Newt, para un estadounidense como Jacob, era un inglés raro. Porque no entraba en el estereotipo arraigado de lo que todos tenían de un inglés, aunque tenía algunos aspectos que supuso era normal en cualquier inglés. Muy pocos, pero los tenía.
Uno de ellos era el anticipar su visita y llegar puntual. Así que cuando un día antes Newt le enviaba un mensaje que aparecía espontáneamente en su mesa de noche con aquella cuidada caligrafía para anunciarle que llegaría de visita a su pastelería. Siempre diciéndole si llegaría solo o con Queene y Tina. Por ello, Jacob siempre le daba esos días libres a sus dos ayudantes en la panadería, cosa que en definitiva no molestaba a los jóvenes asalariados.
Sin embargo, cuando Newt decía que solo lo visitaría él no era del todo cierto, porque siempre llegaba con alguna criatura nueva que no podía llevar a la MACUSA por una u otra razón. En esa ocasión, siendo las dos de la tarde el no-maj sacaba la tercera charola de tartaletas de manzana dispuesto a decorarla con manzanas acarameladas cortadas en forma de unicornio. No sabía si existían pero le parecía lindo a las niñas que iban con sus padres a la panadería, así que decidió seguirlos haciendo.
Un golpe llamó su atención proveniente de la puerta trasera de la panadería que llevaba directo a un callejón; consciente de que era Newt, abrió la puerta dejando pasar al magizoologo y a su invitado que era nada más y nada menos que un unicornio.
-¡Por Dios, Newt! ¿De dónde lo sacaste? –preguntó acelerado.
-Lo encontré en una bodega en el puerto de Nueva York, estaba asustado y herido. No podía dejarlo ahí –dijo acariciando su hocico y frotando su nariz contra la de la criatura.
-¿Y no se te ocurrió llamar a Tina? –
-Si lo hubiera hecho los traficantes hubieran atacado antes de que llegaran y Daysi habría salido herida –la campana de la panadería se escuchó en ese momento, Jacob entró en pánico con un unicornio en su cocina dividido con la tienda apenas con una cortina. El unicornio, llamado dócilmente por el aroma a azúcar en el mandil del panadero se acercó comenzando a masticar y lamer la tela.
-Newt –reprendió en voz baja a su amigo.
-Le agradas –la amplia sonrisa del mago le provocó dolor de cabeza ¿acaso no se daba cuenta de la situación?
-Ve a atender al cliente mientras yo intento quitarme a Daysi de encima –dijo empujando levemente al animal pero éste se veía empecinado en comerse la tela del panadero quien tenía restos de azúcar, y caramelo con manzana. Newt se mostró nervioso pero aceptó. Salió a atender a aquel que haya entrado en el local.
-Bienvenido a Jacob's Bakery –
-¿Newt? –Jacob juró que escuchó un chillido provenir de su amigo, vio por una rendija de la tela que separaba el local de su cocina localizando a un hombre de traje impecable y gabardina negra cubriéndolo a pesar de que el clima no era tan frio afuera para ello, aunque tal vez él nunca tenía frio debido al calor constante de los hornos -¿Trabajas aquí? –
-Yo... -Jacob conocía ese rostro, pero no al hombre. Solo por palabras de Tina y Queene
"El director Graves es el hombre más fuerte de la MACUSA, por su ausencia llegamos a ese nivel de descontrol el año pasado. Ha sido mi ídolo desde que soy aprendiz de auror" le dijo una vez Tina en una cena en su casa.
"El director Graves es un hombre atormentado, estar cerca de su mente por mucho tiempo pondría triste a cualquiera. Pero es muy orgulloso y realmente me parece increíble su nivel de control ante situaciones de peligro" dijo Queene una vez, no podía negar que llegó a sentirse algo celoso por esas palabras.
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Lo Que Nadie Dice
FanfictionHay cosas en la MACUSA que todos saben, pero que nadie dice. Una de esas cosas es la manera en que Percival Graves ve a Newt Scamander o la forma en que Newt se sonroja cerca de Percival. Es algo que todos saben pero nadie dice... aunque alguien deb...