Éxtasis

Capítulo 10

Luis y Pablo, han decidido juntarse hoy para tomar el sol, y de paso, darse un baño en la piscina.

Ambos saben que la nicotina no es nada buena,de hecho, a ninguno le hace especial ilusión la gente fumadora, pero, no pueden evitar la vieja costumbre de fumar juntos.
Por lo cual,cada uno coge un cigarro y se lo lleva a los labios, mientras que se tumban en las hamacas.

Tras un silencio cómodo más que usual entre ellos, Pablo, habla.

- Oye,¿y tú amiga?
- ¿Mel?-Pablo asiente-¿Qué pasa?
- ¿Lleva mucho aquí?
- Llegó hace unos días.Es la hermana de Hugo ,¿lo sabías?.- responde Luis.
- ¿Enserio?-dice el malagueño atragantándose con el humo-joder, ahora encaja todo, me llamó para ver qué tal estaba y me contó que su hermana venia aquí para trabajar. En las empresas Malen. Pero claro, no tenía ni idea de que era ella.- añade sin salir de su asombro-¿Y dónde está viviendo?.- añade de nuevo.

-Pablo, para.¿Estás interesado en ella? .- pregunta Luis, bastante serio.-Si así es, no te lo pienso permitir,Pablo.
Es mi mejor amiga y no quiero que le hagas daño. No es como tú, y no quiero perderla por lo que puedas hacer.
- No,Luis, para tú.- dice Pablo, reincorporándose en la hamaca-
No quiero nada con ella. Te he preguntado porque es mi empleada y supongo que tendré que saber de ella, nada más.
- Más te vale porque no quiero ni un mínimo tonteo eh.- dice Luis, dando un pequeño golpe a Pablo.

- Que sí Luis, no es mi tipo.
¿Y tú con la secretaria qué? - le pregunta,haciendo que Luis inconscientemente, sonría.
- Se llama Aitana, guapito, y no sé.
Es raro. Me atrae muchísimo,pero ella no quiere nada, es que ni mirarme vamos, y eso, me engancha más.
- Te pone, pero además, te gusta.
- No. Rotundamente no. Sabes que ya no me enamoro, al igual que tú.
Es solo atracción, ganas de fundirme con ella, nada más.- responde Luis mientras se echa hacia atrás-
Pero es que joder, tanta frialdad, me vuelve loco.
- Eres un pavo, Luis. A eso se le llama amor, o eso dicen.
- No. Además, ¿tú que sabes de eso?. Eres más frío que un dia de invierno,majo.- dice Luis mientras guiña un ojo.
- ¡Luis, déjalo ya, eh!.- dice Pablo riendo.-Bueno que, ¿nos damos un baño, sirena?
-Anda vamos. Si sabes que te emblandezco, príncipe.

Tras tantas tonterías y una conversación supuestamente "profunda", ambos no aguantan más y rompen a carcajadas.

Mientras tanto, Mel y Aitana, están tiradas en el sofá, cada una con su respectivo móvil.

- Meeeeeeel.- dice Aitana, moviendo a Mel, la cual, está casi dormida del aburrimiento.
- Dime.- dice Mel sonriéndola.
- No viene a cuento, pero, ¿te diste cuenta como te miraba tu jefe en la cena?.
No te lo he dicho antes porque no me había acordado, pero ahora se me ha venido a la mente.
- ¿Qué?, ¿A mí?. No.
- Melanie, te estaba mirando, y fijamente. No te quitaba ojo.
- Pues no lo sé. Básicamente porque, cuando Luis me lo presentó, lo miré, y me pilló, entonces ahí, no lo volví a mirar. ¡Que vergüenza!.- dice Mel mientras se sonroja.
- Eres demasiado bonita.- dice Aitana mientras se ríe con todas sus fuerzas.-¡Anda que no es guapo! Tú pedías un buenorro a gritos, y Pablo, ha aparecido.
- Si,si, y consigo, Luis.- dice Mel, que es ahora la que se ríe.
- ¡No empieces!
No lo aguanto enserio. Va, y me dice que voy muy guapa. Pues claro que si lo voy, ¿crees que necesito que un machito me lo diga?
- Pues bien que te gusta el machito, señorita sonrisita.
- Se me escapó, Melanie. No me martirices.
- ¡Qué no me llames Melanie! ¡Por Dios! .- dice Mel, tirándole un cojín.-Dejando a un lado las bromas. Es mi jefe, y no me vería capaz. Además, él, es como que muy atrevido ¿sabes?. Ósea, mas bien, muy seguro, lo muestra perfectamente. Y yo, soy todo lo contrario y no sé, no creo que alguien así se pare conmigo, ya sabes, puede tener a la que quiera, igual que su mejor amigo, Luis.
- Pues yo vi que solo te miraba a ti, Mel.- dice Aitana, levantando las cejas repetidas veces.
- Deja a Pablo. Vamos con Luis.
- Que sí Melanie, es muy guapo, y atractivo. Pero opino lo mismo que tú, puede tener a la que quiera, y yo, soy muy básica.
- Eres un total pibon, y se ha fijado en ti por eso.
Luis nunca insiste, y contigo lo hace, y eso a ti, te gusta.
Os conozco, y os atraéis demasiado, lo sé. Además me lo acabas de admitir, por lo cual, no concibo una discusión.- dice Mel, sacando la lengua.-Ahora, vamos a acurrucarnos para dormir. Mañana trabajamos, bonita.
- Mel, han pasado tantos años, y me sigo riendo contigo tanto como en nuestro primer día de instituto juntas.- dice Aitana riéndose, y negando con la cabeza.
- Oh Dios mío, ¿te acuerdas cuando entramos a el instituto, y me empezaste a mirar raro porque te sonaba?.- dice Mel riéndose aún más.
Nunca superaré eso. Yo te miraba y me preguntaba ¿porque me mirará tan raro?.
- ¡Madremia!- dice Aitana mientras continúa riéndose.
- Ai,Aitana. ¡Te quiero tanto!