16•

2.9K 328 82
                                    

◇◇◇


Kirishima estaba caminando por aquel pasillo que ahora parecía tan corto. Sus pasos se volvieron pesados cuando estuvo cerca de su destino.

Aun así apretó sus puños y camino con seguridad. No dejaría que aquello lo jodiera, estaba listo para oírlo, escuchar cual era su puta explicación.

Kirishima no era un cobarde, no se echaría a correr solo por el miedo al rechazo, el no era así. Y no dejaría que Katsuki lo cambie.

Sintió su respiración hacerse pesada cuando vió la puerta de aquel salon abrirse dejando salir a todos los estudiantes.

Entonces todo su enojo volvió a llenarlo, cuando vió al causante de las heridas en su corazón estar siendo abrazado por una bonita chica. Entonces sintió asco, asco de si mismo por el sentimiento tan tóxico de celar a alguien que no lo amaba y que al parecer no le importaba.

Observo como el cenizo apartaba bruscamente a la chica, lo vió decirle algo, y que la chica saliera de ahí no sin antes gritarle algo que a su parecer parecía un insulto.

Cuando sus ojos se encontraron con los contrarios se tenso por completo. Trato de relajarse cuando lo vió acercarse pero eso era imposible.

__Eiji-...

__Solo vengo a decirte que terminamos.

El lugar quedó en silencio.

__¿Que mierda?

__Me engañaste, es lo justo.

__¿Justo?¿¡Justo!?¿¡Te estas escuchando Eijiro!?

El pelirrojo cabreado se aparto bruscamente del cenizo cuando este lo tomó de los hombros.

__¡Si me oígo!¿¡Que fue lo que creíste Katsuki!?¿Que volvería a tus brazos después de que te vuelva prácticamente follarte a esa chica? Deja de joder, eres un idiota__murmuro__. ¡Me has roto el corazón imbécil!

Entonces salió a correr sin esperar respuesta, simplemente soltando toda aquella mierda siendo cegado por su dolor.

Había huído, se sentía tan patético.

El mayor grito, cuando el susodicho empezó a correr con una velocidad impresionante. Intentó alcanzarlo pero el pelirrojo había desaparecido por completo. Busco por toda la Universidad, con una esperanza de que aún siga aquí.

Pero como la suerte no estaba de su lado, no pudo encontrarlo. Suponiendo que había escapado a su escondite.

Dejo salír un grito de frustración, acompañodo por un golpe a un pobre casillero de quien sabe quién. Estaba arto, el quería arreglar las cosas con el pelirrojo.

El quería a ese bello pelirrojo con el, quería volver a ver esa sonrisa puntiaguda, quería volver a tomar ese cuerpo que tan loco lo volvía.

Katsuki quería aclarar la situación que Eijiro había visto esa noche. Pero sabía, Katsuki sabía que fue su puta culpa por no haber corrido a esa idiota de su casa.

Se sentia una mierda por hacer llorar a Eijiro, a ese chico especial, a su amor, a su pequeño tiburón quien no merecia más golpes de la vida.

Era una porquería porque el había prometido cuidarlo y protegerlo, pero el mismo fue quien lo lastimó.

Necesitaba solucionar esto. Porque el no estaba dispuesto a perder Eijiro.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
The Redhead From The Sex Shop ||𝙱𝚊𝚔𝚞𝚜𝚑𝚒𝚖𝚊||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora