Quartet Night Crash a Wedding

CENA

Una decisión tomada, una oportunidad ofrecida. Tres semanas para el viaje y Ranmaru todavía no tenía la oportunidad de conversar al respecto y hacer las paces con Reiji.

Posterior al acuerdo violento y resolución tomada con Camus presente; los cuatro miembros buscaron retomar sus vidas dentro del departamento como si nada hubiera pasado. O al menos así pareció en un inicio.

A partir del día siguiente a lo ocurrido, Reiji empezó a evitar pasar tiempo a solas con Ranmaru. Si se encontraban los cuatro presentes actuaba con normalidad y simulaba su estado. A penas los menores se retiraban y los dejaban solos, el castaño buscaba cualquier excusa para desaparecerse de su vista rápidamente. De igual y extraña forma pareció perderse su relación física; desde aquel altercado no se habían vuelto ni a acostar ni a dormir juntos.

Asimismo, ya se encontraban en el último mes de trabajo dentro del contrato. Podía asumirse debido a ello que tampoco estaban compartiendo trabajos. Cada uno de los miembros asistía a sus labores independientemente y su tiempo compartido se veía reducido. Ranmaru creyó que al menos resultaba bueno que al mayor no se le haya ocurrido huir de nuevo pese a todo lo pasado.

Ai, fue quien les informó tanto a él como a Camus que no logró hacer cambiar de opinión a al castaño durante su salida en la noche, pero que al menos le había hecho prometer de continuar con ellos por el tiempo que les quedase como grupo.

El de ojos bicolor maldijo más de una vez en voz alta el comportamiento evasivo de su compañero desde ese momento, pero ante la mirada seria contra atacante de los otros dos miembros del grupo supo que la culpa no solo era del mayor, sino también suya.

Fue así que finalmente asumió que debía conversar con él al respecto y conciliarse. Resultaba de por si estresante sentirse evadido.

Ai y Camus, parecieron llegar a la misma conclusión tras el avance de los días. Tiempo no había y tenían que arreglar la situación antes del viaje. Por eso, sin comunicarle nada al peli plateado o al castaño ambos volvieron a tomar medidas en el asunto. Una tarde que se encontraban en el departamento esperando al mayor, los dos decidieron desaparecerse.

El peli celeste salió de su habitación y Camus le dio el encuentro en la entrada de la puerta principal. Ranmaru, no se percató de ninguno de sus accionares, pese a encontrarse a pocos metros en la cocina alistando todos los ingredientes para preparar la cena. Su pensamiento estaba centrado contradictoriamente entre la comida y la llegada inminente de Reiji.

Fue el sonido de la puerta principal abrirse lo que llamo su atención. Asumía que se trataría del mayor llegando y cruzando la puerta, pero en lugar de ello contempló a ambos jóvenes alistarse para irse.

- ¿Van a salir? - cuestionó un poco intrigado, puesto que no estaba enterado de ello.

- Con Camus esta noche- quien respondió fue Ai.

Miro a Camus quien no dijo nada al respecto, pero si le seguía el juego, aquello solo podía significar que estaba de acuerdo con ello.

- Reiji no tardará en llegar- continuo el menor- Así que por favor aprovecha en arreglar la situación con él en esta oportunidad.

- ¡¿Ha?!

¿Perdón?

Debió haberlo previsto, pero no lo hizo. Podía esperarse que el menor fuera el más preocupado por Reiji, pero que Camus fuera participe en el acto, aunque fuera de modo neutral, resultaba impredecible.

- Asume las consecuencias de tus actos plebeyo- recibiendo una recriminación por parte del conde supo que había asumido muy pronto su posición.