𝐂𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐀𝐥𝐚 𝐅𝐮𝐞𝐫𝐳𝐚 𝐈.

💍V E I N T I C I N C O💍

•Capítulo 25•

[Semanas después...]

M Í A

—¡Quedo hermoso! -habla una muy entusiasmada Yenny.

—Gracias a ti Yenny, si hubiese sido por mi quedaba horrible, lo mío definitivamente no es la pastelería.

—Cariño... Te quedó muy hermoso, y lo hisiste tú, yo solo ayudé un poquito.

Sonrió. Estos últimos días fueron geniales, la mamá de Chris vino a pasar el fin de semana largo a nuestro departamento, y ahora me estaba enseñando a hacer pasteles. Sí. Ahora soy yo la que quiere hacerlos. Chris se tomó el trabajo de hacer uno para mi y pues yo quería regalarle lo mismo, ahora que falta tan poquito para su cumpleaños, en tan sólo dos días cumplirá 22 años y realmente estoy ansiosa, con los chicos le hemos estado planeado una fiesta hermosa, y cabe destacar que Yenny vino desde tan lejos con el mismo propósito.

Otra cosa que me sorprendió fue una llamada de disculpa, aunque no lo crean la señora mister acoso, alias bruja, o como le decía Brenda, La cruela devil, llamó para disculparse por como nos trató a Christopher y a mi.
Nos pidió perdón, y ahora Christopher se encuentra en un nuevo trabajo, obviamente no con ella. Él y yo seguimos confusos, no creemos en su arrepentimiento, pero por lo menos nos ah dejado tranquilos, ya no tenemos impedimentos. Sin más, presto atención a la muestra de decoración de mi suegra.

—Y así queda perfecto el glaseado mi pequeña... -nueva técnica... ¡aquí vamos!

[...]

Definitivamente esta clase de pastelería me dejo agotada, pero me reconforta saber que no me fue tan mal, es más, hasta no se me quemó el bizcochuelo, ¿pueden creerlo?, ya me siento pastelera.

En fin, luego de terminar mis clases con Yenny, me dediqué a hacer mis tareas escolares, y Yenny fue a darse una ducha. Estaba algo sedienta cuando decido ir por algo de tomar a la cocina, estaba distraída cuando de la nada siento unas manos en mi cintura, pego un gritito y oigo una risa muy familiar.

—Hola... -susurra luego de reírse de mi- te extrañe...

—¡Christopher! -chille- me asustaste. -reclamo tratando de hacerme la enojada, el me mira y enarca una ceja sacandome una sonrisa-. Yo también te extrañe. -le sonrió.

C H R I S T O P H E R

Una vez escaneado el lugar, no veo a mi madre por ningún lado. Sin más tomo a mi pequeña de la cintura y la sorprendo, ella simula enojarse pero luego me sonríe.

Vuelvo a escanear el lugar, y mi madre nuevamente no está. Sin aviso y muy rápido le robó un beso a mi pequeña.

—Yo te extrañé más. -ella se sonroja pero aún así se pone de puntitas y me da un pequeño beso.

¿Dije que ahora actuamos como novios?, sonrió y la abrazo. ¿Qué haría sin mí pequeña?, definitivamente no lo sé.

—¿Cómo te fue amor? -le pregunto-. ¿Qué hicieron mi madre y tu?

—Pues... -ella sonríe toda inocente- es cosas de chicas, y tú -toca mi nariz con su dedo- no puedes saber. Pero... ¿Sabes? Tú mamá me dijo que se quedara hasta el Miércoles ¿no es genial?

—Si me das otro besito me olvido de lo que hicieron mi madre y tú... -la extorsiono y ella lo medita y vuelve a darme otro besito- ahora sí. ¿Entonces se queda dos días más? -mi pequeña asiente- que mal...

—¡Chris es tu mamá! -me regaña y yo río.

—No amor, no me malinterpretes, no lo digo por eso, lo digo porqué no me gusta no poder darte besos o abrazarte... en fin, ya sabes.