capitulo 2

616 64 56
                                    

 holiii gracias po apoyarme con esta idea <3<3 los adoro muchooo . EstherCast5 te dedico el capitulo, gracias por dejarme tu hermoso review<3<3 El capitulo lo narra Yuki <3

 EstherCast5 te dedico el capitulo, gracias por dejarme tu hermoso review<3<3 El capitulo lo narra Yuki <3

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Un día, dos días, tres días, daba igual, siempre era la misma rutina, las mismas cosas. Aún permanecía este malestar llamado oscuridad.

Habían momentos en donde quería hacer muchas cosas, me sentía activo, dinámico, con ganas de devorarme al mundo pero lamentablemente hace bastante tiempo que mi autoestima estaba por el suelo. No tenía ganas de relacionarme con nadie, solo quería dormir, no obstante, debía cumplir con mis obligaciones, no quería preocupar a nadie, solamente anhelaba que el día acabase así podría volver a mi cama otra vez.

Con aquello en mente desperté a Hiiragi, quien se encontraba durmiendo boca arriba con toda la saliva escurriendo a un costado y con claras señales de que lloró en la noche.

—No quiero ir a la escuela— susurró triste mientras yo no tenía ganas de soportar sus berrinches.

—Pues yo si  y agradecería que te muevas— luego de mi advertencia ambos bajamos para tomar un café y posteriormente ir a la escuela.

—¿Llevarás tu guitarra? Pensé que no estabas tocando— su vista fue a parar  en mi Gibson, la cual me había costado mucho dinero y  esfuerzo.

—Que no esté en la banda no significa que no practique— mi voz sonó algo molesta, con reproche.

—Sabes que cuando estés mejor volverás. Luego de la competencia nos centraremos en modificar las canciones. No te deprimas— ¿Qué no me deprima? Ya estaba en la mierda y ninguno se daba cuenta.

—Descuida. Mejoraré por mi cuenta—diciendo eso ambos salimos de mi hogar y nos encaminamos a la institución, acompañados por el ruido de las quejas y lamentos de Hiiragi.

— Ese idiota no me envío ningún mensaje. Lo voy a matar, no, lo voy a descuartizar— no sabía lo que era estar enamorado, no comprendía nada de ese mundo.

— Pues deberías hablar tú con él. Tampoco es tan grave— mi humor no era el mejor y escuchar sus sollozos no era para nada agradable.

—¡Eres un insensible! No quiero verte hoy—sin más apresuró el paso y me dejó solo, otra vez, como estaba acostumbrado a estar.

De verdad no anhelaba hacer nada, me sentía muy cansado, así que modifiqué mi rumbo y entré a una pequeña cafetería. A penas entre note que dos personas hablaban sin parar de algo muy importante.

—¡Seguro ganaremos este año! Con la inclusión de Mafuyu a la banda y con Uenoyama tan inspirado no podremos perder— ¿Mafuyu? ¿Acaso conocía al pequeño cantante?

— Me encanta cuando te emocionas—el contrario le  acomodó un mechón al chico rubio de largo cabello,quien se sonrojó fuertemente y luego me observó ya que me había sentado cerca de ellos por falta de lugares.

—¿Qué vas a pedir?— dijo con una voz serena, una voz que transmitía paz.

—Solo un café— respondí derrotado. No es como si pudiera pedir otra cosa. Una botella de Alcohol no me vendría mal.

—De acuerdo— sus manos se movían ágilmente preparando aquella infusión mientras su compañero,con quién charlaba segundos atras, me veía curiosamente.

—Oye...te ves terrible— estaba bien, muy bien ¿Que le hacía pensar aquello?

—Me encuentro perfectamente— decidido a ignorar a aquel sujeto saqué mi celular y me dediqué a ver acordes nuevos que tenía que aprender.

—¿Tú no eres Yuki? ¿El guitarrista de la banda que está arrasando?— si, ese era yo, o por lo menos mi antiguo yo.

—Me echaron de mi banda así que no pertenezco a ningún lugar— quien me preparaba el café allá escuchar aquelllo apoyó efusivamente mi bebida y sonrió.

—¡Deberías unirte a Given! Eres bueno y como segundo Guitarrista y corista de Mafuyu nadie podrá vencernos—ambos parecieron emocionados con la idea ya que de repente me rodearon y sin esperar me mostraron un video de una actuación.

Eran increíbles y yo no lo arruinaría.

—Lo siento...yo...no sirvo en este momento— no poseía ningún talento, estaba destrozado, sin ánimos.

—Me presento, soy akihiko y el es Haruki. Puedes confiar en nosotros si quieres y contarnos que te hace pensar eso— ¿Confiar en alguien? ¿Aquello era posible?

—No lo sé. Prometo que lo pensaré— tal vez no era tan mala idea.

—Pues te daremos tiempo. En la banda estamos nosotros y  los demás integrantes son Uenoyama Ritsuka y Mafuyu Sato— los conocía, los había visto el día anterior y yo no pude apartar mi vista del chico de dulce voz.

—Van a mi escuela. Se quienes son—susurré bebiendo mi café y entre charla y charla el tiempo pasó y la tarde llegó sin que yo me diese cuenta.

—Oh mira, allí vienen ellos—al voltear observé a la pareja ingresar a la cafetería. Sus manos estaban unidas, sus sonrisas eran únicas.

—Yuki— susurró Mafuyu  mientras Uenoyama me observaba algo irritado.

—¿Tú que haces aquí?— pronunció el guitarrista sentándose junto a mí.

— Vine por un café y quizás me una a tu banda— sus ojos se agrandaron por la sorpresa y posteriormente el enojo lo invadió por completo. 

—Si Ue. Yo lo invité y Akihiko estuvo de acuerdo ¿Tú que opinas Mafuyu?— Haruki ignoro completamente la opinión de Ritsuka mientras yo reía por dentro.

—Es una gran idea— dijo el pequeño de ojos castaños. Era tan perfecto.

— Ya hay un guitarrista y ese soy yo. Además solo estorbaría, por algo su banda decidió expulsarlo y no podemos darnos ese lujo— ¿Era necesario que me recordaran la mierda que era? Por un momento fui feliz pero no puedes escapar de tus pesadillas por mucho tiempo.

—Todos merecemos una oportunidad. No seas así Uenoyama. Tú también apestabas antes de Mafuyu— Akihiko me había defendido y yo le estaba realmente agradecido.

—Si me disculpan debo irme. Muchas gracias por el café Haru. De verdad es el mejor— tomando mi guitarra quise salir del establecimiento pero una pequeña mano me detuvo.

—Debes estar aquí. Así la banda será mejor— sus ojos no mentían, él era sincero y aquellas palabras significaron tanto.

—Está bien. Si tú me lo pides no puedo negarme— con una sonrisa intercambié contactos con Haru y luego  Kaji, el baterista, me llevó a mi hogar en su moto.

—Oye chico, de verdad cuentas con nosotros. Ahora eres parte de la banda y perteneces a la familia— ese día mi vida había cambiado.

—Lo haré. Gracias— ese día no sentiría tristeza. Ese día no me castigaría. A ese día lo recordaría como uno de los más felices.

 A ese día lo recordaría como uno de los más felices

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Basura descartable (Given)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora