Jefecito - [Furry yaoi]

"Arrepentimiento"

El mapache estaba en una habitación algo molesto por la actitud.

– Tu mapache, anda a ver a esos jotos de mierda, voy a ver si puedo sacar algo de provecho con un rescate – dijo algo molesto.

Al notar que el dragón se había largado, soltó una lágrima y un golpe en su pierna...

– ¿Porque me tuve que enamorar de ti? ¿Por qué? ¿Por qué siempre pensé que cambiarías? – dijo levantándose ir al lugar de los secuestrados.

Observando los detenidamente y la trituradora que estaba destinada a acabar con ambas vidas.

– Recuérdame... – un susurró invadió el oído del mapache.

– ¿Uh? ¿Qué mierda dijieron? – ambos lo miraron confundido.

– Hablen estu... – fue interrumpido.

– No me olvides... – volvió a escuchar aquel susurró, parecía a un niño...

Volteo detrás de él para ver a un pequeño mapache con los ojos vacíos y un color negro profundo.

Aquel escena fue tan traumática que Randal comenzó a recordar su pasado...

El estaba en las mismas condiciones que la pareja, pero en vez de novio era su hermano menor, la familia entera había sido usada como rehenes, atados y amordazádos bajo un mostrador de una tienda. Al notar que la policía no obedecía a los ladrones, dispararon a cada uno de la familia, a excepción del mapache llamado Randal.

Cuando iban a dispararle la policía atacó, liberando al pequeño mapache quien esté estaba llorando a más no poder, no quería volver a repetir aquel momento ni tampoco al sentir ser secuestrado...

En lágrimas y jadeos, aquella ilusión de su hermanito estaba desvaneciéndose. Miro a su lado, vio a la pareja algo preocupada, por un momento un destello en su cerebro los hizo ver cómo su madre y padre a asustados.

Parpadeo para luego sacudir la cabeza.

– ¿Qué estoy haciendo? ¡Lo siento mucho, no se porque no les avise... Yo... Yo en serio lo siento! – dijo para comenzar a quitarle la mordaza y desatar las manos de mi hermoso tigre.

– Si, eso, gracias, gracias chico – dijo mi tigre emocionado.

De pronto un disparo se escuchó. Randal cayó al suelo, se fue por fin con su familia nuevamente. Jack estaba viendo el cuerpo.

– Ay Randal... Tan idiota como siempre... Creí que eras mi mejor amigo... Pero veo que me traicionaste – bajo para activar aquella torturadora, subió de nuevo y nos miro a ambos.

– Pues... Yo queriendo dejarlos vivir más tiempo pero... lo siento – apunto a la cabeza de mi tigre y recargo el arma.