Amor felino

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                                               🔞🔞🔞🔞ATENCIÓN🔞🔞🔞🔞
Éste capítulo contiene escenas no aptas para menores de edad, si no te sientes bien al leer este tipo de contenido o no tienes la mayoría de edad puedes omitirlo. La historia no avanza mucho y no hay problema alguno si no lo lees.

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Luzu no paraba de gritar de dolor, cosa que Auron podía sentir también pues estaba ligado a su Omega, debía actuar pronto si quería que Luzu ya no tuviera tal sufrimiento. Auron cargó a Luzu y lo llevó hasta un lugar más privado, un tanto alejado de la tribu Rattus. Auron no paraba de buscar un lugar adecuado para el acto que estaban a punto de realizar, pero estaba tan nervioso que no podía decidir hacia qué dirección ir, sin embargo Luzu quien estaba en los brazos del alfa detuvo esa búsqueda.

— Auron... no... no puedo más... por favor, házmelo — Esas palabras provocaron un escalofrío en el cuerpo de Auron, tenía tantas ganas como Luzu de hacerlo, así que lo bajó con cuidado a la par que se colocaba por encima de él.

Los dos se fundieron en un beso como pocos, sus lenguas danzaban de un lado al otro y pequeñas ,perdidas se hacían presentes. Auron tomaba el pelo del Omega y le daba caricias, mientras un Luzu enrollaba el cuerpo de Auron con sus piernas y acariciaba su espalda por debajo de sus ropajes. Luzu ya no aguantaba más, quería sentir el miembro de Auron dentro de él. Con un rápido movimiento se puso encima del Alfa y comenzó a despojarlo de su ropa, dejando al descubierto un torso tonificado y con algo de vello. Luzu comenzó a lamer el sudoroso pecho de su amante, a la par que acariciaba las tetillas del Alfa, cosa que a Auron excitaba muchísimo.
Luzu comenzó a bajar con su lengua a lo largo del cuerpo de Auron, a la par que retiraba los pantalones del Alfa, dejando al descubierto unos calzoncillos un poco viejos, pero con un miembro bien marcado listo para salir de la prisión de tela. Luzu comenzó a lamer a Auron por encima de los calzoncillos, yendo de un lado a otro con su lengua tratando de causar el mayor placer posible. Auron no aguantaba más, el mismo se quitó los calzoncillos para dejar ver su miembro erecto empapado en una mezcla de precum y saliva.
Luzu comenzó a lamer con delicadeza cada parte del pene de su Alfa, le agradaba su sabor y su olor le prendía cada vez más. De un solo movimiento introdujo el miembro en su boca de la punta a la base y comenzó a meterlo y sacarlo a la par que Auron gemía de placer. Después de unos minutos Auron sentía que explotaría, así que levantó a Luzu y ambos quedaron viéndose cara a cara de rodillas. Auron comenzó a besar al Omega de nuevo y ésta vez él sería quien tuviera el control de la situación.
Auron no fue tan delicado como Luzu, éste rompió salvajemente los ropajes del leopardo dejándolo solo en calzoncillos para comenzar a besar cada centímetro de su cuerpo. Besaba su abdomen a la par que rasguñaba su espalda, cosa que a Luzu hacía gemir de placer. Después de poco tiempo era momento, Luzu se recostó boca arriba y colocó sus piernas en los hombros de Auron, estaba listo para aliviar su dolor.

— Auron, vamos, entra... ya no aguanto — Dijo el leopardo.
— Tus deseos son órdenes, mi querido Luzu — Respondió un caliente Auron.

