Saint sabía que estaba mal, que no debería estar a punto de hacer eso, pero no puede evitarlo, estaba tan caliente que sentía que se ahogaba, y la imagen de Perth gimiendo su nombre era algo para lo que Saint no estaba preparado.
Había soñado que Perth le acariciaba su mejilla mientras él estaba arrodillado ante él a punto de hacerle una mamada, el sueño lo mantuvo despierto casi toda la noche hasta las dos de la madrugada que no pudo aguantar más pensando que quizás ese sueño sea la manifestación de algo que quiere y anhela, tenía una jodida erección que no lo dejaba dormir en paz, por lo que estaba frente la habitación de Perth, A punto de tocar la puerta, pero no lo hizo, en cambio se atrevió a poner la mano en la perilla de la misma y bajarla para darse cuenta de que no tenía seguro.
Entró con pasos silencioso arrastrando un poco sus pies envuelto de aquellas medias blanca de algodón, se acercó a la cama en donde se encontraba Perth durmiendo boca abajo; tenía una mano bajo la almohada y la otra estirada en la cama con la palma hacia arriba, no tenía suéter y llevaba solo un pantalón blanco de pijama. El cabello lo tenía enmarañado en su frente y tenía el ceño fruncido.
Saint se rio.
— Perth... Despierta. — Saint movió un poco su hombro, para hacerlo despertar, pero Perth solo se movió, y no despertó por lo que Saint hizo un poco de fuerza y despertó a Perth exaltándolo haciendo a Saint retroceder un paso por el susto.
— ¿Saint? — preguntó al verlo de pie frente suyo —¿Qué pasa, que estás haciendo aquí? — se despierta completamente y se sienta a el borde de la cama mirándolo interrogante.
— Yo.... eh... yo, necesito que me ayudes con algo — Saint se acerca a Perth y se sube a su regazo. Perth abre los ojos por la sorpresa y coloca sus manos en sus caderas deteniendo el avance del contrario a su parte intima.
—¿Qué estas haciendo?
Perth se veía por demás lleno de pánico, mirando sin comprender lo que Saint esta haciendo, Saint solo mira su expresión y por un momento siente vergüenza, pero ya estaba ahí no tenía por qué desistir ahora.
— Te necesito.
— ¿Qué?
— Necesito aliviarme, ayúdame.
Perth hasta ese momento no entendía que estaba ocurriendo; ¿de verdad Saint estaba en su regazo con las manos en sus hombros viéndose todo deseable frente de él, ¿acaso estaba soñando, había tomado tanto? pero se sentía tan real.
Pero no podía ser real, Saint lo odiaba.
— No te entiendo, Saint. — el nombrado notó el ligero olor a alcohol que desprendía Perth, por lo que muy probable Perth esté aun tomado.
— Yo no sé, — se rio — ni si quiera sé porque estoy aquí. Solo hago lo que mi cuerpo me está pidiendo.
— ¿Y qué te está pidiendo?
— Esto — Saint tomó la mano de Perth que estaba en su cadera y la llevó suavemente hasta su entrepierna. — quiero hacerlo — Perth se dio cuenta de la erección de Saint entendiendo perfectamente a que se refería.
— ¿Estás seguro de que quieres que lo haga? — pregunta Perth, y él contrario la verdad no estaba seguro, Saint solo estaba caliente muy caliente y quizás el olor de Perth a alcohol lo estaba emborrachando también, o quizás las imágenes de Perth con aquella mujer lo estaba matando de celos, no sabía cómo se sentía. en realidad, sus sentimientos estaban muy confusos, pero de una cosa si estaba seguro; quería volver a escuchar su nombre de esa manera otra vez.
— Si lo estoy — y Perth solo lo mira por unos buenos segundos y entrecierra los ojos un momento, como debatiendo si estaba escuchando bien, o si lo que estaba pasando era real.
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Eres Mío Pequeño Vol.1 [EDITANDO]
FanfictionSaint un chico que lo perdió todo; a su familia a sus amigos y decide acabar con su vida una noche pero para su suerte o desgracia en su intento, una persona le salva la vida. poniendo está en sus manos.. Perth este hombre que salvó la vida de este...