The Redhead From The Sex Shop ||𝙱𝚊𝚔𝚞𝚜𝚑𝚒𝚖𝚊||

•Final•

◇◇◇

Katsuki Bakugo estaba que no podía más de los nervios, su corazón parecía que en cualquier momento iba a salír de su pecho para irse corriendo a esconderse, sus manos parecían una fuente de tanto sudar, hasta como respirar se le estaba olvidando.

Miraba alrededor tratando de encontrar entre todas esas caras a la cual tanto amaba y tanto lo calmaba, pero para su desgracia ese bello rostro no se encontraba en ese lugar.

Apretó sus manos convirtiéndolas en puños, miro hacía el techo blanco de aquel lugar encontrándose con una bella madera, ¿eso era madera de caoba?

Su intento de distraerse se fue a la mierda cuando la música melódica proveniente del piano que tocaba un chico en aquella esquina de la Iglesia se hizo presente.

Todos los invitados se empezaron a parar de sus asientos para ver a la gran puerta de madera la cual aún seguía cerra.

Y si Katsuki creía que estaba por morir de los nervios, ahora ya se encontraba en medio de un paró cardíaco. Inconsciente de lo que su cuerpo hacía una mano fue a parar a su pecho, sintiendo los desbocados latidos de su tonto corazón.

Nunca había estado tan nervioso en toda su vida como se encontraba ahora. Pero cuando esas puertas se abrieron dejando ver al hombre culpable de todo su corazón se derritio.

¿Qué debía hacer? Eijiro era todo un ángel con ese traje blanco puro y ese ramo de Magnolias, no sabía que había hecho para merecer a tal persona como ese hermoso ángel, pero no cambiaría nada.

Pronto el tiempo se detuvo cuando sus ojos se encontraron con esos dos brillantes rubis. Y por fin sintió tranquilidad, paz interna, como sólo Eijiro lograba hacerlo sentir.

Después de siete años de relación con Eijiro, después de a ver terminado la Universidad, empezado una carrera profesional, de mudarse juntos, de pasar sus días felizmente juntos, después de a ver planeado toda una vida juntos. Por fin.

Por fin iban a cumplir esos sueños, hoy era el día en el que Eijiro se convertiría en el esposo de Katsuki Bakugo, hoy serían los señores Bakugo.

Eijiro aún recuerda como hace unos meses atrás Katsuki le pidió matrimonio en plena media noche. Después de un largo día de trabajo en el hospital, una fiesta sorpresa apareció frente a sus ojos cuando entró a su casa.

Todos sus amigos se encontraban en su nido de amor, todos estaban felices y Eijiro no entendía el porque, hasta que fue arrastrado a la sala donde lo esperaba un nervioso Katsuki, el cual hizo callar a todos de un "¡Silencio inútiles!" Logrando hacer reír a todos, pero la risa de el pelirrojo se detuvo al ver como el rubio se arrodillaba frente a el. Aún lo recuerda todo.

✤Flashback✤

__E-Enrealidad no se lo que estoy haciéndo...¡no! Por un carajo claro que se lo que estoy haciéndo, estoy apuntó de hacer lo mejor que e hecho en toda mi puta vida.

Eijiro sintió derretirse cuando Katsuki tomo su mano y lo miro a los ojos.

__Eijiro...yo simplemente te amo, te amo tanto como no tienes idea, si tu me dieses una orden yo la cumpliría porque tu eres mi diosa.

El rostro del susodicho se puso rojo al escuchar esas palabras acompañado de las risas de sus amigos.

__Mi vida sin ti a estas alturas no tendría sentido, porque Eijiro...tu eres todo lo que me complementa, tu eres todo para mi Eijiro, y es por eso que soy un egoísta que sólo te quiere para el.