Acto seguido, Auron colocó su miembro en la entrada de su amante y comenzó a entrar poco a poco. La sensación de tener a su Alfa penetrandolo inundó a Luzu de placer, no se sentía como ninguna de las otras veces que había tenido sexo con él, ésta vez era diferente, sentía muchísimo más placer y excitación y el dolor abdominal comenzó a bajar a medida que Auron embestía la entrada de Luzu con movimientos fuertes pero a la vez delicados. El Alfa sin duda sabía cómo moverse.
Auron podía ver la cara de satisfacción de Luzu al ser penetrado, cosa que le excitaba de más. El Alfa tomó entre sus manos el húmedo miembro de su Omega y comenzó a masajearlo a la par que lo embestía. Luzu ya no podía más, sentía demasiado placer, no pasó poco tiempo para que su miembro expulsara chorros y chorros con tal potencia que ensució todo su rostro. Auron al ver tal espectáculo se acercó a la cara del Omega y comenzó a limpiar los restos de semen con su lengua, para finalizar con un candente beso.
Se detuvieron un momento para cambiar de posición, Luzu ahora estaba sobre sus cuatro extremidades y Auron se encontraba de rodillas introduciendo su miembro en el recto del Leopardo. El tigre comenzó a embestir la entrada del Omega a un ritmo normal, el cual fue incrementando conforme el tiempo transcurría. Los gemidos de Luzu podían ser escuchados por cualquiera que estuviese en ese bosque, sin embargo a ninguno de los híbridos parecía preocuparles.
Después de un tiempo Auron ya no aguantaba más. Descargo su jugo dentro de Luzu a la par que éste llegaba a su segundo orgasmo. Ambos híbridos cayeron recostados uno al lado del otro, empapados en sudor y fluidos ajenos. Luzu había dejado de sentir dolor, para sentir una calidez deliciosa que recorría todo su cuerpo, jamás se imaginó lo bien que se sentiría al hacerlo con su Alfa durante su celo.

Cuando se recuperaron, ambos buscaron un cuerpo de agua donde poder darse un baño. Al finalizar se vistieron con la mojada ropa producto de la calentura del momento, sin embargo como Auron había roto los ropajes del leopardo, éste tuvo que conformarse con usar la capa del Tigre. Ambos se dirigieron al pueblo Rattus, en busca de alguna tienda que vendiese algo de ropa.

Después de unos cuantos minutos ambos felinos se encontraban frescos como lechugas y con sonrisas de oreja a oreja. Lo que acababan de vivir no lo olvidarían jamás. Caminaron un poco más por el pueblo en busca de sus compañeros y lograron encontrarlos escondidos tras unos barriles, observando al chico ratón mientras se encontraba formado en la fila de la panadería.

— ¡QUE VAYAS SUBNORMAL! — Dijo Rubius a un búho nervioso y preocupado.
— ¿Que no ves que me tiemblan las piernas? No parece que detecte mi olor, qué tal que no soy su Alfa destinado — Dijo Fargan.
— Lo eres, pero nunca lo sabrás si no vas a hablar con él — Respondió Samuel.
— Bueno, está bien... iré— Fargan se armó de valor y se dirigió hacia hermoso chico que tanto ponía nervioso al búho.

— ¿Pero como? Pero si yo huelo pan recién horneado, ¿como puede ser que no estén horneando nada en este momento? — Dijo un Alex un tanto sorprendido al panadero del pueblo.
— Emm... di.. didisculpa — Fargan había tocado con la punta de su ala derecha el hombro de Alex, el cual volteó tan pronto oyó la voz del búho. Cuando lo vio, se quedó boquiabierto. Alex nunca había visto un híbrido que no fuese un Rattus, pues los Owlen solo bajaban por las noches para recoger los víveres que su tribu cultivaba y a esa hora Alex solía encontrarse en su casa leyendo algún libro pues no era mucho de salir. Se encontró con un alto búho de plumas brillantes color marrón, portaba un antifaz que le hacía tener un tono un tanto misterioso, su pelo estaba desarreglado y por si fuera poco era sumamente apuesto, además de que el olor a pan parecía provenir de él.
— ¿Si? — Preguntó Alex
— Yyo.. yoyo... Yo meme... me llamo Fafa... Fargan — Fargan no podía controlar su nerviosismo, nunca había hablado con alguien con la intención de hacerse su pareja.
— Oh... mucho gusto, yo soy Alejando pero dime Alex — Dijo Alex mientras extendía su mano hacia el búho.
Fargan se quedó pasmado, su pánico se apoderó de su cuerpo y parecía estatua pues no parecía reaccionar. Al ver la situación, el grupo de 4 se acercó hacia dónde estaban conversando y trataron de amenizar la situación.

— No te fijes, está un poco nervioso, eso es todo — Dijo Samuel.
— ¿Y quien no lo estaría? Después de conocer a tu destinado por primera vez es normal estar nervioso — Respondió Auron.
— ¿Su destinado? Ósea que él... — Alex se quedó justo como Fargan, pasmado ante la noticia... no cabía duda de que eran el uno para el otro.

Espero les haya gustado mucho. Es la primera vez que escribo este tipo de contenido y no se qué tal lo hice, espero me disculpen jajaja

🌟 The Journey 🌟 (Rubegetta AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora