ABISMO [Jookyun]

A L T U R A

- ¿Te podrías poner esto? – preguntó Jooheon cuando detuvo el auto en uno de los semáforos después de estar cerca de 20 minutos manejando.

- ¿Quieres que cubra mis ojos? – miró la prenda con recelo.

- Solo será por un rato – prometió – por favor – pidió con un tono de voz bastante tierno para la forma en que lucía. Changkyun no pudo evitar sonreír por la emoción.

- De acuerdo – aceptó y se llevó la prenda a los ojos y la anudó atrás de su cabeza, el auto volvió a ponerse en movimiento y Changkyun se puso muy ansioso de repente.

No sabía a donde lo llevaría Jooheon.

No sabía si debería estar ahí.

Sin los supresores estaba tan vulnerable...

Tan expuesto que no se sentía del todo seguro.

- Pequeño – la voz preocupada de Jooheon lo atrajo a la realidad nuevamente - ¿Pasa algo? – preguntó levantando levemente la tela que descansaba sobre el ojo izquierdo.

- Estoy bien – miró los ojos del alfa por un par de segundos.

- ¿Estás seguro? – cuestionó sin quitarle la mirada de encima – Si no te sientes bien así puedes quitártela – subió la tela un poco más, pero Changkyun lo detuvo.

- Estoy bien – repitió con cuidado, bajando despacio la mano del alfa – Conduce – sonrió – no hagas que me arrepienta de haber venido – tapó su ojo de nuevo.

Jooheon lo hacía sentir seguro, de eso no cabía duda, sólo estaba preocupado por el lugar al que irían, no quería causar problemas.

El auto se puso en marcha una vez más y no se detuvo hasta varios minutos después.

- No vas a secuestrarme y luego matarme ¿Verdad? – rompió el silencio con su pregunta, provocando una carcajada en el mayor.

- Por supuesto, es justo eso lo que haré – habló serio y se quedó esperando una reacción del menor, pero éste se quedó en silencio – Estoy bromeando, pequeño – aclaró - ¿No te inspiró confianza? ¿No confías en mi ni un poco?

- Sí, sí confío en ti – respondió el omega después de unos segundos, con una leve sonrisa dibujada en la comisura de sus labios.

- Es suficiente para mí – dijo el alfa satisfecho con la respuesta.

- Llegamos – anunció Jooheon una vez que apagó el coche, Changkyun llevó sus manos a la tela que cubría sus ojos, pero el alfa lo detuvo con las suyas – No, no. No he dicho que te la puedas quitar – ajustó la prenda alrededor de los ojos del omega para que no espiara y sonrió, aunque el menor no podía verlo – Espera – pidió y acto seguido salió del auto.

La puerta del lado de Changkyun se abrió y el alfa, después de quitarle el cinturón, lo tomó de las manos para ayudarlo a salir y aseguró el auto.

- Muy bien – habló mientras guiaba al omega – solo camina – Changkyun obedeció bastante ansioso, esperando no tropezar, Jooheon lo estaba rodeando con uno de sus brazos por la espalda, y con su otra mano sostenía la suya.

¿Cómo podía tener esa temperatura corporal con el frío que estaba haciendo?

Era tan cálido que no quería separarse de él.

- Ya casi llegamos – susurró el mayor – sólo unos pasos más.

- De acuerdo.