"Empezar de Cero" +18

Cap 31: "El plan"

-Pasen -murmuré abriendo la puerta, permitiendo el paso a mis amigos; mi casa esta silenciosa, solo un pequeño papel me espera en la entrada. Lo tomó y cierro la puerta con llave detrás de nosotros.

Los chicos suben las escaleras, la casa esta vacía. Desdoblo el papel y leo un simple «Todo saldrá bien, nos vemos en poco tiempo ❤», Aki, todo saldrá bien, tienes razón.

De acuerdo al plan, tomo un celular que estaba en un cajón. Llamó a Aki, y sin hablar, luego de ver que toman la llamada, lo vuelvo a guardar en el cajón.

Sigo el paso de mis compañeros, y al llegar a la planta alta, los veo trasladando el colchón de la cama de mi hermana, a la mía. Cuando terminan con eso, cierro la habitación de Aki y de mamá con llave.

Entro a mi habitación, los otros tres me miran expectantes. Cierro la puerta detrás de mí, poniendo, como en las anteriores, un seguro.

Deposité cuatro cuchillos sobre mi mesa de luz, el ambiente se siente tenso, pero decido no hacer nada para cambiarlo. Tomó otro celular que estaba en mi habitación, y repito lo mismo que antes, solo que esta vez, llamo al padre de Lay, y vuelvo a guardar el teléfono.

En el mismo silencio, Kim y Akay se acuestan en el colchón que dejaron frente a mi cama, y Lay y yo nos acostamos en el mío. Aunque sea difícil, intentaremos dormir un poco, actualmente son las 5 am, el mismo día que escapamos de ese lugar.

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-Kim, Lay, Akay, es hora -digo al despertarme y escuchar que alguien intenta forzar el picaporte en la planta baja- estos asienten, y se meten en el placar de esta misma habitación, primero pasa Lay, luego Kim y finalmente, entra Akay, quien esta temblando. Antes de cerrar la puerta de esto, les paso un cuchillo a cada uno, dejando uno para mí.

Me recuesto en mi cama nuevamente, tapando mi cuerpo y cabeza con la manta, sosteniendo el cuchillo frente a mí, listo para cualquier cosa. Mis manos tiemblan, pero me convenzo a mi mismo de que todo saldrá bien.

Finalmente la cerradura de abajo es abierta, asomo la cabeza por la sábana, viendo por última vez el reloj, que marca las 6:32 am. Lentamente los pasos suben por las escaleras, no puedo contar cuantas personas se acercan.

-Revisen abajo, y ustedes las otras habitaciones. -escuché levemente, dándome la certeza de que son más de tres hombres.

La puerta se abre un momento después, y escucho que se carga un arma. Intentando mantenerme tranquilo, empuño el cuchillo, sintiendo los pasos que se acercan a donde estoy y toman la parte superior a la sábana.

Un vez que descubre hasta mi oreja, me abalanzo contra esta persona. Analizo rápidamente la situación, en una de sus manos lleva la pistola que escuché antes, y con la otra intenta detenerme.

Forcejeo hasta poder quitarle el arma, tirándola lejos de él, cerca de mi ventana. Logro tirarlo al suelo, mientras que con el cuchillo intento apuñalarlo.

Sus lentes oscuros caen mientras peleamos, dejándome ver nuevamente esos ojos verdes, cargados de ira. Escucho que la puerta de abajo vuelve a abrirse, y como, la voz de diversos hombre gritan «Detenganse, esta detenido», a los que supongo son los otros mafiosos.

El hombre que se encuentra abajo mío, intenta alejarme de él con más preocupación que antes, y más cuando se escucha que empiezan a disparar en la planta baja.

En un descuido de este, logro por fin apuñalarlo, en el único ojo que tiene sano. Pero antes de poder hacer algo más, otro hombre me toma por la espalda, haciendo que libere al «Jefe». Este último aprovecha para alejarse, rompiendo la ventana de mi habitación para poder huir.